Un Cambio De Vida *YOONMIN*

Un día con papá

Yoongi se encontraba mirando la ventana, había estado más de una semana en ese hospital, y lo único que quería era salir. Después de la noche donde lloró en los brazos de Jimin sosteniendo la fotografía de su hija. Tenía pensamientos encontrados, y un dolor indescriptible, estaba lleno de emociones que no eran nada positivas, de lo que estaba seguro era de que sus padres lo odiaban, y él sentía lo mismo por ellos. No quería verlos, deseaba que su padre estuviera ardiendo en el infierno y que su madre nunca encontrará paz, no quería perdonarla.

Podría estar tranquilo después de lo que su madre hizo, después de haber permitido que su padre le lastimara de maneras inimaginables, pero, el haber ocultado el hecho de que Sana estuviese con vida, su pequeña  hija, sabiendo que el remordimiento lo había trastornado, llenándolo de miedos y de odio hacia sí mismo.

Ahora que era padre, entendía muchas cosas, y otras más las reprobaba, porque no había manera de que él lastimara a sus pequeños o a su novio, no quería ser como ellos, no deseaba ser esa persona vacía y llena de dolor, quería dar lo mejor para ellos, levantarse de nuevo, sin embargo, ¿Cómo hacerlo si se sentía tan molesto? En su mente ideaba mil maneras de lastimar a los Myoui, quería destruirlos, dejarlos sin nada suplicando, eso es lo que lo motivaba a seguir, aunque no lo dijera en voz alta.

Había hablado un par de veces con GongYoo, sobre sus sentimientos, y sobre lo que había sucedido esa noche, las pesadillas volvieron y aunque quería sacar todo lo que sentía, no podía, existía un bloqueo que no le dejaba avanzar, él le dijo que era completamente normal, pero que era importante que no se cerrará, y que dijera todo, pero no quería hacerlo, estaba mostrando una cara diferente para Jimin, alguien fuerte, aunque por dentro estuviera pudriéndose.

—Ya es hora, he firmado el alta—dijo Jimin entrando a la habitación—. ¿Estás listo?

Asintió tomando la pequeña maleta que estaba arriba de la cama. —Sí, no me gusta estar en estos lugares.

—Lo siento, tarde porque están hablando con el doctor de Baek.

Sabía que Baek estaba mejor y despierto, pero que faltaba para su recuperación, quería ir a verlo, pero no estaba listo, el golpe del pasado le hacía sentir inseguro, no quería estar cerca de nada que le recordara esa noche.

—¿Has hablado con él?

—Muy poco, aunque está consciente, no se mantiene despierto mucho tiempo, el doctor dice que está bien, que pronto podrán darle el alta, estaba pensando que podríamos llevarlo a casa, para cuidar de él.

—Me parece perfecto—se acercó para darle un beso en la sien—. Gracias por ser un ángel amor.

—También quería preguntarte algo, WheeIn y Hoseok quieren verte.

Hizo una mueca. —Diles que me den un par de días más.

—Claro amor.

—¿Y los niños? ¿Dónde están?

Jimin mordió su labio inferior. —En casa de Taehyung, pensamos que es mejor que estén unos días ahí, ya sabes, mientras te sientes mejor y...

Yoongi negó. —Quiero verlos, por favor diles que los lleven a casa, sé que piensan que será malo si los veo o esas cosas, pero realmente necesito estar con ellos.

—Bien, le llamaré, anda quita esa cara, vamos.

Trató de sonreír. —Vamonos de aquí.

Jimin tomó su mano y ambos salieron de la habitación, casi huía de ese lugar, el camino a casa fue más liberador de lo que imaginó, Jimin manejaba y escuchaban música, y hablaban de lo que podían pedir de comer, era ameno, agradecía que Jimin no le hiciera preguntas de más, era tranquilo estar a su lado.