C A P Í T U L O 39.IAN DEATH OR DE'ATH
Una diminuta sonrisa fue deslizándose por su cara y la observé a detalle. Su cabello castaño ahora estaba recogido y no suelto como otras veces, eran pocas veces las que la veía con el cabello despeinado y recogido en un rodete.
Sus ojos me miraron con curiosidad y, segundos después fue corriendo su vista a las cosas que llevaría, cuando notó la caja de condones la vergüenza me entró e intenté ocultarlos, sin embargo, ya era tarde porque hasta había visto la marca que eran.
—¿Qué haces a esta hora tan tarde comprando... —miré las bolsas de fritos en sus brazos y las botellas de refresco — chucherías?
—Vine con mi hermana —respondió, y señaló un punto detrás de ella, dirigí mis ojos hacia donde apuntaba y me encontré con su hermana que no se decidía en escoger galletas de chocolate o vainilla —. ¡Jeannisse
apresurate! Ya voy a pagar.Su hermana por fin se decidió por las galletas de chocolate y apresuró el paso cuando la muchacha encargada de la caja comenzó a pasar las cosas que llevaría Annabelle.
Jeannisse al verme me sonrió.
—Hola, Ian —saludó, y miró con curiosidad mi rostro —. Qué casualidad encontrarte aquí.
Sonreí y le di un asentimiento de cabeza.
—Hola, Jeannisse.
—Te acuerdas de mi nombre —afirmó, sorprendida.
Annabelle la miró con el ceño fruncido.
—Ian no es olvidadizo —dijo, y se entretuvo pagando lo que le correspondía. Después tomó las bolsas de plástico y yo volví a darle un sorbo al vaso térmico con café —. ¿De qué parte vienes?
Caminé a la salida detrás de ellas y al salir, el viento golpeó su cara, desordenando más su cabello. Nos detuvimos fuera de la entrada de la tienda, no sé por qué, tal vez para conversar un momento.
—De una fiesta —respondí, y me senté en la banqueta del estacionamiento, ella me miró dudando y le entregó unas chucherías a su hermana.
—¿Puedes esperarme en la camioneta un momento? —le preguntó.
Su hermana torció la boca y ladeó la cabeza no muy convencida.
—Vale... pero con una condición.
Annabelle rodó los ojos y asintió con la cabeza.
—Sí, puedes tomar mi celular y navegar todo lo que quieras.
Ella sonrió satisfecha y se alejó de nosotros después de volver a sonreírme genuinamente.
Entonces Annabelle se aclaró la garganta y se sentó a mi lado unos momentos después.
Lamí mis labios y dejé el vaso de café a mi lado sobre el concreto limpio de la banqueta, y de la bolsa de plástico que cargaba saqué un paquete de frituras.
—Y por lo que veo en tu rostro deduzco que te peleaste con alguien —dijo, abriendo la botella de refresco sabor manzana.
Hice una mueca, sin saber muy bien qué respuesta darle.
—Sí, bueno... —metí una porción de frituras a mi boca y me encogí de hombros —. El tipo que dañó mi auto también estaba en esa fiesta.
Se quedó mirándome con amenaza en los ojos, cosa que no pude soportar y desvié la mirada clavándola en algún punto imaginario mientras masticaba.
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Quiero Odiarte ✔️
RomanceIan Death or De'ath ha tenido una vida llena de dificultades y problemas. Y Danielle Sttraford ha tenido su vida y su futuro en bandeja de oro. Un día Ian se ve metido en problemas por causa de su primo, y las circunstancias hacen que requiera ayuda...