— ¿Eres mi amiga, cierto? —pregunté juguetón. Estaba aburrido así que la molestaría un rato.
—Supongo —contestó sin dejar de mirar el ordenador.
—Vengo hasta aquí y me ignoras, no jodas.
— ¿Qué quieres? —dijo molesta.
—Ayer estaba revisando tu red social y uhm... Vi a una amiga tuya muy guapa, ¿te molesta si le hablo? —El resultado que esperaba llegó, frunció los labios y casi la oía contar hasta diez para calmarse.
—No para nada dime quien es y te la presento. —contestó con los puños cerrados.
—¿En serio? —pregunté esperanzado.
—Serás idiota por supuesto que, ¡no! —profirió y golpeó mi brazo.
— ¡Ay, pero que ruda! —dije haciendo la voz más femenina posible.
—Eres imposible, ya déjame trabajar.
—Pero ya en serio, ¿por qué no me quieres presentar a nadie, te doy pena, es eso? —pregunté volviendo a mi nueva misión molestarla demasiado.
—No, no es eso, es sólo que, ¡osh! Si ya sabes que me cae mal eso, ¿para que lo haces? —preguntó
— ¿Hacer qué?
— ¡Eso, joder! —exclamó frustrada.
—Explícame.
—Pues ya sabes, que me hables de otras cuando estas conmigo, me haces sentir inferior, como si no valiera nada y que es mejor estar con quien sea antes que conmigo, ¡eso! —dijo con sus ojos tristes. Ya me estaba echando para atrás pero empecé y debía termina.
—Pero sólo somos amigos, no se por qué te sientes así.
— ¿Sólo tu amiga? Acaso con todas tus amigas haces lo que haces conmigo, acaso a todas las besas y las coges, dime por que yo no hago eso con mis amigos. —dijo. Me quedé sin argumentos.
—Eres especial.
—Especial mis nalgas, se muy bien que juegas conmigo, en realidad no sé ni por que lo permito. —dijo molesta, por lo menos ya había cumplido mi misión.
Dio un largo suspiro.
— ¿Te gustaría que yo te dijera ¡Hey ese puto esta bueno, dale mi número y dirección pa' follarmelo!, verdad que no? —preguntó, no sé para que, si quería demostrarme algo no estaba funcionando.
Pero si ese fuera el caso quizá me enojaría con ella por fijarse en otros mientras estaba conmigo, por pensar en alguien más cuando yo le hacía compañía, trataría de decirle mierda y media de él para que perdiera el interés y por nada del mundo permitiría que se le acercase. Oh, ya veo cuál es el punto. Pero no es lo mismo yo soy hombre y ella es mi bonita.
—Perdón.
— ¿Qué dijiste chavo? —dijo en un tono burlón, por supuesto que me escuchó.
—Ya dije.
—Como sea, supongo que no es importante —regresó a hacer no sé que en el ordenador.
—Lo siento.
— ¿Mande? —cuestionó con una ceja levantada, en realidad estaba disfrutando esto.
—Perdóname, no lo volveré a hacer.
— ¿El qué? —Me harté ya de estaba pasando de lista.
—Olvídalo.
—Eres una ternura cuándo te enojas —dijo con una diversión en su voz.
—Soy sexy, no ternura. —contesté. Rodó los ojos e hizo una sonrisa de lado.
—Muy bien "Don Sexy", ¿ya puedo continuar? —preguntó desesperada.
—Sí, bueno no, ¿tu lo harías? Me refiero a que, ¿me pedirías que te presentara a los macuarros con los que me junto? —Sonrió y negó repetidas veces.
—Por supuesto que no, no sería tan idiota para andarte diciendo, ups, sin ofender, además de esa pandillita con la que frecuentas sólo uno me interesa. —contestó.
Esperaba que ese fuera yo, si no corría sangre.
Recomiendo a mi chulisimo escritor @helz-zome me hizo un cuento ayyy tan lindo "The moon and the star" tiene más historias se las recomiendo escribe magnífico. Besos! :*

ESTÁS LEYENDO
Deseo Odiarte
RomansTe escribo como si lo fueras a leer. ----- Portadas de la historia hechas por mi gemelita @GCRosemary. Ella es mía y solo mía pero comparto su talento y les recomiendo que se dejen querer por sus historias.