Me despierto, siento como me arrastran mis brazos, levanto la mirada, tengo mi boca tapada con un trapo, miro a mi alrededor, todo es extraño para mí, las paredes un poco sucias, es desolado este lugar, levante mi mirada hacia al frente, grandes luces, un gran pasillo, muchas cámaras, y una gran puerta directa hacia mí, entre dormida veo a los tres tipos y el hijo de puta del metro, él va delante de mí y los demás a los lados, no entiendo su conversación, aun sigo un poco adormecida.
- ¡Llévenla con cuidado!, ¡idiotas! - Señor.
- Como usted diga rey, jajaja. - Secuestrador 1.
- ¡Por dios tenías que conseguirte a esta!, es una tipa muy rebelde. - Secuestrador 2.
- Yo prefiero secuestrar a las lloronas, no con luchonas. - Secuestrador 3.
- Y gritonas. - Secuestrador 2.
- ¡Ustedes tres imbéciles!, solo tienen un trabajo háganlo bien, ¡no hagan preguntas tan estúpidas! ¿¡entendieron!? - Señor.
- Si señor. - Secuestradores.
(¿Quién es este imbécil?, ¿por qué el?, ¿dónde estoy?, ¿qué es este lugar?, ¿a dónde me llevan?, ¿por qué estoy aquí?)
Tantas preguntas en mi cabeza sin entender que pasa, solo veo que me llevan de los brazos, sigo un poco inconsciente por la anestesia, no puedo hacer nada, mi mente está en otro mundo, veo que abren esas grandes puertas, el desgraciado del metro o debería decir ¿¡mi secuestrador!? se fue, solo les aviso a los tipos que me llevaran a una habitación, entre y una gran luz ilumina la sala, escucho una voz llamándome.
- ¡Hey tú!, ¿cómo te llamas? - Tipo alto.
Me sueltan de los brazos haciéndome caer de rodillas, escupo el trapo que tenía en mi boca, me levanto un poco tonta, recostándome en la pared.
- ¿¡Donde estoy!?, ¿¡quiénes son ustedes!? ¿¡qué hago aquí!? - Natalia.
- Primero que todo ¡BIENVENIDA! este es tu nuevo hogar. - Tipo alto.
- Mi nombre es Fabio jefe de este lugar y ¿querida donde estas? jajaja estas en mi mafia, ahora ponte esto. - Fabio.
Saca una prenda de ropa de su cajón, tirándomela en la cara, es un traje de sirvienta, lo miro con despreció, ¿¡cómo este imbécil me va a obligar a ponerme un traje de mucama!?, no lo hare, jamás, este idiota no me va a obligar, enojada tomo el impulso de correr hacia la puerta, tomo la perilla para salir lo más rápido, moviéndola de lado a lado para abrirla, pero no me deja, uno de los tipos que me secuestro viene hacia mí, tomo el impulso de golpearlo con mi hombro, con fuerza abro la puerta y salgo corriendo.
- ¿jefe que hacemos? - Secuestrador 2.
- Déjenla ir, quiero ver hasta qué punto llega. - Fabio.
- Entendido. - Secuestradores.
Corriendo sin sentido a donde ir, miro hacia a atrás y nadie me sigue, no me importa, lo único que quiero es encontrar una salida y escapar, sigo corriendo, me tropiezo con una puerta, casi me caigo pero me mantengo de pie, dejo de correr, tomo un suspiro para recuperar el aire que he perdido corriendo sin sentido, mi respiración es agitada y estoy cansada, corrí demasiado, me aleje lo suficiente de esa habitación, levanto mi mirada, hay muchas habitaciones, camino hacia una e intente abrirla pero tiene seguro, es como una especie de cuartos o salas de reuniones.
No veo ventanas, aunque me pegue a la pared y se escuchan muchas voces al otro lado de ella, ¿que hay en el otro lado? escucho los pasos de los tipos viniendo hacia mí, vuelvo a correr intentando buscar esa puerta grande por donde había entrado, seguro esa debe ser la salida, corro por varios pasillos, no encuentro personas, solo los pasillos desolados y con grandes iluminaciones, sigo corriendo y ahí veo mi anhelada salida, corro lo más rápido que puedo hasta llegar a esa inmensa puerta.
