Luca Balsa

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Noche de películas.

—Amor –la mirada de Luca viajó de unos planos sobre el escritorio hacia ti, sonreiste inocentemente desde el sillón donde te encontraba hace ya una hora esperando a que terminase de "trabajar"

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—Amor –la mirada de Luca viajó de unos planos sobre el escritorio hacia ti, sonreiste inocentemente desde el sillón donde te encontraba hace ya una hora esperando a que terminase de "trabajar".

—¿Qué sucede, cariño? –tus mejillas enrojecieron, amabas que me llamase por un apodo tan dulce.

—¿Terminarás pronto? prometiste que hoy tendríamos una noche de películas y aún no preparamos nada para comer –te quejaste como niña pequeña, el sonrió un poco y su mirada volvió a los planos.

—Lo sé, pero Tracy sugirió que los cifrados debían tener más potencia, así podemos terminar las máquinas mucho más rápido y es lo que intento hacer –una mueca se formó en tu rostro, suspiraste.

—¿Por qué no intentas hacerlo mañana? comienzo a aburrirme –te levantaste y caminaste hasta el, giraste su silla obligándolo a verte mientras colocabas tu mejor carita de "cachorro".

—Oh, no hagas eso –sus brazos se envolvieron alrededor de ti, te atrajo hacia el –Lo prometí, ____.

—También prometiste que tendríamos una noche de películas –respondiste mientras tus manos jugaban con su cabello, enredando tus dedos en su suave y largo castaño cabello.

—Touché –su sonrisa se amplió, cerró sus ojos disfrutando de tus caricias –Me acabas de convencer, vamos a preparar unos bocadillos.

Tu sonrisa se ensanchó, lo tomaste de la mano y en menos de un minuto estaban en la cocina, lo habías llevado prácticamente a rastras; eras de contención.

—¿Qué tal unos sandwiches? ¡Oh, ya sé! ¡Unas galletas! –comenzaste a sacar los ingredientes necesarios, habían tenido tantas noches de películas que sabían el poco tiempo que les llevaba preparar las galletas.

—Al final siempre eliges las galletas –comentó con tono de burla, no quería admitir que le encantaban las esferas, sí, esferas de masa con chispas de chocolate que preparabas. A las cuales llamabas galletas, a pesar de que no lo eran.

—Piensa rápido –evitaste su comentario lanzando la bolsa con las chispas directamente a su rostro, antes de que pudieran impactar contra el, se tiró al suelo esquivandolo. –Que reflejos, ¿debería llamarte Spider-man?

Mientras tu reías de manera exagerada por tu mal chiste, su rostro pasó por todos los colores en la escala del rojo antes de llegar al tono del vestido de Mary, cubrió su rostro con sus manos avergonzado. Sonreiste, verlo en ese estado era una de las razones por las cuales lo amabas.

Comenzaste a mezclar los ingredientes junto a el, quien de vez en cuando metía una cuchara para probar la masa, a pesar de que le habías advertido que podía dolerle el estómago. Las colocaron en una bandeja ayudándose con una cuchara para el helado, de ahí la forma de esfera.

—Sólo falta esperar –tus manos viajaron a tu cintura mientras observaban el horno, te giraste sobre tus talones y tu entrecejo se frunció –¡Luca! ¡No te comas la masa cruda!

Cual niño pequeño, te miró como si lo hubieras regañado, tu rostro se suavizó y reíste.

—Te hará daño, es eso lo por eso –sonrió mientras te abrazaba.

—Serías una madre excelente –tus ojos se abrieron como platos. Estaba claro que deseabas serlo, te gustaba cuidar de Robbie y todos se habían dado cuenta de lo cercanos que eran, te consideraba su madre.

Sin embargo, nunca quisiste presionar a Luca, querías que se tomara el tiempo que necesitará y cuando quisiera, podían dar el paso.

—¿Eso crees? –asintió, antes de que pudieras decir otra cosa, escuchaste voces que provenían del pasillo.

—¿Qué están cocinando? ¡Huele de maravilla! –en menos de un minuto Norton se encontraba en la cocina junto a Naib, Aesop y Eli.

—Son galletas que _____ prepara, ¿no las habías probado? –respondió Eli mientras pasaba a tu lado y besaba tu cabeza, eras como su pequeña hermana.

—Yo las he probado y son las mejores que he comido –Naib te sonrió mientras metía uno de sus dedos en la masa cruda y lo probaba.

—Te hará daño comerla así –lo regañó Aesop, te cruzaste de brazos dándole a Luca esa mirada de "te lo dije".

Simplemente revolvió tu cabello con cariño, la alarma del horno sonó y supieron que las galletas estaban listas para ser sacadas y devoradas.

—Nos darán galletas, ¿verdad? –preguntó Norton, sonreíste.

—Puedo preparar más, solo deben sacarlas del horno porque ya teníamos planeada una noche de películas –el pelinegro asintió mientras peinaba su cabello hacia atrás y miraba a Naib.

—¿Tengo monos en la cara? –preguntó, Norton negó con la cabeza mientras reías.

—Es solo, Aesop ¿puedes amarrar su cabello? no quiero encontrar uno en las galletas –su rostro se deformó, haciendo una mueca de asco.

—¿Algo más, princesa? –respondió de mala gana mientras Aesop amarraba su cabello en una coleta, Norton sonrió mientras alzaba las cejas y los ojos de Naib se abrieron como platos –Eres asqueroso.

Tardaste unos minutos en entender, hasta que algo hizo click en tu cabeza, ahora deseabas no haber imaginado aquella escena.

¡Iugh, son asquerosos! –Luca te miró sin comprender, aún tenía un poco de inocencia.

—¿Qué? Yo no entendí –tu mano se colocó sobre su hombro y negaste, restándole importancia.

—Es mejor que se quede así –miró a los demás, más confundido que antes.

—¿Quieres que te explique? –Norton recargó su peso sobre el hombro de Luca, asintió. Este se acercó a su oído y conforme hablaba, el rostro de Luca era más gracioso.

—¡Okey, tuve suficiente! –interrumpió a Norton, tomó el plato con las galletas y con su mano libre tomó la tuya –_____ y yo nos vamos.

Reíste mientras te despedías de los chicos, ahora quién tenía curiosidad eras tú.

—¿Qué te dijo? –sus mejillas enrojecieron y negó con la cabeza, imitando tu acción de unos minutos atrás.

—¿Sigues aburrida? –preguntó una vez llegaron a la habitación, dejó las galletas sobre la mesa de noche y se dirigió al escritorio, donde ya habían dejado un par de películas que les apetecía ver.

—Por ahora no –te colocaste de puntitas y revolviste su cabello, más tarde tendrías una conversación con Norton.

Chérie - identity v | o.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora