Noventa y uno

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Mi mente era un embrollo.

Sopesé las posibles respuestas con cuidado.

Una parte de mi me decía que le diera una respuesta positiva, la parte enamorada y estúpida por él.

La otra me decía que no le contestara y que cambiara de tema.

Una pequeña parte me decía que negara mi amor, que era lo más conveniente porque había muchas posibilidades de que en realidad no me quisiera de la misma manera.

Aún su corazón estaba dolido lo más probable era que buscaba algún refugio entre tanto dolor. Estaba dispuesta a ser su refugio pero sería contraproducente, saldría lastimada.

— ¿Por que cambiamos de dirección? —pregunté queriendo evadir el tema.

—Se lo que haces, contesta mi pregunta.

—Tu primero.

—No se vale, yo pregunté primero. —dijo. Su rostro reflejaba tantas emociones, sus ojos eran un mar de dudas en ellos podía ver un brillo quizá de esperanza por mi respuesta.

—Contesta primero y después te concedo las respuestas que desees. —propuse.

—Esta bien. —inhaló una basta cantidad de aire y después lo soltó. —Ella venía hacia nosotros y no sé, simplemente no quise verla de frente, sabes, pones las cosas tan difíciles. Te pones cómo una niña malcriada cuándo menos es conveniente. —terminó.

—¿Sólo por eso hiciste tanto drama? —pregunté.

—No venía sola. Venía con... Como sea. —suspiró y bajó su mirada al suelo. —Y bien, responde mi pregunta. —exigió.

—Te quiero, mucho, tanto que tu dolor es mi dolor, si estás feliz también lo soy, tus tristezas y preocupaciones me afectan, deseo tu felicidad antes que la mía y daría todo por que tus días tengan sentido y desees aprovecharlos al máximo. ¿Eso responde tu pregunta?

Miró al cielo y cerró los ojos.

Tenía un nudo en la garganta pues quizá no era la respuesta que necesitaba en esos momentos pero yo no podía abrir más mi corazón, ya era suyo pero también era mío, no podía sufrir más por él, no aún, necesitaba estar fuerte para él. Para sostenerlo cuando estuviera por caer, para levantarlo si tropezaba, para dibujar una sonrisa en su rostro.

Soltó una carcajada y volteó hacia la nada.

—Eres una tonta, claro que no responde mi pregunta, pero por el momento es suficiente. —profirió después de unos minutos que parecieron eternos. Su semblante se relajó. Me abrazó y besó mi frente por unos segundos bajó a mi oreja y susurró también te quiero mucho.

Tuvimos una charla muy amena después de ese momento si bien incómodo para los dos.

Quizá no era lo que esperaba pero tenía la esperanza de que interpretara correctamente mis palabras.

No era tonto sólo la cara tenía.

Recomiendo a @GCRosemary ella agh como explicarlo es mi gemela la amo demasiado yo soy su filtro su colador de ideas soy su beta todo supongo xD compartimos el mismo gusto por la escritura así que LEANLA PLOX es un amor! :3 y es mía cuidadito con ella. Memorias de la otra es algo similar a Deseo Odiarte en cuestión de cómo son los caps chiquitos pero bonitos. Al Infierno con su amor es tan adghfsadd puto Caleb lo amo. En fin. Espero que le den una oportunidad besos! :*

Deseo OdiarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora