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Rossalie.

Intente correr más rápido, pero mis piernas ya no respondieron y caí de rodillas sobre varias ramas, intente callar mi quejido pero fue en vano. Mónica parecía haberse olvidado de mi, ella siguió corriendo, se fue.

Me puse de pie e intente caminar detrás de un árbol, ponerme a salvo el mayor tiempo posible, pero justo antes de poder llegar, las luces de las linternas fueron más intensas y las voces se escuchaban más cerca, quise correr de nuevo pero un hombre me tomo por el cabello y me arrastró con él.

-A donde ibas muñeca?, Te están esperando.

No puse resistencia, en algún momento esto iba a pasar. Camine delante de él varios minutos hasta llegar a un pequeño camino de terracería, justo ahí estaban las camionetas y Thomas, desde un principio me negué a creerlo, pero Mónica no me mintió.

-Acercate Rossalie, tengo planes maravillosos para ti.

-Porqué estás haciendo todo esto Thomas?

-El hombre que tienes como novio es un hijo de puta y siempre me ha quitado todo, a veces está bien pagarles con la misma moneda.

Intente decir algo más cuando uno de sus hombres me cubrió la nariz con un pañuelo húmedo y mi cabeza comenzó a dar vueltas.

*

La tranquilidad del lugar hizo que mis sentidos se pusieran alertas, pero mientras más intentaba abrir mis ojos, menos podía. Hasta que recordé la forma en la que terminó la noche y desperté de golpe, mi cabeza pesaba y parecía que todo daba vueltas, con mucho cuidado me levanté de la cama y me acerque a la ventana, no se alcanzaba a ver nada a kilómetros, parecía estar en una zona desierta.

La puerta de pronto se abrió y apareció Thomas con una bandeja llena de comida, hipócrita.

-Veo que estás despierta, te traje de algo de comer.

-Qué estás haciendo Thomas? A dónde quieres llegar con todo esto?

-No entiendes mis motivos ni mis razones, solo será una lección, después podrás estar con él. Así que más te vale cooperar.

-Y si no quiero hacerlo?!.- Me pare delante de él y avente la charola de comida, estaba harta de tener miedo.- No obtendrás nada de mi.

Thomas alzo su mano y me dio una fuerte bofetada, mi mejilla ardía y mi cabeza dio más de mil vueltas en un segundo.

-Te recomiendo que no vuelvas hacer eso, si no quieres terminar peor. Ahora comete lo que te traje porque no hay más comida.

Salió de la habitación y me dejó con miles de dudas en mi cabeza, como pudo cambiar su actitud?, Cómo no me dí cuenta de sus intenciones.

Dean.

Las horas corrieron y no tenía respuesta de nadie, mis ganas de mantener la calma se estaban esfumando y con ellas el trato con el consejo. La botella de Bourbon que tenía justo enfrente de mi, se vaciaba más y más hasta que mi celular sonó.

*LLAMADA TELEFÓNICA*

-No encontraron a Rossalie, no sabemos por parte de quien va este ataque. Tu madre y Carolina están con nosotros, Ivo y Mónica están bien.

-Qué hace Mónica con ellos?.- En qué momento esa arpía se fue a meter a la casa de seguridad?.- Traelos enseguida.

*FIN DE LA LLAMADA*.

Marqué el número directo para la comunicación con el consejo.

*LLAMADA TELEFÓNICA*

-Cambiaste de opinión?

Paris In The RainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora