No perteneces aquí. ll
10/Marzo/??
18:15 p.m
Oletus ManorLa castaña miraba a su alrededor como todo se desmoronaba, ¿cómo podía tomar semejante decisión? no podía entregar a sus amigos y al amor de su vida para salvarse así misma, sin embargo, tampoco quería ser castigada por la "traición" de la cual se le acusaba.
—Samantha, te estoy ordenando que los entregues, te dejé vivir, te dí un techo, comida, trabajo –la voz del anfitrión resonaba por su cabeza —Tienes que obedecerme, me perteneces.
¿Cómo habían llegado a esta situación? Déjenme retroceder un par de días al primero de Marzo, cuando me presenté con las personas en la mansión y fuí honesta con ellos.
—No puedo hacerles esto –bajó la cabeza, se sentía culpable por ser la persona que siempre debía dar la cara por el dueño del lugar.
En el tiempo que llevaba observando a los actuales residentes de la mansión, había desarrollado un cariño por ellos, de todas las generaciones que habían llegado al lugar, ellos eran los más unidos, parecían una familia de verdad.
Mordió su lengua pensando que hacer para salvarles, no podía dejarlos morir como a las personas que estuvieron antes en su lugar.
—Tengo que sacarlos de aquí –se levantó de la silla y comenzó a desconectar todo en la sala, algunos la miraron como si estuviera loca.
—Pero dijiste que.... –Samantha interrumpió a Tracy hablando un poco alterada.
—¡Sé lo que dije! Es solo que les veo y... –sus palabras se quedaron en el aire, Aesop siempre fue una persona que se fijaba en los detalles, vió que en sus ojos podía reflejarse el dolor, preocupación, frustración y tristeza.
—¿Por qué no te sientas y te relajas un poco? –ofreció mientras se levantaba de su lugar y se acercaba a ella, tomó su mano y sonrió levemente tirando de ella hasta la silla, donde la sentó y se arrodilló frente a ella.
—Todos ustedes, van a morir –habló, Ann frunció el entrecejo.
—¿A qué te refieres? –preguntó, ella desvió la mirada y una sonrisa triste se dibujó en su rostro.
—Fuí de las primeras personas en llegar a este lugar, era una superviviente, una de dieciséis y cuatro cazadores, claro –sus recuerdos se aclararon y continuó —Todos llegamos aquí con un sueño, algunos querían pagar deudas, otros por la recompensa, y algunos por motivos más personales.
En la sala había un silencio sepulcral, la miraban y escuchaban con atención, nadie quería perderse ningún detalle.
—Pasaron las semanas, meses, años hasta que por fin volvimos a saber algo sobre el anfitrión –Aesop había acercado un poco más su silla hacia la castaña, algo dentro de él quería protegerla —"El último juego se realizará el día de mañana, solo uno podrá obtener su recompensa"
Repitió lo que leyó en la carta que había sido enviada a su habitación y se echó a reír. Todos habían sido unos tontos al aceptar participar en esto.
—Que ingenuos –se burló de sus compañeros y ella mientras sacaba un cigarrillo de la cajetilla que llevaba en los bolsillos del pantalón y lo encendía —Todos estábamos emocionados, nunca habíamos salido lastimados en alguno de los juegos, pero ese día fue todo diferente.
Recordó como se había escondido durante lo que parecieron ser horas dentro de un carruaje en el parque de diversiones cuando era la única faltante.
—Me escondí como una cucaracha, cuando salí había sangre por todos lados, recuerdo que seguí los rastros hasta uno de los sótanos, mis compañeros habían sido colgados en el –sus ojos se inundaron de lágrimas que saldrían en cualquier momento –Faltaba un minuto para que terminara la partida y ellos debían encontrarme, lo hicieron pero antes de que pudieran colgarme el tiempo se acabó.
Se encogió en hombros, la mansión había tenido tiempos más obscuros en donde todo era más violento.
—Ya que los cazadores no terminaron con todos, fuí la única que sobrevivió, el anfitrión me dejó quedarme y bueno, aquí estamos –durante los años que llevaba en ese lugar, había visto a muchas personas entrar por esas puertas, más nadie salía con vida.
—¿Cuántos años tienes? –preguntó Vera después de un minuto en el que nadie dijo nada, no sabían si debían creerle o no, era difícil imaginar lo que les estaba contando.
—128 años –se encogió en hombros, los ojos de Aesop casi salen de sus órbitas y podrían jurar que la boca de Fiona podría haber llegado al suelo de lo impresionada que estaba, Samantha río —Es la maldición de este lugar, no envejeces. Es como una prisión.
Y con esto, puedo contarles bien como es que llegamos al punto donde estamos ahora. Yo, Samantha a punto de tomar una decisión que salvará o no la vida de mis amigos.
—Te estoy hablando, Samantha –la voz del anfitrión la sacó de su burbuja, su mirada se dirigió hacia el y negó con la cabeza.
—Vete al infierno –no esperó esa respuesta, realmente creía que intentar manipularla serviría para ponerla en contra de sus amigos, más no fue así.
—Si me hundo, te hundirás conmigo –comenzó a acercarse a pasos lentos hacia donde ella y Aesop se encontraban, solo faltaba sacar al de cabello platinado de la mansión para que todos estuvieran a salvo.
—Que así sea –su mirada pasó de ser una confusa a una retórica, estaba dispuesta a sacrificarse si así los podía salvar a todos.
—Sam, no. Buscaremos otra opción. –ella negó con la cabeza y su mano se colocó en la mejilla ajena.
—No hay más opciones, una persona tan pura y buena como tú no pertenece aquí –los ojos de Aesop se inundaron en lágrimas —Anfitrión, hagamos un trato. Me quedaré para siempre en este lugar, si los dejas ir, a todos.
El nombrado alzó una ceja y comenzó a reír sarcásticamente mientras le veía divertido.
—¿Por qué haría algo así? –preguntó, Samantha apretó sus puños.
—Porque me necesitas –lo dejó sin habla, esas tres palabras eran verdad, la necesitaba para encontrar lo que tanto había deseado hallar.
—Acepto el trato, ahora ven acá –su mano se extendió hacia ella, quién antes de tomarla habló.
—Primero déjalos ir –asintió y ordenó a las personas que bloqueaban las salidas de la mansión que abandonaran sus puestos.
—Espero puedas perdonarme, Aesop –antes de que pudiera decir algo, sintió un pinchazo en el cuello, le había inyectado un somnífero, pues sabía que el nunca le permitiría hacer el trato.
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Chérie - identity v | o.s
Fanfiction- ̗̀🥀┊Con este libro de one-shots, les traigo capítulos con sus personajes favoritos. - ̗̀🥀┊Actualizaciones lentas. - ̗̀🥀┊Se recomienda leer el libro con el fondo negro para poder apreciar mejor los separadores, disfruten la...