De tal palo, tal astilla.

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Capítulo 533

"Así que es eso lo que realmente piensas. Si realmente fue tan buena, ¿por qué la traicionaste y elegiste estar conmigo en primer lugar? Tal vez la verdad es que no la querías tanto como piensas", Yasmina decía, burlándose de sí misma. Sin embargo en el corazón de NamSoo, ¿no le llegaba ni a los talones a Grace? Pero al menos durante todos estos años, fue ella quien estuvo con él, no Grace.

"Yasmina, estás buscando problemas. Nunca me hubiera fijado en ti si no me hubieras seducido", respondía NamSoo con frialdad. Su traición hacía Grace era una herida que nunca había querido volver a abrir. Tal vez era como lo que acababa de decir: en realidad no la amaba tanto como pensaba, de lo contrario no se habría dejado deslumbrar por los trucos de Yasmina y no habría sido infiel.

"Tú...". Ella lo amaba, pero no era correspondida, esa era la pena más grande de cualquier mujer y esa era la historia de Yasmina Aún tan lastimada como se encontraba, NamSoo agregó palabras todavía más crueles. Y su corazón ahora estaba roto en mil pedazos.

"Papá, ¿cómo puedes decir eso? No importa lo que haya hecho en el pasado, te ha amado con todo su corazón y su alma durante todos estos años". WoonBin abrazaba a Yasmina fuertemente, con los ojos llenos de resentimiento hacia NamSoo.

"¿Con todo su corazón y su alma? No lo creo", decía en tono de burla. Le lanzó una mirada furiosa a Yasmina, para luego salir de la habitación decididamente, como si le fuera posible abandonarla para siempre sin el menor remordimiento. En ese momento, no había ningún tipo de afecto entre ellos dos.

"Mamá, ¿estás bien?", WoonBin le preguntaba con tono cariñoso después de acompañarla a su cama. Ahora comprendía que su lugar en la familia se encontraba en riesgo, igual que el de su madre.

"Estoy bien, solo déjame estar sola. Necesito algo de tiempo para mí", respondió Yasmina. Se veía tan débil y frágil, como una hoja seca, esperando ser llevada por una ráfaga de viento.

La noche era tranquila, pero en esa casa sus pensamientos eran tan tormentosos. Todos ellos sentían que habían pasado por tantas cosas, y esos pensamientos aún se paseaban en sus cabezas. Todo parecía sombrío y caótico, y la típica luz al final del túnel no se podía observar.

A medida que el sol de la mañana iba reemplazando la noche oscura, la gente despertaba de sus sueños. Saeng abría sus hermosos ojos, y sus largas pestañas se movían. Después de un buen rato, sus ojos finalmente se adaptaron a la brillante luz matutina. Al ser fin de semana, había dormido hasta tarde.

Estiraba sus extremidades y se dio la vuelta, con la esperanza de ver a Hyun durmiendo profundamente, pero nada. El hecho de que su esposo no estuviera a su lado lo tomó por sorpresa. Se preguntó en qué momento se había levantado y por qué no se había dado cuenta. ¿Acaso sus sentidos eran menos agudos ahora? ¿O esto demostraba que Hyun era más hábil de lo que sus sentidos pudieran detectar, y que podría escaparse sin que lo notara?

Sus cejas se fruncieron, Saeng sentía que se desmoronaba al despertarse y no verlo por primera vez. Estaba acostumbrado a despertar y mirarlo durmiendo como un tronco; y a recibir un beso por la mañana. Ahora, sin el abrazo y su beso, se sentía lastimado, incluso miserable.

Sí, miserable. Cuando esa palabra surgió en la mente de Saeng, comprendió lo mucho que estaba apegado a Hyun. Tanto era su apego, que incluso el pasar una mañana sin él, le hacía sentir que su vida estaba incompleta. ¿Era ese afecto tan fuerte una manifestación de amor por su marido o simplemente estaba siendo demasiado sentimental?

"Papito, ¿estás despierto?". KyuHyun corría en el momento en que Saeng aparecía en la escalera, su rostro resplandecía de felicidad. Estaba tan feliz de que Saeng no necesitaba ir a la base militar y podría jugar con él hoy.

Un verdadero amor. 3a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora