Esposa Del Mafioso

33

-Hoy podré irme ¿verdad?- Pregunta desesperada.

- Si, pero preferiría que te quedaras más tiempo- Digo sosteniendo a Noah en mis brazos.

- No ya estamos bien- Dice acariciando su vientre, donde ya quitaron el monitor que tenía en el.

- Yo no creo lo mismo- Suspiro.

Noah está inquieto en mis brazos, quiere que lo baje pero no quiero que se lastime o algo. Mientras pueda cuidarlo lo haré.

- Tengo hambre- Se queja en toda la mañana solo te trajeron un plato con avena y gelatina.

- Prometo comprarte todo lo que quieras, si tu Doctora lo autoriza- Prometo, solo escucho que susurra algo pero no distingo que.

Unos toques en la puerta hacen que deje de prestarle atención a sus pequeñas quejas. La doctora entra con una enfermera al lado de ella.

- Bueno Señora Black al parecer todo está mucho mejor ya, así que le daré de alta, pero también le daré unas pequeñas indicaciones si queremos que esos bebés permanezcan hay adentro hasta los 8 meses y si logramos los 9 será mucho mejor- Dice viéndonos con una pequeña sonrisa.

- bueno lo principal nada de estrés o emociones fuertes, guarde todo el reposo que pueda, su alimentación debe de ser balanceada ya que también esta lactando y por último nada de relaciones sexuales en estos últimos meses de embarazo- Espera ¿que?

- Me está jodiendo con eso que dijo de ultimo ¿verdad?- Pregunto incrédulo.

- André.... - Me regaña Dacota avergonzada.

La doctora solo nos sonríe amablemente, es ¿enserio? No podré tocar a mi mujer en todo este tiempo ¡Joder! La enfermera un poco nerviosa comienza a quitar unos cuantos aparatos que tenía conectado Dacota, una vez listo es la primera  en salir a lo que la doctora suelta una pequeña carcajada.

- Discúlpenla creo que sabe quiénes son ustedes y por eso estaba un poco nerviosa por su vida- ¿Acaso ella no?

- Nos entregará a la policía- Susurra preocupada Dacota viendo a la Doctora Soto que al parecer sabe también quiénes somos, sonrío ante eso.

- Claro que no amor, la doctora Soto no hará eso y también se encargara que su compañera tampoco lo haga- Digo viéndola amenazante entregándole a Noah.

Llevo mis manos a mi cintura levantado un poco mi chaqueta mostrando mi arma.

- Oh claro que no señores Black de mi boca no saldrá nada yo si aprecio mi vida y me encargaré de mi compañera- Ve nerviosa la parte que dejo ver de mi arma.

- Solo espero y cumpla no quiero matar a la Docora de mi esposa y tener que dejar su cuerpo en la puerta de la casa de su familia-  Sonrío de lado viendo como asiente nerviosa.

- Yo... me retiro los espero el próximo mes para su chequeo- Dice para salir a paso rápido de la habitación.

- ¿Le creíste?- Pregunta aún preocupada Dacota.

- Tranquila amor la tendré vigilada- Digo besando sus labios.

Pocos minutos después entra Marina para ayudar a tomar una pequeña ducha a Dacota, quien insistió en que no necesitaba ayuda pero aún así no la deje hacerlo sola. Noah ya tomo una ducha antes a causa de eso ahora se encuentra tomando una pequeña siesta.

Dacota sale ya lista del baño lleva ropa deportiva y un abrigo, su hermoso cabello lo lleva suelto por la ducha que acaba de tomar, ya esta todo listo para irnos a casa. Erick entra a la habitación con una silla de ruedas que pedí que trajera.

- Amor puedo ca...- No dejo que termine de hablar no me convencerá con nada.

- Es eso u otra semana aquí tu decides- Digo tomando a Noah en mis brazos.

Esta camina hacia la silla quien a regaña dientes se sienta en ella, sonrío triunfante si siempre gano. Mis hombres entran para llevar las pocas cosas hacia la camioneta, Erick lleva a Dacota y yo a Noah. Salimos al fin fuera del hospital donde ya se encuentran esperándonos.

Coloco a Noah en su asiento y ayudo a Dacota a subir, Marina se va en otra camioneta solo Erick va con nosotros, suspiro tranquilo una vez la camioneta se pone en marcha para nuestro hogar.