Capitulo 55. Trampa

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- ¡Joder! – Escucho la voz de alguien a lo lejos, trato de abrir mis ojos, pero una punzada de dolor pasa por mi cabeza – ¡Isabela! – Me llaman.

- ¿Quién habla? – Pregunto.

- Despierta.

- Me duele la cabeza – Me quejo, abro un ojo y lo cierro de inmediato – Cierra la ventana – Pido

- ¿Cómo llegamos aquí?

- ¿Quién eres? – Pregunto

- ¿Cómo que quien soy? – Grita y mi cabeza palpita de dolor – ¡Despierta!

- Cállate – suplico y vuelvo a caer dormida.

Siento algo pesado sobre mi espalda y abro mis ojos de golpe, pero los vuelvo a cerrar ya que la luz lastima mis ojos. Los voy abriendo de manera lenta y observo el lugar ¿Dónde estoy? Y ¿Con quién?

Me levanto con cuidado de no despertar a la persona que este a mi lado, me giro y me doy cuenta que es Daniel. Respiro aliviada al comprobar que estoy vestida y sobre todo que no pase la noche con un extraño.

- Joder que maldito dolor de cabeza – Susurro y busco el baño ¿Cómo llegamos a este lugar? ¿Dónde estamos? Conozco la casa de Dani, y sé que no estamos ni en la suya, ni en la mía. Hago mis necesidades y vuelvo a la cama.

- ¡Dani! – Trato de despertarlo

- Hmmmm – se remueve

- Despierta – Se mueve en la cama hasta que por fin abre sus ojos y se sienta.

- ¿Dónde estamos? – pregunta y hace una mueca, se lleva la mano a la boca y me percato de que tiene el labio partido - ¿Qué mierda me paso? ¿Con quién me agarre a golpes?

- No lo sé – Trato de recordar quien le pudo hacer semejante golpe, pero no lo recuerdo.

- Solo espero que el otro haya quedado peor – Habla - Tengo una resaca horrible – Se queja – La próxima vez no me dejes tomar tanto.

- Estoy igual que tú – Saca algo de su bolsillo y me lo entrega.

- Mira.

- ¡Joder! – Miro la factura del club – Con todo esto podría comprarme otro auto.

- Nos tomamos medio club y no recuerdo una mierda.

- Pues yo menos, lo último que recuerdo es haber cantado – Mi pancita suena – Vámonos, necesitó comer algo – Miro la hora y son las cinco de la tarde, menos mal es sábado.

Salimos del lugar y me doy cuenta que estamos en un hotel ¿Cómo carajos es que terminamos aquí? Entre más trato de recordar más me duele la cabeza.

- Esto me recuerda a una película que se llama ¿Y qué paso ayer? – Me dice y asiento, también la he visto y sé que nuestra apariencia debe ser un asco en este momento.

- Solo espero que no hayamos hecho nada extraño – Ruego – Vamos, te invito a comer, porque tu creo has quedado en banca rota.

- Ni me lo recuerdes, que me echó a llorar.

Buscamos un lugar donde comer, mientras cada uno está perdido en sus pensamientos.

- No, definitivamente no recuerdo nada – Se queja - ¿Cómo es posible que alguien me haya reventado la boca? Y no lo recuerde, ni siquiera se si el otro quedo peor que yo ¿O me caí?

- Al menos no tuvimos sexo.

- No lo sabemos Isa - Me sonríe coqueto.

- Conozco mi cuerpo y estoy completamente segura de que sigo siendo virgen.

ENTRE LUZ Y Oscuridad (CORRIGIENDO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora