Solo Por Seis Meses (I)

Capítulo 38

***

Miro pensativa a la ventana mientras las chicas conversan a mi lado. Sammy llegó hace un rato empapada por la lluvia. Vino corriendo cuando leyó el mensaje que le mandé apenas Brooke me perdonó, pero el chaparrón la agarró en el camino.

No supe qué responderle a Blake después de lo que me confesó, por lo que simplemente lo besé para no tener que hablar. Justo después empezamos a escuchar las gotas de lluvia chocar contra la ventana y él tuvo que subir al techo para que el almohadón de su silla no se mojara. Mientras él estaba arriba, escuché que alguien entraba a la casa y bajé para ver a Sammy. Su ropa estaba empapada y Jade la estaba ayudando a secarse con una toalla.

Estábamos subiendo las escaleras mientras yo le contaba lo que había hablado con Brooke cuando se escuchó un trueno. Al entrar al cuarto de nuestra amiga, vimos que ésta se había despertado con el estruendo. Si bien no había descansado lo suficiente, decidió no volver a dormirse y nos quedamos hablando.

No le dije a Sammy lo que me confesó Blake. No me animé. Supongo que ahora que Brooke me perdonó podría decírselo a ella también, pero no quiero que piense que lo prefiero antes que a ella.

–¿Jessie? –Sammy me pasa la mano frente a la cara de arriba hacia abajo para destildarme.

–Perdón, ¿qué pasó?

–Estás como... perdida. ¿Te pasa algo? –pregunta Brooke.

–No, estoy bien. –Les sonrío sin dientes, pero Sammy no se lo cree.

–Ya, dinos.

–Es solo que... es algo que me dijo Blake...

–¿Qué?

–Me dijo que... –Trago saliva antes de seguir–... me ama.

Levanto la cabeza y las miro. A ambas se les cae la mandíbula y me miran con los ojos abiertos como platos.

–¡¿Q-qué?! –grita Sammy.

–Lo que escucharon.

–Y-y... ¿q-qué le dijiste? –pregunta Brooke después de tragar saliva.

–Nada. No creo amarlo. Lo quiero, estoy más que segura de eso, pero ¿amarlo? Es un sentimiento demasiado fuerte...

–Pero.. ¿qué hiciste? ¿Le dijiste eso? Detalles, Jessie, por favor –insiste Sammy.

–Sólo lo besé para evitar responder. Y después empezó a llover y él...

Ahí subió al techo, pero ese lugar es secreto para él y no voy a divulgarlo.

–¿Él...?

–Nada. Te escuché a ti y bajé. –Me encojo de hombros mirando a Sammy.

–Tus dramas son muy aburridos. –Pone los ojos en blanco–. Voy al baño, no cuenten muchos chismes.

–Es entendible que él te ame –escucho desde atrás y me doy vuelta para mirar a Brooke con el ceño fruncido–. Eres la única que le saca esa imagen y él siente atracción por ti desde el día en que te vio. No es ilógico que te ame.

Asiento, sabiendo la verdad que contiene lo que me dijo.

–En cambio, él me atrae desde hace un par de semanas. No se ama a una persona en un tiempo tan corto como ese.

–¿Pero lo quieres?

–Estoy casi segura de que sí. Pero no me animo a decírselo. No cuando el me ama.

–Hazlo cuando estés lista. –Me da una media sonrisa y asiento–. O no lo hagas, si no quieres.

Dejo salir un suspiro.