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Sunoo y Dasha eran muy conocidos en el arcade que estaba ubicada en la calle principal. Ambos habían ido a ese lugar desde que lo inauguraron, básicamente eran conocidos como los Reyes del Arcade. Todos los querían ahí.
Un día, luego de la práctica de Sunoo y las clases de Dasha, ambos fueron al arcade para pasar la tarde, pues era su aniversario de novios y lo iban a pasar ahí. Al entrar al lugar notaron que había un nuevo juego.
- Sunoo, Dasha. Es bueno verlos nuevamente. - Dice la chica que siempre atendía a los que llegaban.
- Igualmente Sunni. - Sonríen ambos.
- Veo que han notado qué hay un nuevo juego. Ha llegado hace unos minutos. - Comenta mientras señala el nuevo juego. - No hemos dejado que nadie lo juegue, queremos que lo inauguren ustedes.
- ¿En serio? - Preguntan. La mayor asiente.
- El juego es todo suyo chicos. Disfruten. - La pareja se miran entre sí y corren hasta el nuevo juego.
- Las damas primero. - Le dice Sunoo hacia su novia.
- Que caballeroso. - Ambos ríen y la chica procede a jugar. Pasaron algunos minutos hasta que aquella partida terminó. - Nada que no podamos superar. - Sonríe la chica mientras le cede el lugar a su pareja. - Iré a la cafetería. Quieres algo?
- ¡Bubble Tea! - Exclama feliz el chico.
- De acuerdo. Vuelvo en un momento cariño. - Este asiente y la chica se va a la cafetería que estaba en el mismo arcade.
- Buenas tarde Reina. - Le sonríe el chico que siempre atendía a Dasha. La chica ríe por el apodo. - En un momento estarán listos sus bebidas. - Eran tan conocidos en el arcade que hasta sabían las bebidas favoritas de la pareja. - Como siempre. La casa invita. Disfruten de nuestros servicios.
- Muchas gracias Kim. - El chico solo sonríe. Dasha regresa a donde estaba su pareja, pero antes de llegar ve a una chica hablando con él, o mejor dicho, coqueteando.
- Vamos oppa. Será divertido. - Le dice aquella chica de cabello rubio. - Se que eres el rey de este arcade, me dejas ser tu reina?
- He dicho que no estoy interesado. Tengo novia. - Le responde. Dasha pasa al lado de la chica empujándola con su hombro.
- Aquí tienes Sunoo. - Este sonríe al ver a su novia. - ¿Esta chica te está molestando cariño? - Él asiente haciendo puchero. - Soy Dasha, novia de Sunoo y reina del arcade. ¿Serías tan amable de no molestar a MI novio? Gracias. - Sonríe sarcástica. - Ahora desaparece de mi vista.
La chica la mira de pies a cabeza y se va a regañadientes. Una sonrisa aparece en el rostro de Dasha. - Gracias Jagi. Esa chica me estaba molestando.
- Nadie molesta a mi niño. - Dice esta acariciando el cabello de Sunoo.
- ¡Jagi! ¡No soy un niño! - Dice el chico cruzándose de brazos.
- Si lo eres. - Sunoo mira seriamente a su novia. - Ay ya bueno. No me mires así.
Sunoo suelta una carcajada. - ¿Vamos a nuestro juego? - Sonríe el mayor pasando su brazo con suavidad por la cintura de su pareja.
- Eso no se pregunta. - Ambos sonríen y caminan hasta su juego favorito. Estuvieron jugando casi toda la tarde y para ellos estar en el arcade era más que especial.
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