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Rossalie.

En la actualidad.

Me tuve que despedír de Dean y me dolió en el alma, los tres días que estuvimos juntos los disfrutamos al máximo pero no fueron lo suficientemente buenos para llenar el vacío que tengo en el pecho. Dejarlo y no volverlo a ver en quien sabe cuánto tiempo me pone mal, me pone demasiado triste.
Butel no apartaba su vista de mi, parecía que intentaba entenderme, pero no lograba hacerlo.

-Realmente lo amas?.

-Con todo mi corazón, no tienen porqué dudarlo.- desde que subí a la camioneta me encargue de fijar mi vista hacia el paisaje para evitar que me viera llorar, pero ahora mi atención estaba en él.- Deje todo por él, daría todo por él.

-Jamas creí que fuera real lo que tanto decía, la conexión tan especial que tiene contigo. Lamento no haberlo creído desde antes.

-Dean es el hombre más especial que tengo.

-Hablando de él, Rossalie tienes que estar lista para cualquier cosa, buena o mala.

-A que te refieres?, Puede morir?!.

-La vida que llevamos no es un cuento de hadas y así como la suerte nos puede acompañar durante mucho tiempo, de igual manera nos puede dar la espalda.

-Yo se que todo saldrá bien, él estará bien y podremos irnos.

-Todos esperamos que así sea.

No entendía su punto, porque hablar sobre eso conmigo, porque pedirme que esté preparada, no podría soportarlo.

El camino hacia la casa de seguridad duro alrededor de una hora y media, me urgía llegar a casa para poder hablar con mi madre, la eche de menos. Al llegar no espere a Butel y salí corriendo hacía ella, quien platicaba animadamente con Brianna y Mónica, las tres al verme llegar y llorando no tardaron en preguntarme que sucedía.

-Qué pasa mi niña?, Todo está bien?.

-Dean está bien?!

-Todo está bien, él está bien. Pero siendo sincera no sé cuánto tiempo pase para que lo vuelva a ver.

Me abrace a mi madre con todas mis fuerzas y deje salir todo el llanto que se acumuló en mis ojos desde el primer día que lo vi.

-Como?, Que sucedió?.

Brianna parecía no entender, no procesaba nada.

-Brianna, él está bien, muy bien. Solo que las cosas van a tardar muchísimo más tiempo en solucionarse, al menos pasarán meses para que lo vuelva a ver, para que lo volvamos a ver.

El llanto la consumió por completo, tenía la esperanza de verme entrar con su hijo, cosa que no sucedió.
Monica reservo sus comentarios y lo único que hizo fue abrazarme, después de varios días tuvimos que decirle la verdad y pareció entenderlo y hasta el momento no vimos ningún cambio de conducta que nos preocupara.

Más tarde Butel se fue de la casa y nos dio órdenes estrictas de no salir de la planta alta, ni siquiera abrir las cortinas, no pasar por ninguna ventana y evitar que las demás personas de la casa nos vieran, Mónica ya no pudo salir de aquí, la encerraron junto con nosotras.

La noche cayó y cada una de nosotras fue a su cama, lo afortunado de la habitación en donde nos encontramos es su espacio, cabrían otras cinco camas sin ningún problema y aún así, tendríamos espacio para jugar golf.
Mi estado de ánimo desde que llegué se hizo añicos, ni siquiera pude probar alimento, me sentía sumamente mal, por lo que dormir desde temprano fue mi mejor opción y todas estuvieron de acuerdo.

*
El sol entro directo por las ventanas, a pesar del color de las cortinas, su luz iluminaba perfectamente la habítacion, me levanté de la cama y fui directo al baño para lavar mis dientes y hacer mis necesidades. Al regresar mi celular tenía varios mensajes de Dominick.

*CHAT CON DOMINICK*.

-Muñeca tengo que cambiar de lugar, al parecer me localizaron, estaré unos semanas incomunicado contigo, pero no te preocupes, seguiré cuidando de Dean. Cuídate por favor, todo saldrá bien.

