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(Brett)

Desde que recuerdo, el miedo siempre estuvo presente en mi, aun que no sé exáctamente cuándo incrementó.
Quizás mediante crecía y me daba cuenta que todo cambia, y es así, sólo que lo dejé ir, y ahora con unos años más encima, me doy cuenta que ya no queda nada de ayer.

¿Las personas realmente temen envejecer? ¿O temen porque saben que nada a su alrededor será lo mismo?

Creo que estoy haciéndo preguntas bastante estúpidas, pero nunca pude evitar temerle al futuro.

Miraba a las personas que me acompañaban en el tren de camino a Londres.
La vida siempre fue así, me imagino que hasta ahora estuve cegado.
La separación indirecta de mis padres me dio un golpe de realidad.

Al regresar a Lindfield supé que mi madre ya no vivía más en la que consideraba como <<nuestra casa>>. Ahora habitaba en una pequeña granja con un hombre que conoció hace unos meses.

Pareció que me fuí hace tanto que no me di cuenta en qué momento sucedió todo esto.

Pero me quería evitar pensar en esas tonterías de mi infancia, posiblemente la etapa más feliz que tuve antes de conocer las drogas. Quería evitarme ese hueco depresivo y triste, sobre todo la reflexión sobre lo que creí que era mi vida hasta este momento.

Sólo me bastaba una distracción.

A penas bajé del tren, miré a Sam y Alan esperándome.

-¿Y este milagro?-pregunté.

-Yo no quería venir, Sam insistió.-mencionó Alan.

-Salí tempeano del trabajo y no tenía nada que hacer,  y ya que tu vida está llena de drama, dije, ¿por qué no?

Sonreí y le abracé levemente. Me fui a lindfield una semana únicamente, pero parece que no los he visto en meses, especialmente a Sam, quien era la única que parecía encargarse de distraerme cada sábado que podía.

Finalmente, Alan nos llevó en su coche hasta el estudio con Ed. Nos encontrabamos a mitad de la mezcla para "Heroine" y aún había unos aspectos que pulir.

-por fin llegas.- mencionó Mat.-resuelve eso.

Miré hacía donde mat apuntaba con la mirada. Bernard y Ed quienes parecían estar discutiendo "tránquilamente" dentro de la cabina de mezcla.
Es la tercera vez que algo así pasa.

-Se esta volviendo algo problemático.-continúo simon.

Miré a Sam y Alan quienes se encontraban tras de mi, en unas sillas jugando con las palmas.

-ya sé.- suspiré volviendo la vista a la cabina.

Me dirigí a ella pensando en qué decir  cuando entrara, esta situación ya se había repetido algunas veces, pero parecía que bernard no se cansaba de insistir.

Lo veía únicamente aquí en el estudio, y desde la foto suya con justine y damon, me había hecho mucho menos tolerante hacia bernard.
Ya no cuidaba mis palabras, ni me preocupaba lo que pudiera pensar de mi, era lo que era, mi manera de devolverle áquella traición que sentí.

¿No es así? Obtienes lo que mereces, y en ese aspecto, bernard también estaba siendo un hijo de puta conmigo.

Abrí la puerta y ambos me mirarón al toque.

-Brett, gracias a Dios.-suspiró Ed.

-¿Qué pasa?

-Quiere hacer de todo el maldito disco el segundo "Dark side of the moon".

Dogman StarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora