Capitulo 12.

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— Creo que absolutamente todo el mundo quedó encantado con la publicidad de la marca. — dijo feliz la mujer mayor. — Quiero que todos brindemos por el éxito de este proyecto. Pero nada de esto hubiera sido posible sin nuestras estrellas. — señaló a Minho y a Narah que estaban sentados frente a ella. — Hay que hacer un brindis. — se levantó con un poco de dificultad. — Por las estrellas que salvaron la temporada.

Todos alzaron sus vasos con alcohol, excepto Narah que no había aceptado nada de ellos.

— Hicieron un gran trabajo todos los modelos. — habló otro de los encargados de la publicidad. — Su imagen joven y atractiva a capturado la atención de todos. Pero las imágenes que han causado más impacto han sido las de Min Narah y Lee Minho, las prendas que ellos usaron han sido las primeras en agotarse.

— Les agradezco mucho por habernos tomado en cuenta para este proyecto. Ha sido todo un éxito pero no podemos llevarnos todo el crédito, detrás de toda esta gran publicidad hay todo un equipo que hizo un gran trabajo. — Habló Minho de forma amable.

— Estos niños son un encanto. — la jefa les sonrió. — Hay que hacer otro brindis, pero antes de eso denle un trago a Narah que ha tenido una cara de amargada toda la noche.

No mentía, Narah no había querido ir ese día pero Minho la convenció, creyó que sería buena idea celebrar pero para ella era pura apariencia. Nadie ahí le agradaba ni se agradaban entre ellos.

— Min Narah aún es menor de edad.
Además, no queremos embriagar a la hija del productor Min, seguramente nos mataría.

— Si es solo un trago no le hará daño, los demás chicos de su edad también están bebiendo. — la jefa tomó una cerveza y la dejó frente Narah.

— No, gracias. — la hizo a un lado. — No me gusta beber, mejor tómela usted que entre las dos quien tiene la cara de amargada es usted, no yo. — todos se quedaron asombrados al oír eso. Nadie se atreveria a faltarle al respeto a su superior de esa manera. — ¿Qué les sorprende a todos? Si está siendo bondadosa y actuando de forma divertida es porque esta ebria, usualmente quien es una amargada es ella, nadie la tolera estando sobria porque es una mandona e intolerante. A mi me trata bien por mi familia pero a las demás personas las trata muy mal. — Los demás no la iban a contradecir, era cierto, si en esos momentos ella había prometido pagar todo era por su presencia. Min Narah siempre tenía privilegios por ser quien era. —

— ¿Cómo es que me dices esto? He sido amable contigo. No puedes reprocharme por cosas que hago con los demás.

— Esto es molesto porque es amable conmigo solo porque le gusta mi padre. Usted intenta coquetear con él todo el tiempo, es una descarada. — uno de los asistentes se río de ello y su jefa sólo lo miró mal, no sabía que decir en su defensa. — Usted no se ría. — lo señaló Narah. — ¿Cree que no lo he visto haciendo lo mismo con la esposa del fotógrafo Kim?

— ¿Usted está coqueteando con mi esposa? — se levantó muy enfadado el fotógrafo.

— Y no he acabado, creo que hay muchas cosas que tengo que decir. —

Los seis jóvenes que habían sido modelos salieron corriendo del lugar. La mayoría de los adultos habían terminado peleando entre sí y no querían involucrarse en esa pelea.

— Min Narah, eres increíble. He trabajado por años con esas personas y nunca tuve el valor de decirles todas sus verdades. — dijo una de las chicas riendo. Tenía la misma edad que Narah y se llamaba Somi.

— ¿No crees que te despidan por haber hecho eso? — pregunto otra modelo.

— Acabo de revelar  sus secretos frente a varias personas, no les conviene despedirme. Ademas, no es mentira que la jefa coquetea con mi papá. Es desagrable ver eso. — hizo una mueca de asco. — Como sea, me voy. Quiero llegar cuanto antes a... — No, no quería ir a casa, no sabía a donde ir. — a cualquier parte en la que pueda descansar.

Antes De Que El Show Acabe [TXT] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora