Capítulo 8

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POV ALLARIK

Esta clase de juego lo podemos jugar entre dos. No puedo creer que una mujer me tenga suplicando por sus besos, no puedo creer que una desconocida me tenga solo imaginando lo fantástico que sería tenerla empalada en mi miembro, mientras me cabalga.

Dejo de tocar la puerta y retrocedo varios pasos, no quiero parecer desesperado, no quiero que ella piense que a comensado a ser importante para mi, cuando en realidad lo único que quiero es tenerla entre mis piernas, que sienta curiosidad por ella no quiere decir que me interese para tener algo serio.

Me quito mi ropa interior y no me molesto en ocultar mi desnudez, me acuesto en la cama y cruzo mis brazos por detras de mi cabeza esperando que Zahira salga del baño para poderme ir a duchar, podría ir a uno de los otros baños que hay en la casa, pero quiero fastidiarla, quiero ver como se le sonrojan las mejillas cuando lo primero que vea sea mi masculinidad en toda su plenitud.

Después de unos minutos, la puerta del baño se abre y veo salir a Zahira.

—Ya terminé de hablar con mi her... —no termina la frase cuando de un momento a otro se gira y queda de espalda—. ¿Podrías colocarte algo encima? —más que una pregunta suena como exigencia y yo sonrío complacido por su reacción.

Me levanto de la cama y la abrazo por la parte de atrás de su cuerpo, pegándole toda mi desnudez a su trasero que solo se encuentra cubierto con su diminuta tanga, Zahira suelta un jadeo y recuesta su cabeza en mi pecho, deslizo con sutileza mis manos desde sus muslos y subo rozando su intimidad hasta llegar al borde de su ropa interior.

Mi miembro está tan duro que siento que podría explotar en cualquier momento, pero debo ser fuerte aunque el momento no ayude de a mucho. introduzco mi mano con la agilidad que he adquirido estos últimos años y cuando estoy a punto de tocar lo que tanto deseo, pasa lo mismo que anoche. Ella me detiene y yo maldigo mentalmente.

—No. —dice con firmeza mientras aparta mis manos de su cuerpo y en este punto de la situación solo pienso con el latir de mi polla, junto la ira que se hace presente ante tal humillación.

Llevo mis manos a sus hombros y la giro sin tener la más mínima delicadeza para que me encare, estoy harto de que solo venga y me caliente, para al final hacerce la digna y no llegar a nada.

—¿Por qué no, Zahira? ¿Acaso no te agrado? —estoy tan molesto por el rechazo de esta mujer, pero me esfuerzo para que no lo note.

—No soy esa clase de mujeres que están acostumbradas a acostarse con un tipo solo una vez y después se van asi como si nada —declara mientras se remueve incómoda para que la deje de tocar, pero no lo hago—. Tengo principios.

Muy digna. Claro... lo dice la chica que me ha utilizado a su antojo y durmió anoche en la misma cama con un extraño.

Miro fijamente sus hipnotizantes ojos de color azul y ladeo mis labios en una sonrisa cinica al ver lo asustada que está, pero trata de ocultarlo haciéndose ver como una tipa dura. Bajo hasta la altura de su oído y luego le susurro de manera lasciva:

—Pues no sabes del placer que te pierdes —sus mejillas se ruborizan y toda su piel se eriza bajo mi tacto en cuanto mi cálido aliendo, golpea a su canal auditivo—. Si dejaras de ser tan apretada y mojigata, yo te podría enseñar muchas cosas, Zahira. Y créeme que te encantarían.

Ella retrocede varios paso huyendo de mi toque y frota sus brazos para bajar lo erizado de su piel.

—Haber... y según tú. ¿Qué sería eso tan interesante que podrías enseñarme? ¿Qué es eso que crees que te hace tan especial y estás convencido de que puedes llamar así sea una pizca de mi atención? —cuestiona con esa mirada desafiante que ahora en estos momentos se ha vuelto mi favorita y no dejo de pensar que su gallardía es increíble.

ALLARIK  Libro #2 ADD ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora