LOVE ME, harry potter

36. La salida triunfal

Dylan caminaba por uno de los tantos pasillos de Hogwarts. Había estado con Lucas minutos atrás, escondidos en un aula abandonada para que ningún Slytherin los viera. Habían hablado de las últimas semanas y las clases.

Y ahora se dirigía a la Sala Común, a adelantar algunos deberes y descansar un rato. A lo lejos, pudo ver a Olivia Bellerose y la saludó con la mano, a lo que ella devolvió el saludo con emoción.

Iba a doblar hacia el pasillo donde se encontraban las escaleras móviles, cuando alguien chocó contra él y lo hizo tambalear.

-Lo.. lo siento.

-¿Harry?

El azabache lo miró con terror y retrocedió. Su mirada estaba perdida y sus labios apretados. Dylan lo miró preocupado.

-¿Harry..?

-Necesito estar solo -pidió el ojiverde antes de irse rápidamente. Dylan estuvo a nada de seguirlo, pero quiso respetar su decisión. Con un nudo en el pecho subió hasta la Sala Común y fue directamente al dormitorio.

No pudo concentrarse en los deberes. Estaba tan preocupado que su mente viajaba constantemente hacia su novio, y su consternación en el rostro. Estuvo a nada de salir directo a buscarlo, pero sabía que debía respetar su privacidad.

Ron llegó al dormitorio a eso de las siete de la tarde, sólo para dejar sus cosas y bajar a la sala común. Dylan se obligó a concentrarse, y para las diez de la noche todos habían vuelto al dormitorio, menos el azabache.

Ron preguntó por él y Dylan no supo darle una respuesta. A eso de las once y media, cuando todos estaban dormidos y Dylan no podía dormir, la puerta del dormitorio se abrió. El castaño se sentó en su cama para vislumbrar a Harry entrando con cuidado al cuarto, con los ronquidos de los demás de fondo.

-¿Harry?

El azabache se sobresaltó un poco, pero se giró. Dylan estaba en su cama, mirándolo con preocupación. Harry se sintió terrible por haberlo apartado de él de esa manera horas atrás, pero necesitaba enfriar sus ideas, aunque eso no haya servido mucho.

Dylan se levantó de su cama y fue hasta Harry, apretándolo entre sus brazos. El azabache se relajó, ni siquiera había notado lo tenso que estaba su cuerpo. Dejó su mochila en el suelo y rodeó el torso de Dylan, hundiendo su rostro en su pecho.

Dylan lo apretó contra sí, buscando reconfortarlo de alguna manera.

-¿Quieres cambiarte de ropa? -preguntó contra su cabello. Harry asintió sin despegarse de él.

-¿Puedo dormir contigo? -preguntó por lo bajo.

-Siempre que quieras, Haz.

Harry se separó de él y evitó mirarlo a los ojos mientras iba hasta su baúl y se cambiaba de ropa a su pijama. Dylan se sentó en su cama y esperó pacientemente a su novio.

Harry se internó en el baño durante unos minutos, para después salir y rescostarse al lado de Dylan. Este lo acercó a hacia sí, sin soltarlo. Sentía la respiración de Harry contra su cuello.

Pasaron unos cuantos minutos más, en silencio, escuchando los sonidos nocturnos, hasta que Harry habló.

-En la clase de Oclumancia con Snape -empezó aferrándose a la ropa de Dylan. Este enterró una mano en su cabello y comenzó a trazar formas irregulares, buscando calmarlo un poco- accidentalmente vi sus recuerdos.

Dylan hizo un ruidito de afirmación, dándole a entender que lo escuchaba.

-Y vi a mi padre, con Sirius y Remus -dijo lentamente, para después tomar aire- y ellos... ellos se burlaban de Snape y.. lo hechizaban y...