Un adiós para siempre

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Despertó sintiendo la misma pesadez que la noche anterior, EunHa no había estado durmiendo muy bien, Sana la cual estaba a punto de comenzar sus clases en la academia de música y se encontraba preocupado por su bienestar y Jimin estaba ausente debido a su preocupación por Jin, quien había despertado, pero aún estaba debilitado.

Entró a la oficina, había mucho trabajo por hacer, después de la muerte de Siwon estaba en la lucha por elevar el estatus de su empresa, de forma legal, sin los trucos sucios a los que acostumbraba su padre, les estaba yendo bien, pronto invertiría en más negocio, se expanderian, todo lo que estaba haciendo era para el beneficio de su familia en un futuro.

—Señor Min su madre lo espera en la sala de juntas.

Miró a su asistente como si está hubiese dicho algo que no entendía.

—¿Qué?

—La señora Min ChaeRin dijo que lo esperaba en la sala de juntas, que era importante.

Apretó las manos, la última vez que la había visto culminó en un desastre total, lo pensó unos momentos, no quería hablar con ella, porque sentía que simple y sencillamente entre ellos no había más qué hablar, ya no quedaban escusas ni respuestas que necesitaba de ella.

—Bien.

Pero, estaba harto, de mantenerse siempre a la merced de su pasado, de los monstruos que amenazaban con salir del closet a hacerle daño, después de vivir lo que era la felicidad tenía miedo de regresar al dolor, tomó una enorme bocanada de aire, entrando a la sala de juntas dónde la vio.

No había diferencia, ella seguía siendo la misma de siempre, sin cambios, al verlo se puso de pie, trato de acercarse, pero eso para Yoongi sería demasiado, se alejó un poco.

—¿Qué haces aquí?

—Vine a ver cómo estabas y yo...lo siento mucho, lamento lo que sucedió la última vez que estuve aquí.

—Creo que es tarde para eso ¿No lo piensas así? No deberías estar aquí.

—Por favor, sólo escúchame.

—Estoy cansado de escucharte, tienes que entender que nada de lo que digas va a cambiar lo que sucedió, no hay justificación para lo que hiciste.

—Me sentía perdida—susurró—. Sigo sintiendome de esa manera, creí que el tiempo sería sabio y sabría darte la respuesta que necesitas, pero no puedo hacerlo, ya no sé de qué manera decirte que lo siento.

Yoongi terminó por sentarse en una silla, cubriendo su rostro cansado.

—Sientate, hablemos, pero está será la última vez que lo hagamos, porque no puedo seguir haciendo esto.

ChaeRin se sentó frente a él, con una mueca, comenzó a jugar con sus manos nerviosa. El insomnio y el dolor de la culpa la habían llevado nuevamente ahí, a pesar de las súplicas de su hija para que dejara a Yoongi en paz, no podía, intentaba explicarle lo mal que se sentía, lo que tanto odiaba y que la comprendiera, buscaba perdón.

—Debí hacer algo diferente, ser una mejor madre, tuve que cuidarte bien y protegerte, dejé que el miedo se apoderará de mí, lo siento, sé que es egoísta pedirte que me perdones, pero Yoongi, realmente lo lamento.

Yoongi la miró con seriedad. —Sé que es lo que deseas, pero no puedo. No aún, no así.

—Yoongi...

—No te puedo perdonar y sería egoísta decir que lo hago, cuando en realidad no. Tengo hijos, y no puedo entenderte. Aquel día que viniste, cuando me hablaste de Sana, perdí las ganas de seguir adelante, pero saber que ellos se preguntarían ¿Por qué lo hice? Me hizo detenerme, por eso no te entiendo y sé que necesitas escuchar que te perdono, pero no estoy listo para eso, aún me cuesta pensar en ti, me cuesta sentirme de esta manera, porque eres mi madre, y él era mi padre. Sería más sencillo si ustedes no fueran mi familia, bueno, eso creo, no estoy seguro.

Un Cambio De Vida *YOONMIN*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora