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Deja de hacerte el ingenuo Velasco, sabes bien que venimos por el muchacho— se pasó Ron al frente, junto a Israel.

¿Muchacho? ah espera, ¿Hablas del chico humano que sabe de nuestra existencia, aunque esto sea un delito? ¿De ese me hablas? —preguntó irónico sonriendo y actuando como si se hubiera acordado.

Damon, Caín, Abel y Axel jamás habían conocido a Velasco en persona, pero los cuatro concordaban en algo, era una persona repulsiva y daba algo de miedo.

Deja de hacerte el estúpido, regrésanos a Silver— se quejó Axel levantando mucho el tono de voz.

Qué joven tan mal educado, no deberías hablarles así a tus mayores, jovencito— le dijo Velasco divertido, Axel solo frunció el ceño y apretó los dientes para no ir a golpearlo.

Sabemos que el niño está aquí, ¿Qué quieres a cambio de su libertad? —preguntó Israel ya fastidiado de la actitud de Velasco, el cual solo miró interesado en la propuesta de Israel.

Vaya, ¿Qué quiero a cambio del mortal?, ¿Qué podría pedir?, cuántas opciones, veamos, quiero al chico grosero de ahí— decía refiriéndose obviamente a Axel.

Estás idiota— le dijo Israel enojado.

Axel se sorprendió al oír aquello, él a cambio de Silver.

Buscabas tener a Axel ¿No es así?, pero ¿Por qué? —dijo Caín confundido de la situación.

No es importante que sepan mis razones, pero solo diré, que me intriga, ya sé su secretito, solo es mitad inmortal ¿No?, lo quiero solo por un tiempo, después lo soltaré, suena justo, la libertad del mortal a cambio de un tiempo con el medio inmortal— decía cruzando sus brazos sonriendo ante lo que ocurría.

¿Cuánto es un tiempo? —preguntó Damon no muy confiado del hombre.

No lo sé, un mes o dos, veré— dijo mirando la expresión de negación total de Israel y de incredibilidad de Ron.

Pero por supuesto que no— se negó Israel.

Bien— aceptó Axel, a lo que se llevó las miradas de sorpresa de todos—puedes llevarme donde quieras, pero deja ir a Silver.

¡AXEL! —le reclamó su padre.

Definitivamente eres estúpido— agregó Damon inexpresivo como siempre.

¿Cómo aceptas algo así? —preguntó Abel incrédulo.

Definitivamente algo anda mal— opinó Caín.

Buscaré la manera de escapar, de todas formas, lo que sea que quiera podré aguantarlo, pero Silver no resistirá mucho aquí, él debe irse— decía Axel algo temeroso, pues cientos de posibilidades que le pasarían vino a su cabeza, pero lo haría de cualquier modo.

Damon lo miró por un momento, a pesar de decirle estúpido, no tenía derecho a juzgar sus acciones, pues él hubiese hecho lo mismo.

Israel trató de detener a Axel, pero le fue imposible, por lo que tuvieron que agarrarlo Merlín y Jared, y Ron no pudo ver como su nieto caminaba donde Velasco.

Vendremos por ti— dijo Abel al aire, Axel se giró a mirar a sus hermanos y a su primo, les sonrió y se fue con Velasco.

Damon le dio un ligero golpe a la parte de atrás de la cabeza de Israel para dormirlo, pues estaba histérico y trataba de zafarse del agarre de sus hermanos, cosa que casi logra.

¿Dónde está Silver? —le preguntó Abel a Velasco quien regresó después de guiar a Axel con otro hombre y este se lo llevase.

El mortal fue liberado hace unos minutos, debe estar en una casa cerca de donde vivía, ahí ya no hay inmortales destruyendo nada, así que está a salvo, pero si desconfían pueden ir a ver— dijo y Olivia le entregó un papel a Abel con la dirección.

Iremos, pero si no está, queremos a Axel de vuelta— amenazó Caín saliendo con los demás de su familia.

Por supuesto, yo siempre cumplo mis promesas— dijo Velasco viendo como la familia se iba.

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·   . *

Silver abrió sus azulados ojos, se encontraba dormido en su cama, la luz del sol golpeaba su rostro, estaba cálida.

Tomó una ducha pues tenía la sensación que no se había bañado, y sintió su cabello asqueroso, aunque por alguna razón le dolían sus muñecas.

Salía de la ducha con un suéter ancho de color blanco y unos pantaloncillos de militar, escuchó que alguien tocó la puerta.

¿Quién será? No espero visita— dijo caminando a la puerta y abriéndola, se encontró con una mirada oscura acompañada de otras dos.

¡Silver! Qué bueno, sí estás bien — dijo Abel abriendo más la puerta.

Al menos Velasco cumplió su parte— agregó Caín.

Los tres mayores miraron al menor, quien se veía confundido y algo asustado en realidad.

¿Qué pasa? Pensé que estarías feliz de vernos— dijo Abel al mirar como los veía el menor.

¿Los conozco? —preguntó el menor sin más, algo desconcertado.

¿Qué? Jajaja Silver, que buena broma, pero... —antes que Abel hablara Caín le interrumpió.

Las bromas son divertidas, y esta no lo es, no es momento de tonterías —dijo Caín.

Silver los veía más extrañado aún.

No creo que sea una broma— agregó Damon.

Vamos Silver, somos Abel, y Caín— decía el castaño esperando una respuesta por parte del menor quien solo lo veía confundido.

¿Abel y Caín? ¿Cómo los de la biblia? —decía el joven mirándolos extrañado.

Pues, ¿Sí? Pero más geniales —decía Abel para ver si el menor al menos recordaba su sentido del humor.

Lo siento, no tengo la menor idea de quienes son —dijo Silver queriendo cerrar la puerta, pero siendo impedido por el pie de Caín.

No tan rápido— le dijo el mayor cruzado de brazos.

¿Recuerdas a Axel? —le preguntó esta vez Damon.

¿Axel? —decía el chico igual de confundido que antes.

Sí, Axel, tu mejor amigo desde no sé, ¿Secundaria? —dijo Abel algo desesperado.

¿Mi mejor amigo? Creo que me están confundiendo, yo no tengo amigos— dijo esperando a que los tres se fueran.

Nosotros vamos a la universidad atrás de tu escuela— dijo Caín esperando una respuesta.

He estado en la misma preparatoria desde que entré, pero no recuerdo haberlos visto nunca— decía el chico tratando de acordarse.

Esto es malo, ¿Qué te hizo Velasco? Al menos ¿Recuerdas qué somos? O sobre los inmortales— cuestionó Abel.

¿De qué están hablando? Me asustan— decía el chico haciéndose un poco atrás.

Déjalo Abel, creo que sí lo confundimos con alguien más, sentimos las molestias, vámonos— decía Caín jalando a un confundido Abel mientras Damon solo miró al castaño un momento y siguió a los dos mayores.

¿Qué mierda te pasa? —preguntó Abel.

Escucha, es obvio que algo pasó en el palacio del sur, algo le hicieron a Silver, es inútil forzarlo, no nos recuerda, tenemos que consultarlo con papá— dijo Caín jalándolo para que se subiera al coche negro.

La Enfermedad Llamada Amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora