Aunque tú no lo sepas

Capítulo 3

Ya llevaba media tarde aquí metida. Estaba un poco aburrida por el poco movimiento de gente. Aunque por un lado, era lo normal al ser miércoles, hasta que me fijé como dos chicas bajaban las escaleras. Una de ellas me sonaba muchísimo pero no caía de qué podía ser. Las atendí, y seguí pensando de qué me sonaba esa chica. Quizás de alguna que otra tarde por aquí, o alguna fiesta. Yo soy de quedarme con las caras de la gente, pero claro, cuando trabajas en un bar y ves a tanta gente, pues pasa lo que pasa. Hasta que lo vi. Vi como esa chica que tanto me sonaba empezaba a dejar leves caricias sobre su acompañante y en ese momento caí. ¡Ya sé de qué me sonaba! Es una de las chicas que desayunan de vez en cuando en el Asturiano. Pero no está con la chica con la que desayuna en el bar, la que yo supuse que era su pareja. Estaba con otra chica que poco se parecía a esa diosa morena de pelo rizado, ya que esta es rubia y con el pelo liso. Yo intenté disimular limpiando la barra mientras no les quitaba la vista de encima, hasta que vi como se estaban besando y me quedé, flipando.

Intenté seguir con mi trabajo pero mi humor empezó a cambiar. ¿Cómo podía hacerle eso a la morena? Quizás no eran pareja, pero como no iban a ser pareja si se miraban de una manera..., que yo por ejemplo, no miro a Marina cuando estamos en cualquier bar. Y vamos, que las había visto darse algún que otro beso.

Madre mía... Cada vez entiendo menos al mundo, y mira que puedo ser muy comprensiva. Pero con estos temas...me hierve la sangre. Porque, si estás con tu pareja, le debes un respeto. Si quieres tener algo con otra persona, lo primero es que no querrás tanto a la persona que tienes a tu lado, y lo mejor es dejarlo. Eso de poner los cuernos me parece..., de ser muy cobarde. Sí, porque si tuvieras valor de afrontar la realidad, de pensar en tu pareja y decir "pues creo que ya no la quiero lo suficiente porque me gusta otra persona y lo mejor es dejarlo". Una cosa es que veas a una persona y te parezca atractiva, pero otra muy distinta es engañar a quien te está dando toda su confianza, su amor, su tiempo... Yo es que de verdad no lo entiendo.

Por otro lado está la persona a la que le ponen los cuernos, ¿es que nadie piensa en ella? En la inseguridad que le puedes crear a esa persona, ese sentimiento de no soy suficiente para ti porque estás con otra aún estando conmigo. Si soy sincera y si algo le agradezco profundamente a Ana, es dejarme antes de ponerme los cuernos. Porque una vez que superas el dolor que te produce dejar una relación, y piensas fríamente lo que ha pasado, llegas a la conclusión que antes de ponerme los cuernos y sufrir doblemente, déjame y ahórramelo. Sé buena persona, que no cuesta tanto. Más cuesta llevar una doble vida. Como dice mi abuelo "para ser un buen mentiroso, primero tienes que tener muy buena memoria".

Estaba limpiando la barra mientras las miraba fijamente, cuando María apareció.

- Luisi... si sigues así, te vas a ver reflejada en ese trozo de la barra. Sabes que la puedes limpiar entera, ¿verdad?

- ¡¡Ay María!! No sabes el disgusto que llevo. -paré de limpiar, dejé el paño a un lado y me apoyé en la barra.

- ¿Ha pasado algo? -dijo mi hermana asustada.

- ¿Qué si ha pasado algo? ¡Claro qué ha pasado algo María!

- A ver Luisi, tranquilízate y cuéntame.

Suspiré para tranquilizarme.

- Gírate y mira a las dos chicas que hay en el reservado, pero disimuladamente. -puse énfasis en el disimuladamente ya que las Gómez podemos ser muchas cosas pero disimuladas... no.

- Sí, dos chicas. ¿Qué pasa? ¿Algún ligue tuyo? -dijo alzando las cejas.

- ¡Qué dices María! Si tú lo sabes todo y sabes que eso de ligar pasó a mejor vida. No, es que la chica de la coleta, le está poniendo los cuernos a su novia. -dije muy convencida.