Tras la conversación que tuve ayer con Marina, estoy un poco más tranquila. Veo que se acerca el día de quitarme de encima esta gran mochila en forma de secreto.
Decidí que, para hacer mis averiguaciones, lo mejor sería ir al King’s a estudiar. Le diría a María que en casa con los peques, es imposible, y en el despacho me podría concentrar más, aún estando ella arreglando papeles. Era una forma de estar dentro del King’s, y de vez en cuando, salir con alguna excusa, y así ver si estaba Nuria con su querida Sofía.
Fui al King’s a eso de las 5:30, iba con mi mochila y con la excusa perfecta preparada. Bajé las escaleras y vi a Gonzalo solo en la sala.
- ¡Hola Luisita! ¿Qué haces por aquí?
- ¡Hola Gonzalo! Pues nada, que en casa es imposible estudiar con los peques, y había pensado ponerme en el despacho, a ver si así puedo adelantar algo.
- Pues aprovecha que no está tú hermana María. Me dijo que vendría pero más tarde.
- ¡Genial! Pues voy a entrar. Si llega avísala que estoy ahí dentro.
- Sí, no te preocupes.
Perfecto. María no estaba. Tenía vía libre. Me acomodé en el despacho y empecé a estudiar.
Una hora después, mi hermana apareció por el despacho.
- ¡Hola Luisi! Me había dicho Gonzalo que estabas aquí estudiando, ¿y eso?
- ¡Hola! Es que en casa con Ciriaco corriendo y entrando a mi habitación cada dos minutos, no conseguía concentrarme. Así que, decidí venirme aquí. ¿Te molesta? Si te molesta, yo me voy a casa, que quizás ya se le haya pasado el ansia de molestarme.
- No Luisi, para nada. Pero no sé, ¿no te molesta la música? Sabes que existen las bibliotecas y las salas de estudio, ¿verdad?
- Ya María, pero para irme a la biblioteca tengo que ir temprano o no cojo sitio. Y la música, qué va, tengo esto. –levanté los tapones que uso para estudiar.
- Bueno, pues quédate ahí estudiando. Yo me voy fuera a hablar con Gonzalo un rato. Si necesitas algo, ahí estamos.
- ¿Hay mucha gente fuera? –me interesé.
- No, un par de mesas.
- ¿Me haces un favor?
- Sí, dime.
- Me preparas un café y ahora en 5 minutos salgo. Así me despejo un poco.
- ¿Quieres que te lo traiga aquí? Así puedes seguir estudiando.
- No, no, salgo yo y me lo tomo con vosotros. Que me viene bien despejarme aunque sea 5 minutos.
- Como quieras.
María salió del despacho. Parecía que mi excusa de estudiar aquí se la había tragado, total, era muy creíble que Ciriaco estuviera por casa pegando gritos y molestando. Por la hora que era, si Nuria iba a venir, estaría aquí o al llegar, ya que todas las tardes que las había visto, era esta hora más o menos. Tenía que empezar con la investigación porque no creo que aguantase mucho sin decirle a Amelia lo que sabía. Pero con todo el lío que había montado con Marina, hay que seguir el plan.
A los 5 minutos salí. Ni rastro de ellas. Me tomé el café, hablé un poco con Gonzalo y María, y me volví a meter al despacho. Ya que estaba tranquila, iba a aprovechar la tarde para estudiar.
Cuando me quise dar cuenta, eran más de las 9. Decidí que ya había estudiado suficiente, y debía irme a casa. Salí del despacho y me acerqué a la barra.
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Aunque tú no lo sepas
FanficYo no quiero ser tuya ni que tú seas mía, quiero que pudiendo ser con cualquiera nos resulte más fácil ser con nosotras. Elvira Sastre