Justo al día siguiente de su separación con Levi, Dex entró con movimientos torpes a la oficina de Erwin. El rubio se dio cuenta de inmediato que algo no estaba bien, pero cuando le preguntó qué sucedía la menor dio una respuesta muy poco creíble.
Dex se sentó frente a él y, con toda la firmeza que le permitía su decadente estado emocional, le pidió al comandante que la transfiriera junto con su escuadrón a la base de Trost.
Incapaz de negarse a una petición de la castaña, Erwin organizó todo para que Dex tomara el mando de las tropas del Cuerpo de Exploración que estaban situadas en el distrito de la muralla Rose. Partió en menos de una semana, se fue de la capital antes del fin de año y recibió enero en la casa que su hermano había comprado.
La residencia de Trost tenía un muy buen tamaño, contaba con dos habitaciones pequeñas y una un poco más grande que servía como recamara principal. Tenía solo los muebles esenciales, pero eran suficientes para que la castaña pasara cómodamente los primeros meses del año.
Fue bien recibida en la sede de la Legión en Trost y aunque le habían asignado una habitación en el cuartel, había decidido volver cada noche a su casa. River y Maxine cenaban con ella de manera constante y la rubia la había ayudado a redecorar.
Había encontrado en River y Max un gran consuelo, conversaba con ellos hasta altas horas de la noche compartiendo tazas de té. Aquel par había pasado de ser solo sus subordinados a convertirse en amigos verdaderamente cercanos y mientras asimilaba su ruptura con Levi se dejó consolar por sus compañeros. Max acariciaba su cabello mientras River le daba consejos sobre cómo conseguir un nuevo novio.
Entre veladas divertidas con sus amigos y mucho trabajo como supervisora oficial de toda la Legión de Reconocimiento en Trost había conseguido dejar de lado el dolor de pecho que le causaba pensar en el azabache de ojos platinados. Los primeros meses habían sido lo más complicados de sobrellevar, lloraba con facilidad y constantemente se sentía nerviosa y con el corazón acelerado.
Algunas noches, solo podía dormir si se ponía un suéter azul que le pertenecía a Levi y que se había llevado a Trost entre su equipaje. Separarse del azabache le había parecido más difícil que su ruptura con Erwin, tal vez se debía a que el dolor de alejarse del comandante se veía opacado por la pérdida de Dillon.
Cuando la nieve comenzó a derretirse, Dex guardó el suéter en el fondo de un cajón e hizo un gran esfuerzo de dejar ahí también sus sentimientos.
Cuando llegó la primavera, la casa de Dex se había vuelto un hogar cálido. La castaña descubrió un nuevo pasatiempo en el cuidado de plantas y pronto su residencia estaba llena de macetas con hojas verdes y capullos. Casi cinco meses habían ayudado a la capitana a sentirse mejor y con el final de abril tan cerca Dex se encontraba revisando todos los reportes del mes.
— La fecha está mal. — señaló River.
— No, hoy es 26 de abril. — la capitana miró al calendario confirmando el día.
— Pero del 845, escribiste 844. — la confianza entre ellos le daba al castaño la libertada de hablarle de forma casual. Dex se frotó la frente mientras buscaba una hoja nueva.
— Tendré que hacerlo de nuevo. Creí que ya me había acostumbrado a escribir el nuevo año.
Dex estaba en su oficina y frente a su escritorio decorado con una pequeña maceta estaba River. Ambos estaban trabajando en el papeleo del mes. El joven Horvat se había vuelto la mano derecha de la capitana y la acompañaba siempre en trabajo de campo y en el papeleo. La castaña tuvo que desmentir un par de veces que River y ella era una pareja, era fácil para otros interpretarlo ya que el más alto tenía una actitud protectora hacia su capitana, pero su relación se limitaba a una amistad, amor fraternal y respeto.
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Una Probada de Humanidad
FanfictionDefinir la humanidad no es tan sencillo como parece. Levi, por ejemplo, la definiría como las manos suaves de su amada que estaban dispuestas a sanar cualquier herida sin distinción, llenas de empatía y comprensión. Erwin, la explicaría como aquell...