—Eso fue ridículo—hablo Jules cuando salimos de nuestra primera clase con Umbridge. —No nos enseñó nada, simplemente nada.
—El Ministerio está que interviene en Hogwarts—hablé apretado los libros contra mi pecho.
—Ann...—nos detuvimos en un pasillo, para que nadie nos escuche. —¿De verdad crees que Voldemort volvió?
—¿Por qué dices eso? —la mire seria. —¿Acaso también crees lo que dice el Ministerio?
Jules me miro dándose cuenta de su error. —Disculpa, es que...mi padre me ha dicho que Potter solo esta demente.
—Mi padre es un mortífago—confesé susurrado.
—¿Qué? —me miro asombrada. —¿Estás segura?
—Sí—mire alrededor. —Todo el verano mi padre se reunió con...Quien-Tú-Sabes.
Jules bajo la mirada y se acercó. —¿Y Eliot...lo es?
—No—negué de inmediato. —Pero, tiene planeado serlo...
Jules seguía con la mirada hacia abajo y me acerque para agarrar su brazo suavemente.
—Jules... ¿estás aún enamorada de Eliot?
—No lo sé—admitió. —Ya no siento lo mismo que antes, he estado pasado mucho tiempo con Blaise y...—le empecé a codear haciendo que se sonroje. —Yo, eh, bueno, creo que estaría bien darle una oportunidad a Blaise.
—Sabes que solo quiero que seas feliz—le sonreí. —Sea con quien sea.
—Yo también quiero que seas feliz—me abrazó. —Muy feliz.
Las semanas realmente se pasaban rápido. Umbridge si ya de por si era insoportable, ahora es peor porque la convirtieron en Suma Inquisidora de Hogwarts.
—No la aguanto—susurro Jules mientras veíamos como Umbridge hablaba con Snape.
Por fuera del Gran Salón estaban llenas de puros decretos puestos por Umbridge, literal, quería que todo se haga a su modo.
—¿Qué me quieres enseñar? —agarre del brazo a Fred.
—Es una sorpresa—murmuro sonriendo. —Sé que prohibieron nuestros productos, pero tengo uno escondido especialmente para ti.
Llegamos al patio en donde estaba George, vigilado.
—La cara de sapo esta fuera de área—afirmo George.
—Gracias hermano—Fred me agarro suavemente de la mano para ponernos detrás de un árbol. –Ann, como sabes es mi último año, y necesito...necesito decirte esto.
Lo mire atenta, esperado que me diga algo, sin embargo, metió su mano al bolsillo, sacado su varita e hizo un pequeño movimiento.
Unas pequeñas chispas rojas aparecieron y me rodearon, hasta que se detuvieron frente mío para formar unas letras.
—"Eres un sol—empecé a leer, — eres tentadora, mi mano está en riesgo, necesito decirte que te..." —las chispas al instante desaparecieron.
—He dicho nada de sus productos, Weasley—hablo Umbridge detrás nuestro. —Señorita Rosier, le recomiendo que no se junte...con esta clase de personas.
Mi paciencia había acabado, con todo el valor del mundo decidí decir algo.
—Creo que estoy muy grande para saber con quién me junto, profesor Umbridge—hablé con seriedad.
Umbridge cambió su rostro a una amargada. —Sería bueno que hablará con su hermano, señorita—volvió a sonreír con hipocresía. —No creo que le guste su amistad.
—Mi hermano tiene demasiadas cosas en mente, para ocuparse de mí—sonreí con falsedad. —Solo digo.
Umbridge nos dio una última mirada y se fue.
—¿Qué fue eso? —Fred empezó a reír. —Mi Anne no se hubiera atrevido a hacer eso.
—Creo que...—sonreí, —tomé mucho valor para hacerlo.
Fred se recostó en el árbol, me miro unos segundos y jalo de mi mano para quedar entre sus brazos.
—¿Podrías quedarte? —me miro a los ojos.
—¿A dónde más iría? —empecé a reírme.
Fred sonrió y miro nuestras manos. —Sabes, creo que mi futuro está más allá de Hogwarts.
—¿A qué te refieres? —pregunté sin soltar su mano.
—Ya verás a lo que me refiero—sonrió. —Eres muy preciosa, ¿lo sabes?
Me sonroje. —A veces no entiendo porque me dices esas cosas.
—Mi corazón me dice que te diga todo eso—me abrazó. —Annette.
—Cállate—murmure algo avergonzada. —Sabes que no me gusta mi nombre.
—Me gusta ver cómo te enojas—sonrió. —Me gusta mucho.
ESTÁS LEYENDO
Mi pequeña Anne ↯ ┃DRACO MALFOY┃
FanfictionAnne Rosier, por generaciones su familia ha pertenecido a Slytherin, a excepción de ella, una Hufflepuff, convirtiéndose en una deshonra para su familia. Luego que entro a Hogwarts ha recibido burlas de parte de sus compañeros. Para su mala suerte...