Jungkook
Desde ese día en la cafetería de Hoseok puedo respirar con alivio, mi mirada es algo más fuerte y por primera vez en mi vida, me siento orgulloso de mí mismo. Aun así... Desde lo ocurrido tengo una sensación incómoda en el estómago que no puedo ignorar del todo. En parte sé lo que es: curiosidad Porque esta me lleva carcomiendo desde hace ya casi una semana desde los sucesos, millones de preguntas asaltan mi mente y marean mi cabeza. ¿Por qué Felix estaba así? ¿Qué hacía allí? ¿Por qué me dijo eso? ¿Por qué no me pegó como siempre? ¿Por qué lloraba? ¿Por qué parecía tan destrozado? ¿Por qué aún sigue sin aparecer por la universidad?
A veces me paro a pensar y me la lástima el recuerdo de su rostro cansado y sus ojos brillantes en lágrimas. Por primera vez, se había dejado ver débil ante mí. Yo nunca le había hablado así a alguien, en parte tan borde como sincero. Me da pena recordar cómo se echaba a llorar con intensidad por mis palabras, en parte, tan hirientes como ciertas.
Pero no puedo arrepentirme, no cuando él mismo ha sido el que me ha hecho llorar así durante años. No se merece mi compasión, no cuando ha sido la principal persona que ha arruinado mi vida.
El primer día lo veía todo confuso, trataba de darle sentido a lo ocurrido, no encontrándolo del todo. Volví a la mesa como si nada hubiera pasado, me senté al lado de Taehyung, que pareció ser el único en percatarse de mi cambio de humor. Me preguntó en bajo por qué había tardado tanto y si me encontraba bien, ya que estaba pálido, y ¿cómo no estarlo? Si acababa de decirle al agresor de toda mi vida que lo odiaba y que por mucho que me pegara yo seguiría ahí, aguantando, cuando ni siquiera estaba seguro de eso. Mi respuesta había sido una sonrisa, algo rota, pero completamente sincera. Me desinflé en mi sitio, apoyando la cabeza en su hombro en un arrebato de valentía. Y aunque no quiero enamorarme, dejé que él me rodeara por la cintura con su brazo para apegarme más a él y con su mano libre, agarro la mía que temblaba levemente sobre mi muslo. Tal vez pudiendo sentir mi corazón latir en confusión y mi cabeza dando tumbos. Dejé de pensar en las consecuencias de su tacto y me aferré a él, a su aura tranquila y su calidez, que a pesar de ser solamente amistosa, al fin y al cabo era cariñosa. Yo tan solo necesitaba poder resguardarme en sus brazos protectores. Los mayores en la mesa nos habían mirado, algo sorprendidos por la repentina cercanía entre ambos pero con sonrisas cómplice en sus labios que tan solo me confundieron más.
Pasaron los días, últimamente era muy fácil que yo cayera en mis pensamientos sin respuesta y mi alegría de apagara en unos sentimientos neutros y difusos.
Entonces llegaba él, este peligrís que bien me entretenía para hacerme reír, que bien me sacaba conversación o se acurrucaba a mi lado en la cama por las noches, abrazándome en silencio y dejando caricias en mi espalda, susurrando palabras de consuelo y preguntas al aire de las cuales nunca obtenía respuesta. Me sonreía, de esa forma tan hermosa, solo a mí... Soy consciente de que cada vez caigo más por él, y aunque eso era precisamente lo que quería evitar, sólo él puede sacarme de mis pequeños ataques depresivos. Me hace sentir bien, y eso es suficiente para saber que no debo evitarlo, por mucho que después termine decepcionándome.
Él siempre está ahí, parece conocerme de toda la vida, me comprende, o trata de hacerlo, sin dudo consiguiéndolo. Me pregunta qué me pasa, por qué estoy así de sensible y qué puede hacer él para ayudarme. Nunca contesto, y a pesar de no entender qué pasa, él me sigue consolando igual. De ahí que mis sentimientos se estén solidificando peligrosamente rápido. Lo dejo ser, ya me da igual. De todas formas sé que soy demasiado débil para luchar contra lo que empieza a emerger de mi interior.
Dejando esto de lado, estos días mi soledad ha desaparecido, es otra llama más apagada, a pesar de las cenizas dejadas. Siempre estoy junto a Jimin y Taehyung, juntos muchas veces vamos a visitar a Seokjin a la enfermería mientras que otras nos encontramos a Namjoon en el patio de la universidad y mantenemos charlas triviales y agradables. Casi todas las tardes vamos a la cafetería de Hoseok, donde el camarero castaño se sienta con nosotros en la mesa y todos estudiamos o simplemente pasamos el rato. Incluso Yoongi se une siempre que puede y el horario de su trabajo se lo impide.

ESTÁS LEYENDO
Desde Mis Ojos (Kooktae)
FanfictionJungkook es un chico perdido en el laberinto de su propia vida, que sufre acoso y se siente solo. Él ya no es capaz de apreciar lo bonito de la vida, hasta que lo conoció a él. Taehyung es un chico risueño que ama disfrutar de las más insignificante...