Cómo lo hablamos desde el principio le regrese la llamada y pasados tres tonos le colgué, con eso él sabría que vi su mensaje.
Al salir de la habitación me senté frente las cortinas, sin abrirlas en su totalidad deje que el sol hiciera su trabajo y calentará un poco mi piel durante el resto del día hasta que la oscuridad se hizo presente.

*

Mis rutinas eran las mismas desde hace doce días, despertaba temprano, me daba una ducha y me sentaba frente al balcón a contemplar el día, el atardecer y parte de la noche para volver a dormir y así consecutivamente, mi madre como Brianna y Mónica quisieron distraerme con diferentes actividades entre nosotras pero nada funcionaba así que solo me dejaban sola e iban al cuarto de a un lado a ver la tele o leer algún libro.
No tenían noticias de nadie, ni de Dean ni de Dominick eso comenzaba a preocuparme, pero si las cosas fueran distintas de alguna manera ya nos abríamos enterado si les sucedió algo.

Al dar las diez de la noche me arrastre con demasiada pereza a mi cama y me acurruque en ella, no hacía nada durante el día, pero me cansaba como si hubiera corrido un maratón y en parte lo agradecía, dormía placenteramente.

Mónica.

Pase tantos días dentro de esta casa, ganándome la confianza de todos que al final ya no pude volver a salir de aquí. Rossalie depósito toda su confianza en mi y aunque yo trataba de hacer lo mismo con ella el miedo de que Thomas les hiciera algo a mis padres me terminaba de cerrar la boca justo antes de poder decirle la verdad.

Siempre había sospechado sobre la vida que llevaba Dean, sus problemas y la forma que Brianna y él desaparecian y ahora todo tenía muchísimo más sentido, líder de la mafia y el hombre más envidiado de todos.
Rossalie se ganó mi afectó y cariño, aunque la culpa me carcomia segundo tras segundo, Thomas no tarda en llegar para cumplir su palabra y aunque todo lo pudo haber echo desde un principio ya que tenía su localización, me utilizo como peón para averiguar todo sobre está casa, la seguridad, entradas y salidas.

Lo único que quería era acabar con esto, pero el miedo a los consecuencias sobre mi apellido me dejaba helada pero finalmente sabía lo iba a suceder cumpliera o no con su plan. Así que me arme de valor y me acerque a Rossalie quién estaba tomando el sol como siempre cerca de la ventana.

-Rossalie puedo hablar contigo.- Volteo su rostro y se acercó a la cama para hacerme sentar con ella.- Es urgente.

-Qué pasa?, Estás bien?.

-Tenemos que irnos de aquí, enseguida.

-De que hablas?, Que pasa?.

-Thomas quiere hacerle pagar a Dean todo el daño que le hizo y justo ahora viene para acá para llevarte con él, tenemos que irnos, avísale a todos.

-Thomas?, Mónica de que hablas?!.

-Rossalie tienes que creerme, tenemos que irnos, deja todo, avísale a tu madre a Brianna, tenemos que dejar la casa cuánto antes.

-Alista una mochila con tus cosas.

Rossalie fue por su madre, Brianna e Ivo que aún sin entender las cosas guardaron de prisa varias pertenencias y ropa en sus mochilas para irnos.
A lo lejos pude ver cómo Rossalie guardo el brazalete que Thomas le obsequio y me acerque arrebatarselo.

-Esto es un localizador, por esta cosa Thomas te encontró desde que dejaste París, porque razón crees que yo aparecí en la casa de a lado como si nada?.

Lo deje en su mesa de noche y con mucha cautela bajamos hacia el sótano, Ivo no podía dejarnos, no podía dejar a Rossalie sola, así que él se encargo de distraer a cualquier persona que se cruzara en nuestro camino para evitar que nos vieran.

Al llegar a la salida del sótano, tuvimos que caminar alrededor de diez minutos para llegar al túnel que daba hacia el otro lado de la carretera y de ahí comenzar a correr para encontrar refugio.





Paris In The RainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora