Era el fin.
“15 de septiembre de 2009”
Esa sería la fecha que aparecería en su lápida.
Victoria lo sabía bien, había extraviado el camino y, en alta montaña, eso era mortal.
Separarse de su grupo en el medio de una sorpresiva tormenta de nieve ya hacía cinco horas fue lo peor que podía sucederle.
O tal vez no era lo peor.
“Las madres se equivocan cuando van en contra de la voluntad de sus hijos, ya que igual ellos, al crecer, hacen lo que quieren sin su permiso.”
Tantas veces había pensado aquello.
A diferencia de otras madres, la suya siempre la había escuchado y apoyado.
“La vida es corta, tenés que hacer lo que te gusta Vicky.”
Intentó seguir andando hasta que sus pies ya no le respondieron y simplemente se echó para morir. Cerró los ojos y permaneció quieta, pero muy quieta, mientras la nieve la cubría como una mortaja helada.
“Si lo que querés es escalar, ¡hacelo mi amor!”
“La vida es una sola hija.”
Tal vez, su madre se había equivocado en eso.
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El enlazador de mundos ®
Science Fiction“Bienaventurado el que lee, y los que escuchan las palabras de esta profecía, y los que observan las cosas en ella escritas, pues el tiempo está próximo.” ...
