Tras los rumores de fragmentos de joyas y otros cazadores de demonios, Inuyasha y su manada se dirigen a las Tierras del Oeste. También se rumorea que el Señor del Oeste ha desaparecido, y un encuentro casual pone a Inuyasha cara a cara con los instintos bestiales de Sesshomaru. Al asumir el papel de Alfa, el hanyou debe proteger a su manada mientras trabaja para liberar la mente de su hermano. Sesshomaru fue criado como un Alfa, para convertirse en el Señor del Oeste, al igual que su padre. Mientras camina al lado de su hermano, el taiyoukai descubre el oscuro secreto que le ocultaron toda su vida. Con una mente frágil y desmoronada, Sesshomaru se une a la batalla contra Naraku. Los instintos atraen a dos medio hermanos hacia algo que nunca podrían haber esperado. Porque lo único que ambos quieren... Es aceptación.