Capítulo 54, parte 2

45 4 1
                                    

Cuatro cositas para decirles:

1) ¡Gracias por las 5k lecturas! Me hacen muy feliz, nunca pensé que llegaría lejos con este libro y ustedes han hecho esto posible. Muchas, muchas gracias.

2) Perdón por haberme demorado tanto en subir este capítulo. Como es el último, quería que fuera perfecto, y tardé más de lo que esperaba.

3) Es la segunda parte del último capítulo, por lo que aquí termina esta historia. No se preocupen, todavía falta el epílogo, pero yo considero este capítulo el fin de mi primer libro. Voy a extrañar a estos chicos :(

4) De vuelta, hay una lista de canciones que me gustaría que escuchen a medida que leen, si bien es opcional. Están relacionadas con todo el libro, y algunas coinciden con lo que pasa en este mismo capítulo. Están todas en la playlist del libro, que pueden encontrar en spotify como "Solo Por Seis Meses" y el usuario es $0f¡. Acá se las dejo:

Waves - Guitar Acoustic, Dean Lewis

Somebody To Someone, BANNERS

Fireproof, One Direction

Lose You To Love, Selena Gomez

Lost On You, Lewis Capaldi

Don't Give Up On Me, Andy Grammer

Something's Gotta Give, Camila Cabello

Don't Hold Me, Dean Lewis

Let Me Love The Lonely, James Arthur

Brother, Kodaline

In My Blood, Shawn Mendes

Shots, Imagine Dragons

Forgive Myself, Sam Smith

Before You Go, Lewis Capaldi

Photograph, Ed Sheeran

No los entretengo más y los dejo empezar a leer <3

||||

***

1 DE JULIO DE 2022

Las cosas cambian. Aunque sientas que no hay salida, siempre la encuentras. Todo llega a su fin. No vivirás siempre en el mismo infierno. Si eres fuerte y resistes, verás que todo termina cambiando.

Muchas veces me encontré sentada en la arena, mirando el mar, pensando en que, tal vez, estaría mejor si me sumergiera lentamente hasta que mis pies no tocaran el suelo. Pero nunca lo hice. Sabía que habría sido egoísta hacerlo. A pesar del tormento que vivía, habían personas que me querían, y no les haría eso. Yo fui fuerte. Resistí. Y pude salir.

Cuando le doy un abrazo a mamá frente a la puerta de embarque, sé que será el último. Algo dentro mío me lo dice. A partir de ahora, todo se pondrá peor en nuestra relación. Lo sé. Y aunque me alegra que ya no pueda seguir controlando cada segundo de mi existencia, una parte de mi corazón se encuentra en pedazos, porque controladora o no, es mi madre a la que estoy perdiendo. Y duele más de lo que alguna vez pude imaginar.

Una lágrima rueda por mi mejilla cuando me separo y la veo sonreírme.

–Ten cuidado con lo que haces, recuerda tus valores, no te dejes llevar por los universitarios que queman etapas –advierte, y eso me saca otra lágrima más, pero no de tristeza, sino de decepción.

Sí, las cosas cambian, pero las personas no lo hacen. Pueden madurar o fingir ser alguien que no son, pero no cambiar. Y si lo hacen, es para mal. Mamá nunca va a cambiar. Será siempre la misma mierda de madre.

Solo Por Seis Meses (I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora