¡Te Protegeré Mi Omega! [Omegaverse] Terminada

28 - ¡OMEGA CUIDA DE TU ALFA!

🥀🐺🥀

— Young Saeng hyung, calmate por favor...

— Park, ¡ven aquí ahora mismo!

Young Saeng estaba persiguiendo a Jung Min por toda la sala con palos de escoba como si fuera una bruja, mientras Jung Min corría desesperado por todo lado para salvar su propio pellejo, pues le dio miedo de ver a Young Saeng totalmente enojado. Jung Min sabía perfectamente que Young Saeng sabía pelear y muy bien, ya que Hyun Joong le platicó sobre ello. Y bueno, Hyun Joong lo presumía con orgullo ya que también recibió su merecido en una ocasión, cuando se le ocurrió la grandiosa idea de comprar a escondidas de Young Saeng, consolador y vibradores. El lindo omega lo descubrió cuando buscaba algo de ropa en el ropero y por casualidad los vio, ¿cómo se le ocurre guardarlos ahí? El alfa le dio la excusa más barata que nunca antes escuchó en toda su vida: "Lo utilizaremos para cuando estés listo Young Saeng... Sabré esperar". Por poco Young Saeng casi le deja a Hyun Joong sin la ardillita, ya que utilizó una de sus misteriosas llaves de karate con el alfa diciéndole que era un "Alfa calenturiento". Bueno, desde ese día Hyun Joong tenía más cuidado.

Hyun Joong estaba comiendo palomitas de maíz, mientras observaba desde el sofá con una enorme sonrisa en su rostro esa escena bastante cómica como si estuviera disfrutando de una de esas tantas películas de comedia.

— ¡Maldito alien! ¡Ayúdame! — Gritó Jung Min desesperado.

— No sé nada. — Dijo entre risas mientras seguía comiendo con total ganas sus palomitas.

— ¡¿Cómo te atreviste a quitarle la pureza a mi Baby Jun, Park Jung Min!? ¡Alfa degenerado! ¡Pedofilo! ¡Pervertido! ¡Caballo repugnante! ¡Hijo de la yegua! — Gritaba Young Saeng mientras seguía correteando a Jung Min con las escobas.

— Ustedes dijeron que lo consintiera. — Se excusó en un hilillo de voz por el cansancio.

— Si... Pero me referirá a que lo cuidaras, no a que le quitaras la virginidad a mi bebé. — Gritó desde el otro extremo de la pieza.

— Ya hyung, por favor... Estoy muy cansado. — Suplicó dramáticamente llevándose una mano al pecho, para recuperar el aliento. — ¡Auh~! ¡Auh~! ¡Ah~! ¡Ah~! — Soltó unos quejidos en cuanto sintió los bombardeos sobre su espalda. — ¡Ya hyung, basta! ¡Duele~! ¡Me dejarás moretones!

— No te quejes, de ustedes sana rápido sus heridas. — Declaró con evidente obviedad, pues sabía que de los alfas purasangre su ADN les ayudaba en las peleas.

— Pero eso no es motivo, para que me golpees, primo-cuñado. — Dijo con una sonrisa.

— ¿Primo-cuñado? — Se sorprendió y sus mofletes se tornaron de un leve color carmesí. — ¿Que atrevido? Si no marcabas a mi bebé, te juro que te mandaba a castrar Park. — Sentenció con la mirada a Jung Min, quien le miró totalmente sorprendido.

Ambos se sentaron en el sofá para recuperar todas las energías que había perdido, pues quedaron exhaustos después de correr como locos por toda la casa. Al parecer, Jung Min se llevaba muy bien con Young Saeng, el poco tiempo que se conocen podría decirse que Jung Min le tenía una gran estima a la pareja de su primo y por lo cual era digno de su respeto.

Mientras tanto, Hyung Jun estaba comiendo tranquilamente galletas con un vaso de chocolate caliente. ¿No que iba a cuidar de su alfa? El pequeño omega se encontraba de lo más tranquilo sentado en la alfombra de la sala disfrutando de su bocadillo, ignorando por completo lo que pasaba a su alrededor. Por unos momentos, Hyung Jun se desconectaba del mundo y su mente viajaba al mundo de Disneylandia. ¿Porqué será? ¿A qué se debe?