YUNANDO: La Promesa

EMPIEZA EL JUEGO

Hoy, Yun Kalahari, pondría a los nuevos integrantes, Culebra, Gringo y Blacky a prueba, tendrían que secuestrar a un agente de policía y a continuación fusilarlo.
Gringo estaba contento, ya que le hacía ilusión matar a los "picoletos" como dice chino, en su opinión ellos no eran el bando bueno, pero, ¿Realmente eran los buenos? Eso era lo que Juanjo se preguntaba una y otra vez, en cambio Lamar estaba tranquilo, como de costumbre, simplemente tenía miedo, no quería matar a su mejor amigo, el comisario Greco Rodríguez, el lo había ayudado mucho, y no podría verlo morir.

N:-¿Listos?

G:-Si.

J:-Supongo.

Y:-¿Qué pasa Juanjo?¿Tienes miedo de molil?

J:-¿Quién no tiene miedo de morir?

MK:-Venga chavales, que se hace tarde.

Cogieron las armas y se equiparon con su conocido traje, una camisa blanca, un pantalón negro militar, unas botas de montaña, un chaleco antibalas y cada uno con su respectiva máscara para que no los reconocieran.
Vigilaban comisaría, el oficial primero Jose Luis Torrente, su próximo objetivo. Estaba supervisando a dos alumnos, Gustabo y Horacio, pero eso a la mafia no le preocupaba. Salieron de comisaría y los cogieron, Torrente sabía que iba a morir, pero no quería que le sucediera nada a los alumnos. Los llevaron a una isla del norte.

T:- ¡No apunten a los alumnos!No apunten a los putos alum...

Torrente había sido fusilado, ya habían dado el segundo golpe. Cogieron su cuerpo sin vida y lo lanzaron al mar, sin dejar rastro. Después de unos minutos oyeron disparos, era el CNP, venían por Torrente, pero simplemente, ya no estaba. Consiguieron huir y lo celebraron a lo grande, les encantaba ver sufrir a Conway.