Ochenta y uno

665 45 22
                                        

Negué rotundamente el hecho de haberle contado algo ese día de "peda".

Recordaba todo lo que había pasado desde los recuerdos de ese día hasta las bromas que le hice. No estaba tan ebrio es sólo que necesitaba valor para desahogarme con alguien que no fuera una botella de cerveza.

Lo ocurrido ese día, ¡joder! Lastimaba cómo si lo estuviera reviviendo.

La burla en su voz, la indiferencia en sus ojos, lo controlador de sus movimientos.

¿Cómo me pude enamorar de ella?

Es decir es bonita, sus ojos, sus labios, sus gestos me tenían anonadado, su cuerpo no se diga, parecía hecha a mano por algún experto escultor, pero su personalidad era fría y prepotente aún así logré amarla.

Su felicidad era la mía, su tristeza me afectaba, sus preocupaciones se habían vuelto mías.

¿Qué le hice para que me pagara así?

No era grosero, siempre la traté con respeto jamás había sido caballeroso y lo era con ella porque la hacía sentir especial.

La toqué cuándo ella lo quiso, cómo quiso, dijo que la había hecho sentir cómo nunca antes.

¡Le hice el amor, joder! ¿Acaso fueron mentiras?

Su cuerpo se convirtió en mi obsesión quería hacerla mía a todas horas, quizá era esa necesidad de saber que la poseía que sólo sería mía. Cuándo decía mi nombre entre gemidos me enloquecía, que se quedara dormida en mi pecho después de haberla amado con todas mis fuerzas era el paraíso. Observarla dormir era unos de los mejores placeres, ver como su rostro cambiaba al paso del sueño era reconfortante, cuándo fruncía el ceño, ganas no me quedaban de meterme en ellos y hacer lo necesario para que esa expresión cambiara, cuándo reía ¡Dios! esperanzado logré pensar que era por mi, que soñaba conmigo.

La besé tal y cómo me enseñó, despacio y tierno a veces con un poco de morbo pero siempre terminaban en besos dulces. Sus labios se convirtieron en el humo de mis cigarrillos, calmaban mis nervios me hacían sentir bien sin dañarme, hasta que ya no los tenía, era un martirio no poder besarlos.

¿Por qué amor mío?

Acaso no le gustaban mis halagos. No importaba cuan sencilla se vistiera siempre lucía como una reina y se lo hacía saber.

Le dije mil te amos y no fueron suficientes.

Me dijo que me quería eso me bastaba, ¿por qué no logró amarme?

¿Por qué me traicionó así?

Ayyyyyyyy!!!!!!!!!! *shoro*
Lol no lo quería largo pero bueh xD
Espero les guste y comenten y voten así bien bonis espero no me odien y haya logrado transmitir su pena, ¿lo logré? :/? Bueno los amo!

Deseo OdiarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora