𝑬𝒍 𝒄𝒉𝒊𝒄𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒗𝒊𝒅𝒆𝒐𝒋𝒖𝒆𝒈𝒐𝒔 - Blake talabis y tú

Capitulo 14 - La película

T/n T/a

Han pasado tres semanas ya. No hubieron más problemas. Al contrario, Blake y yo estamos hablando más por teléfono. Nos pasamos todo el día charlando, hacemos videollamadas y jugamos juegos o así... Es súper lindo poder pasar tiempo con el, aunque no sea físicamente. Nos hemos visto unas dos o tres veces luego del incidente, así en persona, pero no más. Cada vez me siento más viva cuando hablo con el. Esa sensación de mariposas en mi estómago cuando charlabamos.

El estuvo muy mal este tiempo. Aveces dejaba de hablar en las llamadas. Supuestamente tiene muchas náuseas y perdida del apetito. Me preocupo mucho por el aunque no le guste.

Estoy a punto de regresar a clases. La verdad se siente raro, pero creo que tengo ganas de comenzar. Con mi... Con Marcos. Hemos reforzado nuestra relación. Mi vida está tomando un buen rumbo. Mi estabilidad emocional está bien, exceptuando cuando estoy en mis días. El me compra varias cosas. Cómo ropa, auriculares, aveces me lleva a comer, ayudo a qué remodelara mi cuarto... En fin, no es tan malo.

En la plaza las chicas me han invitado una que otra vez a fiestas... Bueno, en realidad a dos. Pero para mí, que no eh ido a ninguna, fue genial. Fue genial el echo de que me invitaran, porque el querido Cameron se interpuso antes de que yo pudiera responder "si" y rechazo la invitación. Las dos veces dijo que las fiestas esas no eran algo para mí, que sería mejor que miramos una película en su casa. Lo encuentro muy sobreprotector aveces, pero es tierno.

Hoy quedamos después de mucho tiempo, en ir al cine con Blake. Dijo que hoy ya se sentía mejor y que podría salir un rato, pero que no me sorprendiera si de repente se iba. Es raro, pero yo que se, aún así me gusta... Digo, lo quiero *auto cachetada*.

Así que ahí me encontraba. Caminando por una pequeña calle camino al cine. Era de tarde y el sol poquito a poco caía. Eso me asustaba porque volver sola no sería nada fácil. Pero debería dejar mi ansiedad de lado y pensar más en lo que estoy viviendo, que en lo que voy a vivir.

Cuando llegue al cine me quedé parada con mi teléfono, estaba charlando con Cameron, o mejor dicho, discutiendo, de lo mala que había sido la película que vimos ayer. Estaba SUPER metida en mi papel cuando siento unas manos que tapan mis ojos, no me asusté porque claramente sabía quién era.

-Talabis...

-T/a, veo que superaste tu miedo -rió-.

-No te creas, caminar hasta aquí fue una tortura -lo abraze-.

-Lo siento... Si quieres podemos ir a otro lado.

-No... Está bien aqui no te preocupes.

-Bien, pero... Tu tendrás que escoger la película, soy muy malo en eso -rió-.

-Ja, eso porque no conoces a Cameron.

-N-no, n-o lo conozco -trago saliva-.

-¿Pasa algo? ¿Te sientes mal? -palpe su frente-.

-No, no es nada -me sonrío- Creo que ya se me pasó la fiebre, así que no tienes que preocuparte por eso.

-Esta bien -sonrei-.

-¿Te gusta la comedia musical?.

-Si que eres malo eligiendo -reí-.

-Entonces veamos una de terror, hay una en cartelera.

-Y-yo...

-¿Te da miedo? -preguntó vacilón-.

-No, claro que no me da miedo -menti-.

-Bien, entonces vamos.

Pedimos unos pochoclos/palomitas, pero el no quiso. También unos chocolates, pero esos no cuentan porque me los comí en los trailers. El se pidio, en cambio, unos frutos secos con agua y yo una gaseosa.

El cine estaba super vacío, solo tres o cuatro personas. Ya de por sí los trailers de otras películas me habían dado miedo.

-Talabis...

-¿Que pasa?.

-Tal vez si me da miedo -reí mirándolo a los ojos-.

-Shh, es solo una película -tomo mi mano, lo que hizo que me sintiera protegida-.

-Si, solo una película... -presione nuestras manos-.

La película era "La maldición de la llorona" trataba de una madre que se mudaba ella y sus hijos a una casa y en ciertas ocasiones "la llorona" intentaba ahogarlos o cosas así. Encerio daba mucho miedo (caraderadiorebel loviu por la ayuda 💘).

Todo iba bien hasta que está vieja con el pelo todo desacatado, apareció repentinamente. Me asusté mucho y pude notar que Blake también aunque intento disimularlo. Lo primero que se me ocurrió fue abrazarlo y dejar de mirar.

-Tranquila -rió en mi odio- No fue nada -acariciaba mi espalda-.

-Mi corazón Blake...

-Esta todo bien -rió- estoy aquí contigo, respira.

-Esta película es una mierda -me queje-.

-Es solo una película, no tienes que enfadarte, si quieres podemos irnos.

-No quiero arruinartela.

-La arruinarias si yo sé que tú no la estás disfrutando, no quiero que estés mal, sería para mí peor que no terminar de ver esta estúpida película.

-¿Porque siempre te preocupas tanto por mi? Es muy tierno...

-Por el mismo motivo del hospital, solo que aún no te das cuenta.

-¿De que?...

-De qué me gustas T/n.... -suspiro-.

-¿Q-que?.

-Lo se, abstente a decir que no sientes lo mismo. No quiero que nada cambie. Porfavor, seria sumamente estúpido que la relación en nosotros cambiará solo porque te confesé mis sentimientos, los cuales no te corresponden, así que solo te pido que seas madura y no te alejes de mi -dijo estricto, hasta creí que estaba enfadado-.

-Pe-pero...

-Ya cállate, hagamos de cuenta que esto no paso y... Sigamos como antes -me interrumpio-.

-Pero Blake...

-¿Que?.

No me atrevia a decirlo, lo tenía malditamente en frente y no me atrevia. Era ahora o nunca... El lo había confesado ¿Que tanto me costaba a mi? Encerio, si no lo hacía ahora, jamás lo haría.

-¿Podemos irnos?.

-Si, si eso quieres, entonces si.

Y no.... No me atreví, los nervios, la manera que me habló antes... Todo me había jugado en contra. ¿Que tal si nos peleabamos siendo pareja y no volvíamos a hablar? Eso sería espantoso, me asustaba el echo de que eso pudiera suceder pero, a la vez quería sentir lo que era poder estar en sus brazos, rozar nuestros labios... No lo se, sentir esa conexión tan divina que ambos sentíamos.

Íbamos caminando por la calle angosta que antes había caminado sola, estábamos a poca distancia uno del otro, caminando paralelamente, como si estuviésemos sistematizados. Quería hablar, pero no me atrevia, mi corazón gritaba "!Hazlo!" Pero mi mente decía "Quedarás como una completa idiota.

-Talabis... -Susurre-.

-Aja -asintio-.

-T-tu... C-como te explico...

El no se detenía, como si no le estuviese prestando atención a lo que decía. Eso me enfadaba, se mostraba indiferente, odiaba eso. Así que en un arrebato lo tome por el hombro y... Uni nuestros labios.