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Día libre. Eso significaba poder estar en casa descansando. Todos los chicos estábamos en el sofá, mirando una serie, bueno, solo Sunoo y Jungwon. Los demás estaban con sus celulares.
Yo estaba jugando con el cabello de Jay, mientras él jugaba a la nintendo. Jay estaba medio recostado contra el respaldo del sofá mientras yo estaba sobre su regazo acariciando con una mano su cabello.
-Que falso, pero si le pegue!-Exclama molesto Jay.- Encima me mata de nuevo...-Río por su molestia.- De que te ríes bonita?
-Es gracioso cuando te molestas por un juego.-Digo riendo. Jay me mira sin expresión. En eso suena su móvil.
-Puedes fijarte quien me habló?-Pregunta concentrado en su juego. Estiro mi brazo y agarro su celular. Era su padre.
-Tu padre dice que se irá de viaje por negocios y pregunta si quieres que te traiga algo.-Leo el mensaje de su progenitor.
-Dile que no hace falta.-Responde. En eso me mira.- Alto. Dame eso.-Le entrego su celular y teclea algo.- Listo.-Dice dejando su celular en el suelo al igual que su nintendo, pasa su brazo por mi cintura y me acerca más a su cuerpo.- Tu, yo, una cita.
-Ahora?-Él asiente.- Es de noche Jay.
-Que mejor una cita por la noche?-Ríe.- Los chicos se las van a pasar en el sofá, y van a pedir sushi. Como todo día libre que tenemos...Anda, vayamos a una cita.
-Está bien.-Suspiro.- Iré a cambiarme de ropa.-Jay sonríe. Me levanto del sofá y voy a la habitación buscando que ropa usar. Cuando encontré que ponerme, me maquillo sutilmente y me colo mis accesorios y un poco de perfume. Guardo mi celular en mi bolsillo y salgo. Jay me ve y sonríe mientras se acerca a mi.
-Volvemos en un rato!-Exclama Jay mirando a los chicos, pero estos nos ignoran pues miraban atentos la televisión.- Mejor nos vamos.-Dice.
Y ahí estábamos nosotros, caminando por el monte de Namsan. Jay y yo caminábamos tomados de la mano, viendo el cielo estrellado.
-Tienes hambre?-Me pregunta.
-Aún no. Pero si tu tienes hambre podemos ir a comer.-Digo, pero el niega.
-Sigamos caminando.-Dice.
Continuamos caminando por varios minutos hasta llegar a donde terminaba el camino, desde esa altura se podía ver toda ciudad.- Es la primera vez que vengo aquí.-Hablo mirando la ciudad.
-De verdad? Creí que ya lo conocías.-Yo niego.
-Siempre quise venir, pero nunca tuve la oportunidad. Me la pasaba entrenando y entrenando.-Aclaro.- HeeSeung quiso traerme aquí por mi cumpleaños, pero nunca pudimos por mis horarios...Así que gracias por traerme aquí.-Me giro y no veo a Jay por ningún lado.- Jay? Donde estás?-Giro mi cabeza y lo veo recostado contra un árbol. Me veía con una sonrisa.
En eso abre los brazos, sin dejar de sonreír. Corro hasta él y lo abrazo, y así nos quedamos, hasta que habla.- You make me very happy. (Me haces muy feliz)-Dice.- I love you, honey. (Te amo cariño)-Me sonríe acariciando mi mejilla.
-And I love you so much more. (Y yo te amo mucho más)-Respondo. Él mira mis labios fijamente.- Si tanto quieres besarme, hazlo. No muerdo.
-Ja ja. Eres graciosa.-Dice. Su mano baja a mi mentón y une nuestros labios, formando un beso suave y tierno, pero que luego pasa a ser un beso algo subido de tono.
Su mano baja a mi cintura acercándome mucho más a él, mientras muerde mi labio inferior.
En medio de nuestro mundo, nos tuvimos que separar debido a una voz cerca de nosotros. Era un chico de aproximadamente unos 20 años.
-Disculpa el atrevimiento pero hace rato te vi y me pareciste muy linda.-Dice el chico mirándome, ignorando completamente a Jay.- Te gustaría pasar una noche en mi cama?-Aquel comentario fue la gota que derramó el vaso. Jay le dio un golpe en la cara.
-Jay!-Le grito.
-Escúchame bien pedazo de mierda. Ni se te ocurra a volverle a decir una cosa así a MI novia, porque te juro que te parto la puta cara.-Estaba furioso y lo notaba desde lejos.- A mi novia nadie le falta el respeto.-Escupe.
-Jay, vámonos por favor.-Le susurro agarrando su brazo.- Jay...
-Estás advertido imbécil.-Gruñe Jay.- Y otra cosa. Yo soy el único que la puede llevar a la cama.-Dice para así luego tomar mi mano e irnos de ahí. Ya cuando estamos lejos me mira.- Siento haber dicho eso último, y también siento reaccionado de esa manera, solo me molesta que te digan esas cosas y...Yo solo quiero protegerte.-Dice acariciando mi mejilla.- Y lo seguiré haciendo por mucho tiempo más.
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