LOVE ME, harry potter

27. Sí, una cita

-¿Crees que debería hacerlo? -preguntó la voz de Harry.

-¿Hablas de la idea de Hermione? -inquirió Dylan. Harry asintió- yo creo que es una buena idea.

-No lo sé..

-Vamos.. -le insistió Dylan- no tienes nada que perder.

-¿Dignidad?

-¿A poco tienes?

Harry le lanzó una mirada de irritación que hizo sonreír a Dylan.

-Mira, mañana será la reunión en Hogsmeade -comenzó Dylan mientras se levantaba de su cama y se sentaba en la de Harry, que apartó los cientos de pergaminos que tenía a su alrededor- si vas sin quejarte a la reunión, y aceptas enseñarnos Defensa, puedes pedirme cualquier cosa.

Harry alzó una ceja al mismo tiempo que una sonrisa comenzaba a formarse en su rostro.

-¿Cualquier cosa? -preguntó ladeando la cabeza, y Dylan lo comparó con un perrito curioso.

-Que esté dentro de mis posibilidades -añadió. Harry rió.

-Lo acepto -dijo Harry asintiendo, para después bajar la vista y suspirar al ver el desastre que era su cama de pergaminos y tinta.

-¿Quieres ayuda? -preguntó Dylan comenzando a recoger los pergaminos- es gratis.  

-Mientras sea gratis.. -bromeó Harry.

Pasaron como alrededor de una o dos horas mientras Dylan intentaba explicarle a Harry lo que no comprendía de la teoría, por que el azabache era muy bueno con la práctica. Seamus y Dean pasaron por el dormitorio y los saludaron, sonriendo miesteriosamente, para después volver a salir y dejarlos solos de nuevo.

A eso de aproximadamente las ocho de la noche, tocaron la puerta de la habitación.

-¡Pasa!

Hermione se asomó por la puerta.

-¿No está Ron? -inquirió entrando y cerrando la puerta tras de sí. Ambos hicieron ruidos de negación y ella alzó un pergamino- le traje su ensayo corregido, me sorprendió que casi no tuviera errores.

-Seguro su amorcito lo ayudó -canturreó Dylan haciendo reír a ambos. Hermione caminó y dejando el pergamino en la cama de Ron, se acercó a ellos, mirando los pergaminos con curiosidad.

-¿Cómo lo llevas? -preguntó Hermione haciéndose un espacio al lado de Dylan.

-Casi termino -respondió Harry empujando las gafas por el puente de la nariz, ya que se le estaban resbalando.

-¿Tú que hacías? -preguntó Dylan a su mejor amiga.

-Lavender y Parvati tenían un día de chicas en la habitación -suspiró resignada- no me dejaron salir hasta que me pintaron todas las uñas.

Alzó ambas manos, dejando ver el color azul.

-Se ven bien, quejona -dijo Dylan rodeándola con un brazo- necesitas amigas, no aguantarás estar con nosotros todo el tiempo.

-Lo he hecho durante cuatro años, puedo aguantar más -se burló Hermione.

En ese momento, la puerta de la habitación se abrió, dejando ver a un Ron con un sonrojo hasta el cuello y jadeando. Dylan alzó las cejas.

-¿Y a ti que te pasó?

Ron abrió la boca y luego la cerró, varias veces, y si era posible, se sonrojó aún más.

-¡Ron!

-Besé a Ben.

El chillido de Hermione se escuchó por toda la habitación. Dylan lo miraba con la boca abierta y Harry con orgullo.