Navidad

807 65 5
                                    


Después de ese reencuentro la noche de navidad sería la más feliz para Lucrecia y por supuesto para Valerio que había tenido que trabajar día y noche para no dejar pendientes y poderse tomar unas vacaciones con su amada. 

- Te odio -dijo Lucrecia entre sollozos cuando cayó en cuenta que tenía en frente a Valerio. 

Este la alzó y se la sentó en las piernas en el sofá donde hacía unos instantes se estaban besando, ella como cuando eran pequeños se acurrucó en su pecho mientras lloraba. 

FLASHBACK 

- Han arruinado mi navidad -dijo la pequeña Lucrecia con cara de rabia- 

La niña castaña de vestido azul y una diadema en su pequeña cabeza estaba muy enojada porque sus padres estaban peleando justo el día de navidad, que siempre había sido su celebración favorita. Más que por los juguetes que recibía, era porque finalmente podría pasar una temporada con su medio hermano después de las vacaciones de verano. 

Desde que se conocieron los niños fueron inseparables, Valerio siempre había soñado tener un hermano pequeño con el cual jugar pero sobretodo alguien que no lo hiciera sentirse tan sólo. Cuando tenía 9 años llegó Lucrecia a su vida, a pesar que sólo te llevaban 2 años nunca se habían conocido hasta que unas primeras vacaciones de verano la madre del niño estaba muy ocupada y decidió decirle a su padre que se hiciera cargo. Valerio era un niño un poco hiperactivo, más que por molestar o llamar la atención, el pequeño sólo necesitaba amor y compañía de sus padres. Desde ese momento el niño se volvió una pelota de tenis, entre España y Chile.

- Lu, ellos no quieren hacerte sentir mal -dijo el niño refiriéndose a su padre y a la madre de la niña- 

- ¿Entonces por qué pelean en navidad? -dijo enojada y con sus ojos cristalizados por las lágrimas que se veían venir- 

- Es por lo negocios Lu, porque tú mamá no está de acuerdo en algunas cosas que papá quiere hacer- 

La niña sólo tenía 9 años, su hermano de 11 años para ese momento debía explicarle cosas que los adultos debían hablar con ella. Ambos habían sido muy solitarios y pasaban mas tiempo con el servicio que con sus padres pero cuando estaban juntos se apoyaban con una madurez que cualquiera se sorprendería. 

- Al menos tu estas conmigo Val -dijo la pequeña llorando entre los brazos de su hermano- Si no fuese por ti, mi navidad sería horrible. 

La pequeña había dejado de lado la muñeca que recibió esa navidad, que igualaba su tamaño.

- Siempre lo estaré -él la alzó y se la sentó en las piernas como un bebé pequeño- 

La niña escondió su cabeza en el pecho de su hermano, mientras este intentaba calmarla. Cuando por fin lo consiguió hizo todo lo necesario para hacerla reír mientras sus padres les ignoraban por completo. Esa noche se quedaron los dos jugando en el despacho de su padre a la fábrica de Papá Noel, cuando el padre los fue a buscar los encontró durmiendo en una casa que ellos mismos había improvisado y con las linternas encendidas. El padre de los chicos apagó las linternas y los despertó para llevarlos a sus habitaciones. 

- No me voy a ir a dormir a ninguna parte -dijo la niña molesta al despertarse- No quiero verte mas papá.

La niña le reprochaba a su padre mientras su hermano se limitaba a callar sentado en el sofá. 

- Lucrecia dije que a tu habitación -dijo el padre algo irritado- 

- Que no -gritó la niña y se fue corriendo a refugiar en Valerio, sentandose en sus piernas como bebé y escondiendo su cabeza entre sus rizos- 

- No dejes que me lleve -susurro a su hermano- 

Valerio la abrazó con fuerza. 

- Yo la cuido papá, al menos hasta que se le pase el enojo -dijo convencido- 

El padre accedió pidiéndole a Valerio que fuesen a dormir a su habitación. Eso hizo el niño alzó a su hermana y esta lo rodeó con sus piernas como cuando era más pequeña y la dejó en su habitación. 

- Te quiero Val, gracias por no dejarme con papá -le dijo mientras le abrazaba- 

- Siempre estaré para ti Lu -aseguró en niño mientras salía de la habitación para irse a la suya- 

FIN DEL FLASHBACK

- ¿Cómo cuando éramos pequeños? -dijo Valerio haciendo referencia a la posición de la morena- 

- Tus brazos siempre fueron mi lugar seguro -respondió ella mientras se secaba las lágrimas- 

- ¿Por qué no me dijiste que vendrías cabrón? -dijo reprochando- Pensé que me iba a quedar sola todo este tiempo, y creo que aún no estoy preparada para eso. 

Valerio rió y le dio un beso en la frente. 

- Porque al principio no era seguro, necesitaba resolver mil cosas del trabajo. Por eso estaba tan cansado y sin ganas de hacer prácticamente nada, cuando fue un hecho hablé con Nadia. Omar, Ander y ella sabía que vendría pero Guzmán como no sabe nada de lo nuestro no quería que sospechara nada, por lo que le Nadia me ayudó a pedirle que la llevara a Madrid con ella y por supuesto el aceptó sólo después de decirle que tu estarías con Carla que te vendría a visitar -el chileno rió- 

- Me encanta que estés aquí amor, ¿cuanto tiempo te quedas? -preguntó la morena- 

- Regresaré un día antes de comenzar el nuevo trimestre - sonrió dándole un beso en los labios-

A Lucrecia le hizo mucha ilusión ya que estaría al menos 15 días con Valerio y eso no la podía poner más feliz. 

Ese día de navidad para ellos fue de cenar juntos, ver series y darse mimos y caricias en el sofá hasta quedarse dormidos, ella en el pecho de él y él cubriéndola con sus brazos.

A la mañana siguiente Valerio despertó más temprano para preparar el desayuno para ambos, waffles con fresas, bananas y mantequilla de maní, acompañado con jugo de naranja.

- A despertar bella durmiente -la levantó con un beso- está listo el desayuno.

- Valerio, sabes que no desayuno así de pesado -dijo con mala cara la chica al incorporarse-

- Pues vas a tener que hacerlo al menos mientras yo este aquí -aseguró el chico- 

La mexicana rodó los ojos y respiró profundo. Acostumbrándose a eso que era lo único que no le terminaba de gustar del todo, pero mientras estuviese con Valerio haría su mayor esfuerzo así como el que hizo el para estar con ella casi todo el período de vacaciones. 

Todo lo prohibido (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora