Chérie - identity v | o.s

Luca Balsa

Sólo tu y yo.

Luca miraba sumergido en sus pensamientos el lago frente al jardín de Oletus Manor mientras intentaba retener las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos. Ese día había recibido una carta en la cual le informaban sobre el desafortunado deceso de _____, su esposa a causa de un fuego cruzado durante un asalto en una pequeña tienda de artículos de bebés y embarazadas, sí; había perdido a las dos mujeres que amaba por culpa de una persona a la que le pareció fácil intentar atracar una tienda de maternidad.

» Pasé mi tiempo sólo pensando en ti. Cada día sí, extrañándote y todas esas cosas que solíamos hacer «

Se culpaba por aquello, quizá si no hubiera terminado en la cárcel lo habría evitado, quizá si no hubiese confiado en quién no debía pudieron haber pagado su fianza y serían una familia feliz, quizá si la hubiera invitado a ir...no, ella no merecía estar en un lugar como lo era la mansión. Andrew lo miró a la lejanía con Tracy a su lado, ambos se mostraban preocupados; en las partidas que habían jugado se encontraba distraído y decaído.

—¿Crees que....? –la pregunta de Tracy quedó en el aire, ambos sabían que su esposa daría a luz y lo que se vino a su mente fue que tal vez había ocurrido un aborto espontáneo.

Se miraron sin saber que hacer, Luca era una persona que no podía permanecer un segundo sin cerrar la boca, hablaba mucho y ese día apenas había respondido a lo que le decían después del desayuno.

» ¿Puedes reunirte conmigo a mitad del camino? justo en el límite ahí es donde voy a esperarte «

—¿Deberíamos preguntarle? –Andrew sabía que la carta que había llegado esa mañana a la hora del desayuno era la causante del humor del castaño pero, ¿qué decía la carta?

Norton se sumó a la conversación, si bien algunas veces odiaban a Luca por parecer un perico, todos notaron el repentino cambio de humor en cuanto sus ojos comenzaron a leer la carta, incluso habían notado que estaban acuosos y le temblaba el labio mientras seguía leyendo la carta.

—Tal vez deberíamos intentar preguntarle, solo no hay que presionarlo –sugirió, si no quería responder, lo podían intentar tiempo más tarde, algunas veces las personas necesitan tiempo a solas.

» Estaré pendiente noche y día. Llevé mi corazón al límite y aquí es donde me quedaré, no puedo ir más lejos de aquí «

El joven castaño lloró en silencio delante del lago durante lo que pareció ser una eternidad, sentía que ya no tenía un motivo para continuar con su vida, los dos grandes amores de su vida se habían marchado. Pensó en diferentes formas de terminar con su vida, cada vez más dolorosas que las otras.

Sacudió la cabeza, a ______ no le hubiera gustado que hiciera aquello pero, ¿cómo podía continuar viviendo sin ella a su lado? cerró los ojos y suspiró. Había tenido miles de conversaciones con ella sobre lo que el otro haría en caso de que uno falleciera, era tan necia y terca que incluso lo había obligado a prometer que no cometería una estupidez si ella moría. Claro, nunca se imaginó que esto pasaría, pensó que eran tonterías que hablaban en la madrugada cuando ninguno de los dos conseguía dormir, que tonto.

» Chica, viajo por todo el mundo e incluso navego por los siete mares, a través del universo y todas las demás galaxias. Solo dime a dónde ir, solo dime dónde quieres que nos encontremos navego yo mismo para llevarme hacia donde tú estás. «

—Deseo con todo mi corazón que estés aquí, me gustaría decirte lo mucho que te amo y significas para mi, dormir una vez más a tu lado, tomar tu mano mientras caminamos, bailar contigo en la cocina –inconscientemente sonrió recordando algunos de los momentos que tuvo contigo.

Recordó cuando se encontraban a mitad de la noche bailando en la cocina de la casa que compartían con la luz del refrigerador. Jugando alrededor de las escaleras. Conservaba una vieja bufanda guardada en un cajón de aquella vez que fueron juntos a la pista de hielo en su primer mes de novios.

Había vivido unos buenos años a tu lado y eran los recuerdos más bonitos que permanecerían para siempre en su memoria. Sabía que debía continuar, no quería hacerlo sin ti, pero lo intentaría; había sido una promesa y quería cumplirla. Limpió sus mejillas y se levantó, los primeros meses serían un reto grande para el, pero al estar rodeado de amigos que te aman las cosas podían ser más amenas. Le dió una última mirada al lago antes de comenzar a caminar dentro de la mansión donde sus amigos esperaban por el.