Safe With Me {Newt & Lectora} Maze Runner - Finalizada

#33 Jorge

Fueron unas horas más tarde cuando finalmente sintió que despertaba con una mano sacudiéndole el hombro con cuidado. Extremo cuidado, incluso sintió un pequeño temblor de parte de esta persona. Posiblemente temiendo lastimarla mucho más de lo que la tormenta pudo haberla dejado en ese estado. Abrió sus parpados con desgana, siendo recibida por la luz del día. 

Era Thomas. 

—¿Cómo estas (t/n)? 

Fue lo primero que le pregunto en esos momentos. Escuchándole solo por uno de sus oídos, la sensación era fastidiosa, como si el otro odio estuviera tapado por agua que insistía en quedarse ahí. 

—Tan bien como podría estar. 

—¿Necesitas algo? 

—Uh... — contesto quitándose la suciedad de los ojos — posiblemente un paño húmedo para limpiar mi oreja. 

El chico asintió sin moverse pronto, ella movió su cabello con unos mechones tiesos por el tacto con la sangre que los toco, pero a (t/n) no le importo cuando solo lo quitó de encima, revelando una herida sangrante. Pero la sangre ya estaba seca en esos entonces, Thomas no pudo evitar preocuparse. 

Continuaba adormilada. Ni siquiera presto atención a que Minho se estaba reincorporando, mientras que Newt tomaba una botella y un trozo de tela que mojo mientras camino hacia su novia. 

—Tommy me comento que tienes una herida que debería de curar — sonrió él —. ¿Te duele? 

—No. 

Contesto prontamente (t/n) mirándole. Sonrió, levemente, al menos. Miro a su alrededor, era tan claro que había menos personas de las que hubo cuando comenzaron a correr en todos esos momentos. 

—Tuve mucha más suerte que Minho, ese rayo pudo caerme encima, pero cayó a mi lado — ella volvió a hablar nuevamente, con tono animado cuando noto al chico asiático ahora sentado, con el cabello revuelto y sucio, con sus prendas chamuscadas, y negras —. ¿Cómo pudo haber sobrevivido? ¿De qué está hecho ese shank? 

Newt había dejado escapar una risita cuando paso la tela sobre la piel de ella. Comenzando a quitar la sangre de ahí como podía. Pronto la tela de la sabana que había sido blanca era carmesí. 

—¿De verdad no te duele? — volvió a preguntar —. 

—Ya no. — soltó un suspiro — Lo único que puedo decir es que recuperare la audición en ese oído en unas semanas. 

La sonrisa en el rostro de Newt se fue borrando. Era inteligente, pensó en esa posibilidad, pero no quería creer que fuese completamente verdad, o que existiera la posibilidad de un tipo de daño. 

—Tienes suerte de que haya quedado sorda en un solo oído Newt — ella se burló —, o no podría escuchar nada de lo que me dices. 

—Que buena eres para calmarme, amor. 

—Solo quería bromear — volvió a sonreír —, solo espera unas semanas y estaré tan normal como siempre. 

Atrapados en su propia conversación no consiguieron escuchar una voz extra que le contestaba a Minho. Pronto, (t/n) se sintió incomoda, mirando hacia arriba, notando a un hombre que nunca había visto en su vida. Newt se detuvo cuando noto lo tensa que estaba, mirando hacia el sitio en donde los ojos (c/o) de ella se detuvieron. 

—¿Quién eres? — grito Minho —. 

El hombre salto entre el hueco de escombros formado entre los techos y se lanzó hacia ellos. En el último segundo se transformó en una bola humana y rodo tres veces. Luego dio un brinco y aterrizo con los dos pies.