Maratón 3/3
Nunca en mi vida he tenido una cita.
La única cita que tuve fue en el hospital cuando mi papá me dejó unos cuantos golpes en mis cosillas y cortes en mi cara.
Pero una cita ¿romántica? jamás en la vida. Y sinceramente, nunca pensé que Emilio se atrevería a pedírmela. Pero, sólo es una cita de amigos, no es una cita de pareja o algo así.
Al menos quiero convencerme de eso.
Ni siquiera sé que ponerme. ¿Cómo tengo que ir vestido? Desde que llegué aquí tengo muchas opciones, y no sé por cuál irme. Tengo pantalones de todo tipo y de todos los colores al igual que las camisas e incluso sacos.
Ld pregunté a Emilio a que restaurante iremos pero no me dijo nada. Solo me dijo "Solo ponte más bonito de lo que ya eres", y ya no le insistí
Estaba escogiendo la ropa para aquella cena. Toda la ropa estaba regada en la cama y en el piso, incluyendo zapatos y accesorios. Jamás en la vida pensé que elegir una ropa para esta tipo de ocasiones sería taan difícil, y no para pedir algo de ayuda. No tengo amigos aquí, todavía. Mi mamá no está aquí conmigo, ni siquiera amigos de mi edad.
En mi mente llegó Seidy. No quiero imaginarme la escena que hará si se entera de que iré con su prometido y padre de su hijo a una cena, completamente solos. Eso haría que odiase más de lo que ya lo hace, me haría la vida imposible.
Pero, no creo que llegue a hacerme una cosa peor, no con Emilio enfrente, estoy seguro de que él me defendería.
¿Porque Emilio me defiende tanto, incluso sabiendo que va a ser papá y está comprometido? Eso no lo sé.
Pero, no voy a negar que me siento bien cuando lo hace, con Emlio me siento muy bien, siento esa protección que jamás tuve y siento que si estoy con él no me va a pasar nada malo. Mi Omega se siente protegido, tranquilo y muy en paz. Sin preocupaciones.
Una vez pensé que el podría ser mi destinado, pero me reí después de eso, porque es imposible. Eso es imposible ¿verdad? Emilio no puede ser mi destinado. ¿Quien querría estar con alguien como yo? Nadie.
Aunque eso podría explicar, tal vez, el porqué me siento tan en paz y protegido cuando él está cerca o a mi lado.
— Ya, Joaquín, deja de pensar tonterías...—negué con lo cabeza y deje de pensar en en cosas, en cosas que no pueden ser.
Faltaban dos minutos para comenzar a trabajar así que deje la ropa en donde estaba y salí de la habitación y fui directamente a la cocina y comencé a lavar platos, guardar las cosas en donde iban, trapear y barrer.
La cena con Emilio y Emilio no salieron de mi mente por más que lo intentaba.
No quería que me pasara, yo no quería enamorarme.
Bueno, aquí está el último capítulo del maratón, je, perdonen la tardanza, no pasará de nuevo, espero🥴
Nel, ya no pasará, veré si mas al rato subiré otro cap, gracias por leer <3
