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Rossalie.

Después de un largo tiempo, el capitán anuncio que podíamos salir de nuestros asientos, las turbulencias ya habían cesado y  definitivamente me perdí en el sueño por lo que no sentí nada.

La mayoría de la gente seguía dormida, mientras que unos ya estaban comiendo. Fui al tocador mas cercano a lavarme la cara para poder desabilarme un poco ya que aún faltaban unas cuantas horas para llegar a París.

 Al llegar a mi asiento, mi compañero de viaje estaba en su lugar. Pasaron varios minutos hasta que me di cuenta que me veía, no me incomodo su mirada, pero si me intimido.

-Y bien tu eres Rossalie?.
Me sorprendió mucho que supiera mi nombre pues nunca antes nos habíamos visto.

-Si, Rossalie Henderson, mucho gusto y tu?.- Le tendí la mano y la acepto-

-Mucho gusto soy Thomas Peech. Me entere que vas a PARIS FASHION.

-Mucha información para tan poco tiempo, no crees?.

-Si, disculpa, estoy en la parte de diseño gráfico y me informaron que habría un nueva modelo, me mostraron varias fotos y es imposible no reconocerte.

-Nueva modelo?.
Me pareció raro, pues aun no ponía un pie en la empresa y ya era modelo?!

-Pero no pensé que me fueran a colocar tan rápido y como modelo!

-Les gusto mucho tu trabajo, tus fotos. Eres perfecta para cada uno de los proyectos.

-Gracias.

-Solo no menciones que ya lo sabes.

Thomas me dedico una sonrisa, no fue una charla en la que nos tuviéramos bastante confianza pero me agrado.

Decidí ver a través de la ventana y contemple que la vista era un espectacúlo, parte del océano estaba debajo, parte de islas y países deslumbraban mis ojos.
Tenía la seguridad que sería un año difícil, con pruebas y problemas, pero no había nada que me motivará más, que mis padres.

Estuve conversando un buen rato con Thomas, menciono que el  presidente de la empresa, Dean Gallagher es un hombre bastante complicado.
Brianna por otro lado, casi no esta en la empresa, ya que tiene otros negocios.

Menciono que, en una ocasión la  tela era insuficiente para realizar todas las prendas de la temporada y cuando por fin llego el pedido, Dean no autorizo el uso de la tela, y se quedaron sin campaña durante otoño.

Después de varias horas de platicar, el capitán aviso que estábamos próximos aterrizar, indicó que abrocháramos nuestros cinturones y esperarámos las indicaciones.
El aterrizaje fue un poco dificil, la lluvia lo complico bastante y las turbulencias fueron muy frecuentes.
Cuando bajamos del avión, me arrepentí por completo. No paso por mi cabeza el hecho de que el clima sería totalmente diferente, pues mi cuerpo comenzo  titiritear de frío.

Thomas sin previo aviso y siendo todo un caballero, colocó su chamarra sobre mis hombros.

-Gracias Thomas.

-No es nada, acostumbrate a cargar con suficiente ropa que te abrigue, el invierno suele ser muy crudo.

-Lo tendré en mente.

-Cuando puedas aprovecha los recursos que te dará la empresa y compra todo lo que te haga falta.

-Ahora que estoy palpando el frío, sin duda lo haré.

Ambos soltamos un pequeña risa y tomamos lugar cerca de la banda, para poder tomar nuestas pertenencias.

Por un momento me vi abrumada, pues no dejo de quejarse de Dean, lo que me hizo pensar dos grandes cosas.
1. Tiene algún tipo de historia
2. Ambos sobrepasaron los limités.

Después de unos largos y eternos minutos, logramos encontrar nuestras maletas. Me explico lo que tenía que hacer y a donde tenía que dirigime, él vive en el mismo edificio en el que ahora yo esidiría pero su destino no era el mismo.
Me indico la dirección y ruta correcta para luego brindare su número de celular, para comunicarme con él cuando fuera necesario.

Aborde el taxi poco minuos después de habernos despedido y desde que salió del aeropuerto, no deje de fascinarme con la vista. Era todo tan bonito y tan romántico, que desee en el alma que mis padres estuvieran conmigo para disfrutarlo.

celular
"Hola, acabo de llegar a París, voy rumbo a mi departamento, espero se encuentren bien. Los amo demasiado y los extraño, más tarde cuando salga de la empresa les marco, los amo, besos".

El taxi se detuvo frente a un edificio demasiado grande, color blanco con cristales color tornasol.
Al entrar, una chica de cabello negro hasta los hombros, con lentes se acercó a mi.

-Rossalie Henderson, un gusto, soy Miranda, Secretaría de Dean, me pidió que esperara por ti.

-Hola miranda, gracias por la bienvenida.

Ella avanzó hacia el elevador y yo detrás, unos chicos uniformados de rojo se acercarón a nosotras para poder llevar mi equipaje.

-Dean me pidió que te entregara las llaves de tu departamento y que te hablara un poco sobre tu cargo en la empresa. Formaras parte del area de diseño grafico y me parece que por única ocasión el area de modelaje.- La chica salio del elevador y camino hasta la puerta de un departamento.- Este es tu nuevo hogar, aquí están las llaves. Bienvenida Rossalie.

-Gracias Miranda.

-Ahora, esperare por ti en recepción. Para que puedas ponerte un poco de ropa más abrigadora y podamos ir a la empresa.

-Prometo no tardar.

-Tomate tú tiempo Ross, estaré abajo.

Se marcho por el mismo sitio en el que llegamos y me dejó completamente sola, estaba nerviosa. Esto realmente comenzaba a parecer irreal.
Antes de seguir pensando y llenarme de ideas, tuve el valor de abrir la cerradura y conocer mi nuevo hogar.

Paris In The RainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora