La confianza era una de las cualidades que su matrimonio siempre careció, jamás se había dado cuenta de ello hasta que todo terminó, hasta que sus ojos vieron por sí mismos el desastre que eran ellos juntos y el desastre que estaban causando con el egoísmo de sus decisiones. Estaba consciente de lo que sucedía a su alrededor, de las noches y días en donde se habían cegado ante una realidad que dolía hasta los huesos, ellos no estaban hechos para estar juntos, sin embargo, se mantenían unidos. Tal vez era que mantenerse separados suponía aceptar lo que siempre quisieron callar, la culpa.
Los días pasaban sin dejar marca, era como si el tiempo se hubiese detenido dentro de su habitación, como si nada alrededor tuviese sentido alguno, estaba en el limbo, despertando porque no podía estar en cama todo el día o realizando actividades por el miedo a pensar, ese era el rumbo que había tomado su vida a partir de la muerte de su hija.
Aún no podía con el peso y el remordimiento de la culpa, era como un cuchillo que se encajaba en lo profundo de sus entrañas, estaba deshecho, y era ese sentimiento el que lo acompañaba en ese momento. Habían pasado un par de días desde la reunión que tuvo con Jimin y Taehyung, donde sembraron la duda, una que había estado ahí, una semana antes de la muerte de Tzuyu, pero que después había olvidado casi por completo, ahora eso lo atormentaba, porque había una posibilidad muy elevada de que se volviera realidad.
Namjoon no confiaba en él, podía verlo en sus ojos y en la manera en la que cuidaba de él, como si tuviera miedo de que en algún momento desapareciera, o peor aún, realizara lo que pasaba por sus mente en momentos de crisis, pero no lo hacía por Jae, que era lo único que le mantenía en pie. No confiaba en él, pero sí en Taehyung, por eso cuando le dijo que saldrían juntos no hizo preguntas de más.
—¿Estás bien? —preguntó su amigo quien mezclaba su café con la cuchara.
Tenía el brazo doblado, le había pedido a Taehyung que le acompañara al laboratorio para hacer un estudio de sangre que era más acertado, decidieron entonces esperar los resultados en una cafetería cercana.
—No—dijo con una mueca bebiendo de su té—. No creo que lo esté hasta no saber.
—Jin, ¿Por qué no le has dicho a Namjoon?
—Namjoon y yo no tenemos una buena historia con los embarazos, de hecho—suspiró—. Si por mi fuera no le diría nada. No estoy listo para eso.
Taehyung asintió con una media sonrisa. —Si la prueba llega a ser positiva ¿Qué vas a hacer Jin?
—No puedo—dijo bajando la mirada, conteniendo aquellos sentimientos que afloraban su pecho dejándolo adolorido—. No puedo tener un hijo, ni ahora, ni nunca.
—Entiendo—susurró sin ser capaz de decir más.
—No lo entiendes y espero de todo corazón que jamás tengas que entenderlo—tomó aire antes de mirarlo con los ojos cristalinos debido al llanto contenido—. No creo estar listo para tener un hijo, no cuando la perdí a ella, pero, Namjoon, él...
—Jin, escucha, creía que siempre lo había tenido claro, pero cuando estuve esperando a Soyeon, lo entendí, cuando estaba en mi, tomando mi cuerpo, cambiando toda mi vida, tanto física como emocionalmente, era tan grande el cambio, siempre lo había deseado, pero nadie me preparó para eso—suspiró—. Es ahí cuando afirme todo, nadie más que tú puedes tomar la decisión sobre esto, y quiero hacerte entender que si no estas listo, no puedes dejar que Namjoon interfiera, no es su cuerpo, no es su decisión. Y no puede hacerte sentir mal por esto, no es el momento para ti, y tiene que respetarlo, porque no hacerlo los ha puesto en esta situación.
Jin temblo, cada parte de su cuerpo temblaba y estaba reaccionando a las palabras de Taehyung, porque tenía miedo de enfrentarse a Namjoon y que este le obligara a tener un nuevo bebé, recordó entonces que tenía la custodia de su hijo y que si quería podía alejarlo de la única persona que le mantenía con vida.
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Un Cambio De Vida *YOONMIN*
FanfictionTERCERA PARTE DE UCDG Después de la tormenta llega la calma, después de una catarsis de emociones llega la tranquilidad, una que todos esperaban. Una nueva vida que se estaba formando, una vida que parecía perdida, una vida que era una mentira y una...