Chérie - identity v | o.s

Jack x Naib

Hice sonar la alarma de Naib. l
Au; basado en el dorama de Netflix"Love alarm"

En la mansión todos se encontraban emocionados, con ayuda de Tracy habían descubierto una aplicación que de alguna forma estaba conectada a tu corazón y cuando una persona estaba cerca de ti, a un radio de diez metros en realidad, y le gustabas, su love alarm sonaría.

Naib rodó los ojos mientras veía a Fiona y Eli como un par de adolescentes enamorados, Martha, que estaba a su lado se echó a reír.

—Todos sabíamos que estaban enamorados, es ridículo que se dieran cuenta por esa basura –se quejó, ella sonrió.

—Oh, debes estar enojado porque tú love alarm no sonó. –canturreó, Naib le miró con desagrado.

—Ni siquiera se cruzó por mi cabeza instalar eso, es una tontería –sus ojos quedaron en blanco, a Martha le pareció buena idea hacerlo por el.

—Dame eso –a pesar de tener tan buenos reflejos, no pudo evitar que la castaña tomara el dispositivo.

—Devuelve eso, ni siquiera debe servir, no deberíamos gastar el tiempo en una estupidez –se quejó mientras hacía el mínimo esfuerzo por quitarle el teléfono de las manos, en realidad, no le importaba mucho, pues no creía que funcuinase la aplicación en realidad.

—No seas amargado, vamos a ver qué tal funciona –la castaña se metió a la aplicación y le dió el teléfono al de ojos azules. —Vamos, presiona el botón.

Sabía que Martha no dejaría de insistir hasta que accediera, por lo que le restó importancia y simplemente presionó el botón. Durante unos segundos hubo un silencio en la sala hasta que sonó y en la pantalla aparecieron las palabras "alguien te ama en un radio de diez metros", su entrecejo se frunció y justo en ese momento, Emma entró a la sala de estar. No era secreto que la pecosa gustaba de el, a pesar de haberla rechazado varias veces, no se daba por vencida.

Emma sonrió y levantó su mano en su dirección saludando, una mueca se formó en su rostro cuando su alarma no sonó al estar dentro del radio de Naib. Estaba a punto de decir que había sido una simple casualidad cuando su alarma volvió a sonar.

—Dos personas te aman en un radio de diez metros –leyó Martha la pantalla de Naib, estaba a punto de decir que ella solo le quería como un hermano cuando esta vez Jack entró a la habitación escuchando música, sin prestar atención a lo que sus compañeros estaban haciendo. —Oh dios mío.

Martha no podía creer lo que acababa de pasar, Naib lo dejó pasar, no podía mostrarse abierto si Emma estaba ahí, pues la coordinadora sabía a la perfección la orientación sexual de su mejor amigo. Se levantó del sillón y en segundos había desaparecido, algunas veces Martha odiaba que fuese tan rápido, sacudió su cabeza y se acercó a Jack dispuesta a sacarle la verdad sea como sea.

—¡Hola Jack! –saludó mientras le quitaba uno de los audífonos y sonreía, Jack hizo una mueca.

—Hola Martha –devolvió el saludo, al igual que lo había hecho minutos atrás con Naib, le quitó el celular de las manos mientras el la observaba, no tenía intenciones de discutir o intentar quitárselo.

—¿Tienes love alarm? –preguntó mientras la buscaba, negó con la cabeza sin siquiera saber que era esa supuesta "Love alarm", sin pedirle permiso en unos minutos también tenía la aplicación en su teléfono.

—¿Qué se supone que es eso? –preguntó mientras observaba curioso como ingresaba algunos datos en su teléfono y se lo devolvía.

—Debes encenderla, si hay una persona dentro del radio de diez metros que te ame, te dirá –explicó, le dió curiosidad por un momento saber si Naib sentía algo por el, pues su corazón le pertenecía al chico de ojos azules y cabello castaño.

—Intentaré probarla –dejó a Martha con la palabra en la boca al igual que Naib, se había alejado tan rápido que incluso le dió intriga descubrir a dónde se dirigía, más no le dió importancia.

El resto del día, Jack buscó a Naib sin ningún éxito, parecía que esa sabandija se escondía de el. Hasta que llegó la hora de la cena, todo transcurrió normal hasta que Naib decidió aparecer después de tantas horas, Jack realmente no había pensado bien que todos en la mesa notarían sus sentimientos por el si estaba en el radio de diez metros, pues si bien una parte de el seguía sin creer que funcionara como decían, otra se encontraba preocupada por ser descubierto.

—¡Naib, ven siéntate aquí! –lo invitó William a sentarse junto a el, Eli, Aesop y Norton. Cuando iba a llegar Jack se levantó rápidamente de donde se encontraba sentado y se alejó por cada paso que Naib daba.

—¿Qué mosca te picó? –preguntó Joseph a su amigo, el negó con la cabeza restando importancia.

—Oh vamos, ven a comer –lo animó Michiko que recién entraba a la habitación y palmeaba un asiento a su lado. Michiko gustaba de Jack, por lo que en cuanto se acercó cuatro alarmas sonaron, todos comenzaron a revisar sus teléfonos.

La alarma de Naib había sonado dos veces, al igual que la de Jack, más nadie se atrevía a decir que era lo que pasaba. Instantáneamente el rostro de Naib se cubrió de un color carmesí que trató de ocultar volteando hacia otro lado.

—¿De quién son las alarmas que sonaron? –preguntó Patricia con curiosidad, las miradas de Jack y Naib se cruzaron durante unos segundos.

—La aplicación no sirve –le restó importancia, intentando evadir el tema, Emma frunció el entrecejo y Michiko mantenía un rostro serio.

—Creo que no hace falta ser un genio para comprender que es lo que acaba de pasar, ¿por qué no salimos del radio de diez metros los que saben que no fueron sus teléfonos? –propuso Martha, ella había notado a la perfección de quienes eran los teléfonos que habían sonado.

—Eso es ridículo, me voy de aquí –Naib intentó escapar, más fue detenido por Emma.

—¿Por qué no me amas?