La Familia Stark, encabezada por Lord Eddard, la familia perfecta, cargada de honor, cariño y títulos.
¿Qué sucedería si todo lo que se conoce de Ned Stark no fuera del todo cierto?
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ERA EL ÚLTIMO día que pasaríamos en Harrenhall, los días no pasaron muy rápidos y los acontecimientos no fueron especialmente relevantes. Beth se había pasado todos los días babeando por ser Jaime Lannister, el cual parecía querer algo con ella. Sharra había estado ocupada paseando con Lady Lyanna Stark y una amiga nueva, Lady Ashara de la Casa Dayne, Dorne. Yo, por otro lado, había pasado los días leyendo y paseando con Ned, raramente se nos había unido Robert, el cual estaba muy ocupado intentando llamar la atención de Lyanna. A pesar de ser el último día de la estancia en Harrenhall, iba a ser el más entretenido, pues había una justa con los campeones de toda la semana. Entre ellos se encontraban Ser Jaime Lannister, Ser Arthur Dayne y el Príncipe Rhaegar. La justa era prometedora, todos asistiríamos. Para la ocasión decidí ponerme un vestido azul y una capa de colores plateados, en representación de mi Casa. Sharra y yo estábamos de Camino a las Tribunas cuando los Stark aparecieron frente a nosotros acompañados por los Baratheon.
– Buenas tardes, querida – Saludó Ned inclinándose a besar mi mano. Se erguió y me regaló una sonrisa mirándome a los ojos, antes de hacerse a un lado para saludar a mi hermana – ¿Aguarda con mucha ansia la justa, Lady Sharra?
– ¿Nerviosa? – Le pregunté a Lyanna acercándome a ella regalándole una sonrisa. La había escuchado hablar muy eufórica sobre las justas, y entristecida cuando afirmaba nunca haber asistido a ninguna.
– Mucho – Respondió asintiendo varias veces. Todos juntos comenzamos a caminar hacia las Tribunas que nos habían guardado.
– ¿Quién será tu apuesta? – Pregunté antes de tomar asiento y echar una rápida mirada al campo de Justa, donde ya se encontraban varios caballeros dejando sus caballos.
– Brandon, por supuesto – Respondió sonriendo ampliamente –, creo que es una apuesta segura.
– Yo no estaría tan segura – Hice una pequeña mueca sonriendo levemente – He visto a Ser Arthur Dayne, y tiene todas las probabilidades de ganar. Él será mi apuesta segura.
Sonreí con seguridad antes de ser interrumpida por unas trompetas que anunciaban el comienzo del Torneo. Lyanna se disculpó y se retiró rápidamente, iba de camino a cambiarse su capa al percatarse que estaba manchada. Sharra se sentó en su lugar y tomó asiento a mi lado izquierdo, a la derecha se sentó Ned, dejaron una silla vacía para Lyanna y, a continuación, se sentó Robert. Detrás de nosotros se encontraban Stannis y Renly Baratheon, los hermanos pequeños de Robert, los cuales de veían totalmente aburridos. Los primeros caballeros en iniciar la Justa fueron Ser Jaime Lannister y Lord Tytos de la Casa Lemonwood. Al ganar Ser Jaime, hizo el recorrido protocolario y se inclinó ante el Rey antes de retirarse. Entonces, presentaron a los siguientes concursantes, Lord Dorrandor de la Casa Hart y un tal Lord Lucas de la Casa Mondrian.
– ¿Reconoces esa Casa? – Murmuró Sharra en mi dirección, con el ceño fruncido y notablemente confusa.
– No lo había escuchado nunca – Confesé igual de confundida que ella.