Agitada tomo el impulsó de abrir la puerta, pero tiene seguro, forcejeo, no abre, me estoy desesperando, empiezo cada vez más rápido intentando abrir la puerta, el sonido de la puerta suena con más fuerza, con desesperación y angustia grito pidiendo ayuda, lo único que escucho por unos segundos son voces de burla y un sonido de arma.
- Pero si pudiste llegar muy lejos ¿o no muchachos? jajaja. - Fabio.
Abro mis ojos como platos, ¿¡cómo pudo llegar hasta aquí!? si yo me aleje bastante, quedo en silencio escuchándolos carcajear.
- ¡Voltéate! - Fabio.
Me voltee de inmediato y levanto mi mirada, mis ojos quedan impactados al ver que él tiene un arma en su mano, me quedo inmóvil.
- Tú me dirás si quieres morir aquí de una vez, o prefieres pasar el resto de tu puta vida aquí y morir tranquilamente, sin un arma. - Fabio.
(¡Mierda!)
Dispara a un costado mío haciéndome quedar encogida de hombros, cerré mis ojos por el sonido del arma y maldecía entre mis dientes.
- Tráiganla. - Fabio.
Los malditos me agarran, uno de mis brazos y el otro de mi nuca.
- Al parecer eres ese tipo de mujer que no le gusta acatar las reglas ¿verdad? - Fabio.
- Yo no me pondré eso, crees que por tenerme aquí puedes hacer lo que quieras conmigo, idiota. - Natalia.
- Vaya eres rebelde, pero eso no va conmigo. - Fabio.
Dirigiéndose hacia mí, con su mano me toma de la cara apretando mis cachetes.
- Así que te lo pones por las buenas o quieres por las malas. - Fabio.
Solo lo miro con odio.
- ¡Hijo de puta! - Natalia.
Suelta mi rostro con rencor, caminando hacia delante de mí con uno de los hombres que me secuestro.
- Llévenla a cambiarse. - Fabio.
- Y recuerda señorita "el más inteligente planea sus planes silenciosamente no a la locura" ja. - Fabio.
Tomo la prenda de sus manos arrebatándosela con fuerza y rencor, sigue su camino con uno de los hombres que me secuestro, hasta la puerta donde pude haber salido, con la prenda en mis manos me llevan al vestier, los dos hombres me llevan de los hombros, veo pasar el gran idiota del metro al lado de ellos.
-¡Hey tu estúpido!, ¡ya muéstrate imbécil! - Natalia.
Con fuerza intento soltarme para ir detrás de él, los dos hombres me agarran de los brazos.
- ¡Suéltenme! puedo caminar sola. - Natalia.
Moviéndome, intentando soltarme del agarre de los hombres.
El solo escucha mis palabras me mira de reojo y entra a la habitación donde está "ese tal Fabio", llegando al vestier los dos hombres me sueltan para cambiarme, cuidando la entrada del vestier de que no me escape, miro el traje con desagrado y me lo pongo maldiciendo.
(¡Esta mierda es muy corta se me ve casi mis nalgas y mis senos casi al descubierto!)
Salgo tapándome mi cuerpo.
- ¿Ahora qué? - Natalia.
Los dos tipos me indican que me dirija a esa puerta, camino despacio por el pasillo, nervios, pensamientos llegan a mi mente y cuerpo, miro hacia atrás para intentar escapar, pero veo que los tipos no se han ido, llegando a una puerta blanca dice "consultorio" tengo nervios de lo que allá adentro, pero tendré que hacerlo por mi bien y si quiero salir de aquí con vida.
(Solo espero poder salir de aquí.)
Tome la perilla con mi mano, tomo un suspiro y entro.
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Mi Amo ( En Edicion)
RandomElla su vida cambiara gracias a que es secuestrada y raptada, llegando así a un lugar desconocido, El un tipo misterioso y sexy que está relacionada con una mafia arrastrándola a su mundo. ...