CHAPTER 51

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Han pasado dos meses y medio, es 26 de Febrero, mi cumpleaños, supere el miedo a la manada, pero no puedo soportar a Paul cerca, así que no podía establecer una conversación, ni siquiera lo podía tener frente a mí, el lloraba suplicándome acercamiento, pero solo lograba hacerme sentir nerviosa. Pero ahora solo es un poco de nerviosismo, me ha costado bastante alejar mi miedo.

La tribu quería que mi cumpleaños se festejara dentro de la reserva, así que me alisté, salí de casa y me dirigí a la reserva, al llegar estaban las cabañas adornadas por fuera, los chicos estaban jugando futbol, mientras Sam partía leña para la lumbrada en la noche, Paul estaba junto a Paulo y Paolo cocinando la carne, me dirigí a la gran cocina de Emily, donde se encontraba ella, mi madre, mi padre, mis hermanas, Seth y mi pequeño hermano, quien ya caminaba por si solo.

Carolina: Feliz cumpleaños mi amor. –Me dijo dándome un abrazo-

Ethan: Hablo en serio, ¿La vida podría regresarme a mi TN chiquita?

TN: No hagas dramas papá, solo he cumplido 23 años.

Sam: Demasiados para empezar a envejecer.

TN: Gracias Sam, -Le sonreí sarcásticamente mientras recibía un abrazo de su parte-

Jacob: Feliz cumpleaños enana. –Entro corriendo elevándome por el aire para después darme un abrazo-

Así transcurrió el día, abrazos por parte de todos, escuchar las mañanitas en español e inglés, me dieron regalos pequeños que constaban de pulseras y collares hechos a mano, comimos carne asada, jugamos baloncesto y futbol, fuimos a dar un paseo a la Push y regresamos en la noche a escuchar las historias de la tribu.

Termino el día, Billy apagaba el fuego, yo ayude a mi madre a recoger todo lo que habían dejado regado los demás.

Carolina: Paul ha tratado de hablar contigo ¿Por qué no le das oportunidad? –Me dijo mientras colocaba un mechón detrás de mi oreja-

TN: Créeme que he tratado, pero el miedo me detiene...

Carolina: Paul no para de sentirse mal y se aguanta de llorar cuando escucha por boca de nosotros que le tienes miedo, está arrepentido.

TN: Iré a hablar con él, puedes decirle a papá y a Sam que estaré con él.

Paul: Puedo controlarme, solo, perdóname, por favor.

Mi instinto de voltear rápido y esconderme detrás de mi madre salió a flote, lo vi de pie ahora frente a mi madre, me impresiono un poco, mio mamá sabía que estaba ahí, lo estaba viendo y no me dijo nada, Paul estiraba sus brazos a mí, me acerque y los tome de a poco, empezando por sus manos, recorrí sus brazos y poco a poco me apegue a su pecho, hasta estar abrazándolo completamente, Paul, pacientemente espero y me rodeo suave y lentamente, hasta apretarme un poco más, aspire nuevamente su fragancia después de semanas, meses, volví a sentir su calor único.

Paul: Prometo trabajar más con mi temperamento, estoy en eso, Sam y tu padre me han ayudado demasiado.

Mi madre y los bracitos de mi hermano nos rodearon. El poco nerviosismo cerca de Paul se estaba esfumando poco a poco y bien, la boda está más que cerca, ahora me dirigía a casa, Jimin estaba en la puerta esperando, sonriente.

Jimin: Veo que vienes bastante contenta, espero que los miedos se hayan esfumado gracias a este día.

TN: Todo se ha arreglado y mi miedo se fue.

Jimin: Vamos, te tengo un regalo.

Jaló de mi mano adentrándonos a casa, todo estaba en luz tenue, con pétalos de rosas rojas, con globos grandes, de colores metálicos adornando el techo, Jimin me seguía a mi espalda visualice sus manos delante mío, las cuales soltaron una cadenita en color plata con una piedra en forma de corazón color rosegold, para después escuchar a gente gritar un "Feliz cumpleaños", al voltear la vista estaban los Cullen, incluyendo a Bella entre la multitud, soltando serpentinas de colores, papelitos de colores metálicos y confeti.

Recibí regalos por parte de ellos, que por experiencias decidí abrir a solas, Esme preparo comida coreana tradicional junto al clan olímpico y asiático, cantamos un poco, comimos y bebimos, solo aquellos que podían probar comida y yo.

Bella y yo dimos solo una semana para que pudiésemos realizar a boda, así que después de una plática muy extensa del tema, cada quien se fue a casa, quedándonos solo Jimin y yo, tome una ducha vistiéndome en el baño tranquilamente hasta que la puerta fue abierta repentinamente, provocando que me cubriera con la toalla nuevamente.

TN: J-jimin, ¿Qué haces? ¿Por qué no tocaste la puerta?

Jimin: Nos casaremos en una semana, ya te he visto desnuda, ¿Qué es lo que te preocupa?

TN: Nada, solo, a veces no estoy segura de mi misma, de mi figura.

Jimin: ¡Por dios TN! tienes una hermosa figura, en mis ojos eres aquella escultura hecha por los mismísimos dioses. –Me abrazo pegándome a su cuerpo quitando algunas gotas de agua que quedaban en mis hombros- No me ocultes tu cuerpo. –Negaba con su cabeza haciendo muecas graciosas-

Asentí con mi cabeza, así que me quite la toalla y termine de cambiarme en el cuarto, me acosté y sentí los brazos de Jimin rodear mi cuerpo para acomodarse y poder dormir.

ROYAL VAMPIREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora