Una Puta Carta

929 80 9
                                    







POV ALBA




Abracé con más fuerza mis rodillas haciéndome aún más pequeña en aquella habitación que nunca antes me había parecido tan gigantesca.

Lloré, grité, sollocé e hice todo lo que pensé que me serviría para bajar el nivel de anciedad que tenía, pero cuando nada pareció funcionar, opte por hacerme una pequeña bolita en la cama mientras mis manos aún temblaban sosteniendo el trozo de papel blanquecino y mis dedos repasaban una y otra vez las letras que ahora se veían afectadas por la persistencia con que la yema de mis dedos pasaban por ellas. 

una carta.

una puta carta era lo único que había encontrado nada más despertarme. 

Una puta carta fue lo que considero que me merecía para despedirse de mi e irse con la intención de nunca más volver. 

No me había dado la oportunidad de despedirme, de mirarla la última vez, de escuchar su voz, de besarla… 

Apreté mi mano en un puño mientras impactaba en el cabecero de la cama. Dolió, un corrientazo invadió mis nudillos expandiéndose por toda mi muñeca, una fuerte punzada retumbó por toda mi cabeza gracias al sonido insistente de mi móvil en el suelo dónde hacía una horas atrás había impactado, mi estómago rugió reclamando un poco de alimento, y mis ojos ardieron por tantas lágrimas derramadas.

Pero todo aquello, todo junto a la vez, no se podría con el dolor que sentía mi corazón. Era algo extraño que nunca en mi vida había sentido, un vacío, un ardor, una presión… No sabía ni como coño definirlo, solo sabía que dolía como el demonio. 

Volví a mirar aquellas letras que formaban palabras que nunca pensé leer, y mucho menos que vinieran de su parte, aquellas letras que ya casi me sabía de memoria… 

lo siento…

Sabes que no me gusta utilizar mucho esa palabra porque eso significa que la he cagado o que quizás estoy causando algún tipo de daño pero… Nunca en mi vida había dicho está palabra sintiéndola tanto.

Se que estás confundida y que todo esto te toma por sopresa, no sé como explicártelo y nada de lo que diga te hará sentir mejor o te hará comprender la situación pero… Me voy.

No sé si algún día volveré, no sé que pasará conmigo, no sé si aprenderé a vivir sin ti y sin mi corazón, pero eso es en lo último que tienes que pensar. A partir de ahora quiero que solo te preocupes por ti, que te enfoques en ti, en tu trabajo y en volver a rehacer tu vida.

Quizás esto compense un poco todo lo que probablemente estés sintiendo… Estás fuera de peligro, ahora no te tienes que preocupar si un psicópata está detrás de ti y de tu familia, podrás volver a tu vida normal y seguir con tu trabajo sin preocupaciones. Eres libre.

Cuídame mucho a tus padres, a mini y a Queen y por supuesto, cuídate tú mi vida.

Nunca pensé que diría estás palabras y creeme que me rompe el alma despedirme de ti por medio de un papel pero no hubiese sido capaz de irme después de haberte mirado a los ojos, quiero que sepas que está decisión no fue un arrebato loco o que todo fue de imprevisto, lo llevo pensando unos días atrás y aunque ahora no lo entiendas creo que es la mejor decisión que he tomado.

Perdóname por no estar a la altura y corresponderte como te mereces, perdóname por decepcionarte, por acabar con todos los planes que teníamos, por dejarte sola cuando prometí nunca hacerlo… Perdóname por todo lo que pienses que debería pedirte perdón.

cuidare de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora