¡Te Protegeré Mi Omega! [Omegaverse] Terminada

60 - ¡PERDÓNAME!

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— ¿Por cuanto tiempo más estaré aquí? — Pregunto Hyun Joong desesperado por estar encerrado en esas cuatro paredes con tonos blancos y rayas azules.

— No se impaciente Joven Kim. — Dijo el médico, sosteniendo entre sus manos el historial clínico del alfa mientras apuntaba en ella. — Su recuperación es bastante rápido por ser un Alfa Purasangre... Sus signos vitales están respondiendo bien. Si sigue así, muy pronto saldrá de aquí.

— Doctor... — Interrumpió Lisa, quien se encontraba sentada en una silla a lado de Hyun Joong. El doctor la miró. — ¿Porqué desapareció el lunar que Hyun Joong tenía en el hombro en forma de media luna? — Hasta ella sabía lo del lunar, bueno, Hyun Joong se lo mostró cuando era niño.

— Se dice que algunos alfas y omegas la tienen desde su nacimiento, no es muy común y quien lo tiene pues... Sabe con exactitud quien será su otra mitad u otros casos aparece con la cercanía de su predestinado. Pero un lunar en forma de media luna, nunca he visto algo como ello. Quizás se deba a un fuerte vínculo desde el vientre materno y que ambos se cortejaron desde que estaban en pañales. — Comentó el médico con una sonrisa que Hyun Joong y Lisa no prestaron la mas mínima atención, ni siquiera se rieron. El médico tosio para aclarar su garganta. — ¡Perdón! Lo que trato de decir, es que tu predestinado debe tener la otra mitad.

— ¿La otra mitad? — Hyun Joong preguntó extrañado y su mente divagó entre los recuerdos del pasado cuando hacía el amor con Young Saeng y pues... Conocía cada rincón del cuerpo desnudo del chico y nunca vio un lunar en forma de media luna grabado en la piel del omega.

El alfa se abofeteo mentalmente al recordar el cuerpo desnudo de Young Saeng, de tan sólo recordarlo de esa manera, sus hormonas se prendían y su miembro palpitaba. Pues el omega tenía un hermoso cuerpo y curvas de infarto que lo volvían loco, además... de un apatecible trasero como un melocoton, y poseedor de una maravillosa piel lechosa y suave que cuidaba mucho con varias horas de baño de espumas entre lociones y cremas humectantes. Young Saeng era demasiado vanidoso y cuidadoso con su cuerpo.

— ¡Hyun Joong, tienes una maldita erección! — Exclamó la alfa aterrada, aventando una almohada en la cara de Hyun Joong. — ¡¿Qué demonios estas pensando, alfa pervertido?! — Regañó en un gruñido.

— ¿Qué? — Hyun Joong regresó de su ensoñación en cuanto sintió el almohadazo sobre su perfecto rostro. Le gruñó a Lisa, quien apuntó con una mano su entrepierna y con la otra tapaba su rostro. Hyun Joong guió sus ojos hacia donde Lisa había señalado e inmediatamente sus ojos se expandieron, al ver que había una sombrilla sobre su entrepierna y rápidamente agarró la almohada para cubrir su notable erección. Su miembro había despertado de tan sólo recordar el cuerpo desnudo de Young Saeng, ya que en realidad sólo el omega lo ponía así de calenturiento.

— Espantaste al pobre omega con tu conducta de alfa pervertido.

— ¿Qué?

— El médico era un omega, Idiota... Deja de pensar cosas sucias con Young Saeng sólo tienes que pensar en la forma de recuperarlo y que te perdone. Sobre todo que te perdone por las estupideces que le dijiste. — Dijo la alfa levantándose de su lugar y se dirigió hacia la puerta. — Young Saeng ese día estaba muy dolido y triste. No se resignaba a perderte... Quería ir corriendo detrás de ti, pero se desmayó en mis brazos. La razón... No te lo diré, algún día tu mismo lo descubrirás. — Terminó de decir y salió por la puerta de la habitación, dejando a un alfa con miles de preguntas rondando en su cabeza.