La Hibrida y El mago (Cedric Diggory y tú) TERMINADA

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NARRA Cedric.

Hoy al castillo en la primera noche había llegado una profesora de una nueva materia, la profesora era joven y muy hermosa, no podía despegar mi vista de ella, cuando empezamos a comer obviamente comí algo mientras algunos hablaban del torneo de los 3 magos y otros de la profesora, de lo hermosa que es, de cual es su edad? Pero yo no podía dejar de verla aunque ella veía a Draco Malfoy repetidas veces pero la voz de uno de mis amigos me sacó de mi trance.

X: Tu que dices Diggory?

Cedric: Eh! Que?

X: Que, que edad piensas que tiene la profesora? Por Merlín estás distraído.

Cedric: Lo siento pero no lo se –dije volviéndola a ver-

Susan: Yo opino que es muy pálida pero han visto que no ah tocado su comida en toda la cena, solo está hablando con Hagrid.

X: Si y parece que son amigos de años.

Luego vimos como algo le pasaba pero ella sacó una botellita con un líquido rojo y bebió el contenido cerrando los ojos y sintiéndose mejor.

X: Que creen que sea eso que bebe?

Susan: No lo se pero no creo que sea para los nervios.

Era verdad lo que decían ella era muy pálida, no tocaba su comida, solo hablaba con Hagrid, pasaron minutos y la comida desapareció haciendo que aparezcan los postres pero nadie los tocó ya que Dumbledore se levantó para hacer otro anuncio mientras el nos decía que hagamos silencio traían al Gran Comedor una caja grande y elegante.

Dumbledore: Su atención por favor –pausó- quisiera decir unas palabras, la gloria eterna es lo que le espera al estudiante en el torneo de los tres magos pero para lograrlo deberá superar tres pruebas, tres pruebas en extremo riesgosas por esta razón el ministerio decidió aplicar una nueva regla, para explicar esto tenemos al director del departamento de magia internacional Bartemius Crouch.

Todos le aplaudimos pero de repente el techo comenzó a fallar generando truenos y rayos haciendo que los demás estudiantes se asusten, en ese momento los prefectos íbamos a solucionar el problema pero un mago con aspecto grotesco, cicatrices en la cara y un ojo mágico azul eléctrico que se movía por todos lados pero ese ojo veía a Potter, el entró solucionando el problema y quejándose del techo, todos lo reconocimos como Alastor Moody pero más se lo conocía por Ojo-loco Moody el ex-cazador de magos tenebrosos que se volvió loco y que por el las celdas de Azkaban están llenas después sacó una petaca y empezó a beber de ella pero nadie quitaba la vista de encima luego volvimos a mirar al señor Crouch ya que empezó a hablar sobre el torneo.

Crouch: Después de un largo análisis el ministerio decidió que por su seguridad a ningún estudiante menor de 17 años se le permitirá postular su nombre para el torneo de los tres magos –dijo y empezaron las protestas de los chicos menores- y la decisión es definitiva –dijo y siguieron las protestas-

Dumbledore: SILENCIO!!! –dijo e hicimos silencio-

Con un movimiento de varita Dumbledore hizo desaparecer la caja dejando revelar un Cáliz que de un momento a otro se encendió una llama azul en la boca todos miramos con atención el Cáliz hasta de Dumbledore dijo.

Dumbledore: El Cáliz de fuego quien desee participar en el torneo solo debe escribir su nombre en un pedazo de pergamino y lanzarlo en la llama antes del jueves a esta hora, piénsenlo con mucho cuidado de ser elegidos ya no hay escapatoria en este momento el torneo de los 3 magos da comienzo.

Cuando terminó las explicaciones todos empezamos a por los postres hasta terminar e ir a nuestras salas comunes pero como siempre me toca vigilar los pasillos.

NARRADORA.

Mientras todos se iban a sus dormitorios el director Albus Dumbledore iba de camino a su despacho pero al llegar se encontró con una visita inesperada de una chica de ojos rojos como la sangre en la oscuridad.

Dumbledore: Oh valla ya se a que debe tu visita esta noche.

____: Porque no me lo dijiste? O peor porque aceptaste?

Dumbledore: Fue sugerencia del ministro y sabía que no te iba a agradar.

____: Y no me agrada la idea que alguno de esos jóvenes valla a morir –dijo a punto de salir del despacho-

Dumbledore: Eso lo comprendo pero como dije eso no está en mis manos.

____: Debiste hacer lo posible porque no se realizara o alguien podría morir o peor aún desaparecer.

Dumbledore: Lo se pero descuida los chicos tienen 14 años y hay un límite de edad –dijo y ella lo miró extraña-

____: Los? –dijo y Dumbledore asintió-

Dumbledore: Me eh dado cuenta que no dejabas de observar al joven Malfoy.

____: Un Malfoy? Porque no me sorprende?

Dumbledore: Temo decirte que no es Elliot.

____: Elliot es del pasado y se va a quedar ahí aunque su tátara, tátara, tátara nieto esté aquí y sea idéntico a el.

Dumbledore: Muy bien –dijo lanzándole una bolsa de caramelos- caramelos sanguíneos.

____: Gracias –dijo y se fue-

NARRA ____.

Iba caminando por los pasillos un poco enojada por lo del torneo iba directo a mi despacho cuando al doblar una esquina casi choco con un prefecto si fuera una persona normal no podría verlo pero como no lo soy vi que era el chico castaño de Hufflepuff.

X: P-profesora q-que hace por aquí? –dijo nervioso-

____: Dando un paseo nocturno –dije un poco más tranquila-

X: Bien e-entonces buenas noches.

____: Buenas noches emmmh.

X: Diggory, Cedric Diggory.

____: Buenas noches señor Diggory.

Dije siguiendo mi camino pero el olía a nervios y también olía increíblemente bien, su olor era distinto al de otros chicos, era como Durazno, no se porque pero su sola presencia me calmó por completo volteé a verlo pero ya no estaba así que seguí mi caminata hasta que llegué a mi despacho pero no crean que a dormir, no los vampiros no dormimos.

(...)

Al día siguiente iba a empezar las clases por suerte son prácticas y todos los cursos tenían que ver conmigo, primero me tocaba con los de tercero, fui a los terrenos del castillo mientras escuchaba murmullos sobre mi, cuando llegué me puse a preparar la clase hasta que llegaron cuando estuvieron todos inicié la clase.