Sin memoria

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Llegó a la casa sintiendo sus hombros tensos, como si un enorme peso se hubiese instaurado en su espalda, bajo del auto estirando sus músculos, había pasado más tiempo del pensado en aquel hospital, al principio se sintió incómodo, porque para ellos no era más que la pareja de Jimin, sin embargo, las cosas cambiaron un poco cuando Jungkook se acercó a él y comenzaron a hablar, recordando un poco sus días de adolescencia, pudo notar que este cuidaba sus palabras, posiblemente para no hacerle pasar un mal rato reviviendo recuerdos del pasado que aún pudieran atormentarlo, Yoongi de alguna manera se lo había agradecido internamente, porque sus días de instituto eran algo que no le causaba orgullo, sino todo lo contrario.

Eran las ocho de la mañana cuando entró, todo estaba en completo silencio, se quitó los zapatos y se adentró a su hogar, era grande, pero de alguna manera lo sentía más acogedor que estar en su departamento, por mucho más pequeño, acuñaba de hecho a que Jimin, HueningKai y Jihoon le habían dado un aura calurosa y hogareña, le gustaba aquella sensación, le hacía sentirse completo.

Subió de dos en dos, los escalones, para llegar lo más rápido posible a la segunda planta, una vez ahí, arrastro sus pies a la habitación que compartía con Jimin, entró haciendo el menor ruido posible, no quería despertarlo, pero grande fue su sorpresa cuando le vio sentado en la cama, con los pies cubiertos por la colcha mientras miraba televisión.

—No me digas que no has dormido —reclamó con una ligera mueca.

Jimin desvió la mirada de la televisión para fijarse en Yoongi, quien se acercó a la cama, sentándose en su lado, llevaba ropa deportiva, se quitó la sudadera quedándose en una camisa blanca y los pantaloncillos, se metió en las cobijas y miró a Jimin.

—¿Y bien? ¿Qué pasó? —preguntó ansioso.

—Por lo que Jungkook me explicó, Jin se levantó en medio de la noche porque escucho a la niña quejarse, fue a verla, pero cuando se acercó a la cuna observó que algo inusual estaba pasando, tuvo una crisis convulsiva y quedó inconsciente, está estable, afortunadamente la ambulancia llegó pronto, aún tienen que hacer algunos estudios para determinar qué causó aquello, por el momento es lo que se sabe—llevó su mano a la mejilla rosada de Jimin y le sonrió, este le observaba con una mirada adormilada, se notaba que estaba haciendo un gran esfuerzo para no quedarse dormido—. Ahora vamos a dormir.

Jimin asintió, esperó a que Yoongi se acostara para hacer lo mismo sobre su pecho, pronto fue rodeado por unos brazos firmes y cálidos, Yoongi suspiro al momento que besaba su cabeza.

—Me preocupa Jin, todo lo que ha pasado...sé que en un pasado obró mal, pero ¿Realmente merece este sufrimiento? No puedo imaginar lo que está sintiendo—suspiró con una mueca y los ojos cristalinos al pensar en las dificultades de quien era uno de sus amigos queridos—. Todos cometemos errores, él lo hizo, pero los está enmendando ¿Eso no es suficiente?

—La vida—susurró Yoongi—. Es muy complicada a veces y en ocasiones, somos nosotros quienes nos la hacemos mucho más difícil, esa es la verdad, nadie más que nosotros elegimos sufrir. Pero, esos errores nos hacen fuertes o al menos podemos aprender, a la mala, sobre nosotros mismos. Somos quienes nos ponemos la soga al cuello.

—Pero ¿Por qué han de pagar los niños? Ellos son inocentes entre el enredo de los adultos, como padre, diablos, no quiero imaginar que Kai o el bebé estuviera en esa situación, moriría en vida.

—Los niños dependen de sus padres, su estabilidad está sujeta a la estabilidad emocional que tienen los padres, no pueden valerse por sí mismos, en una familia, los niños son quienes más recienten y sufren. Eso me lo dijo GoYong, Jimin, debemos intentar ser la mejor versión de nosotros por ellos ¿No es así?

Un Cambio De Vida *YOONMIN*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora