El vino adulterado.

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Capítulo 550.

"¡Deberías preguntarle a la Sra. Heo acerca de esto! Creo que podría darte una respuesta más apropiada que yo". Levantó su mirada decididamente. Su rostro repentinamente se tornó tan frío como el hielo. Ya no era más aquel ocioso y despreocupado como solía ser.

"Mamá, ¿qué está pasando? ¿Qué ha sucedido?". Si WoonBin hubiera sido la mitad de inteligente que su madre, no habría hecho una pregunta tan estúpida en ese momento tan delicado. Pero WoonBin era tonto. No entendía el doble mensaje detrás de la conversación entre ellos.

"¿Cómo podría saberlo? ¡Bebe tu vino y no interrumpas, WoonBin!". Yasmina le puso los ojos en blanco a su hijo. ¡Qué hijo tan tonto había concebido! '¡Estúpido! ¿Quieres que admita mi culpa delante de Hyun? Si pudiera hacer que escuchara mi explicación y me creyera, los cerdos volarían. ¡Es imposible!'. Yasmina no pudo evitar burlarse de su hijo en su interior.

"Mamá, ¿por qué te has enojado?, simplemente tengo curiosidad". WoonBin estaba irritado porque Yasmina le había gritado frente a Hyun. Se había sentido avergonzado por ese golpe a su dignidad, y su rostro se entristeció.

Hyun frunció el ceño. De algún modo se sentía impotente ante la terquedad de Yasmina, pues era mucho más grande de lo que había imaginado. Ella había seleccionado cuidadosamente cada palabra que había dicho, y era lo suficientemente astuta como para evitar cada trampa que le hubiera preparado. Era difícil atraparla. Y sin su confesión, nunca habría la oportunidad de llevarla ante la justicia. Sabía que ella era la culpable, pero no podía demostrarlo sin evidencias. Eso era injusto para Saeng. Su amado esposo se habría entristecido al ver su incompetencia.

La atmósfera se volvió seria repentinamente. La anterior actitud apática de las tres personas en esa sala daba paso a un silencio incómodo, tanto Hyun como Yasmina quemándose los sesos para encontrar una forma de salirse con la suya. Para ser francos, Yasmina ya había consultado varios documentos legales que le ayudaban a resolver ese problema. Estaba segura de que nadie sería capaz de acusarla sin pruebas, siempre que ella se negara a admitir su delito. En cuanto a la acusación de Paul en su contra, podía escapar sin problema, acusándole de difamación. ¡Aquello sucedió mucho tiempo atrás, de todas formas! ¡Incluso si hubiera dejado alguna evidencia, ya debería haberse convertido en cenizas después de tanto tiempo!

"No está pasando nada aquí. Mejor que controles tu curiosidad. No te metas en lo que no te incumbe. No te conviene hacerlo". Yasmina no podía gritarle a su hijo en presencia de Hyun, aunque ya estaba demasiado enfadada con él. Tenía que bajar la voz y disimular su furia. Pero estaba realmente irritada por la estupidez de su hijo.

"Discúlpenme, tengo que tomar esta llamada". El celular de Hyun sonó en ese momento. Tomó su celular y entró al baño. No imaginaba que aquella llamada les podría dar una oportunidad a sus enemigos. WoonBin tomó el vaso en cuanto se fue, entregándolo a su madre, quien estaba sentada a su lado. Yasmina vaciló por un momento antes de verter en el vaso varias gotas de la droga que había preparado. El líquido transparente y sin aroma se disolvió inmediatamente en el vaso de vino. El licor puro que estaba en la copa brillaba como un cristal bajo la luz. Lucía perfecto, como si nada hubiera pasado. WoonBin y Yasmina estaban a solo un paso de su objetivo. ¿Cómo podrían persuadirlo para que bebiera esa copa de vino?

En tan solo un par de minutos, la suerte parecía haberse puesto de su lado. Madre e hijo aún peleaban en voz baja, cuando Hyun salía del baño. La escena era igual a la que había dejado cuando tomó la llamada. Nada fuera de lo normal. Por lo que no había razón para que sospechara.

"¿Por qué han dejado de beber? No echen a perder su buen humor por mi culpa", decía mientras caminaba hacia la mesa. Tenía la intención de cambiar de asiento y alejarse lo más posible de WoonBin. Pero al final se dio por vencido con tal idea. No pasaría mucho tiempo en el lugar. Saeng era quien lo había llamado en ese momento. Estaba conduciendo hacia el centro de la ciudad, y estaría en el lugar en menos de treinta minutos. Él se marcharía muy pronto ya que no se pudo obtener alguna evidencia o testimonio que valiera la pena, ¿por qué no hacer que pague sus crímenes de una manera distinta? Quizá en vez de llevarla a la justicia y ponerla en la cárcel, podía hacer que su vida sea más miserable.

"Hyun, no te preocupes por mi madre. Debe estar padeciendo de algún tipo de síndrome menopáusico. Se ha vuelto muy irritable en estos días. ¡Vamos a brindar!", mientras tomaba el vaso que había sido adulterado. Con toda calma, vertió vino en la copa ante los ojos de Hyun. En vista de su enfermedad estomacal, no vertió demasiado vino por temor a que se negara a beberlo. Si eso sucediera, todos sus esfuerzos serían en vano.

Yasmina aún mostraba una actitud distante hacia su hijo. Por lo que mantuvo la cabeza baja, sorbiendo en silencio su vino. Sin embargo los miraba de reojo de vez en cuando, deseando saber si bebería el vino adulterado. Casi se le salía el corazón, latiendo violentamente por el nerviosismo. De pronto, Yasmina pensó en Lucas, quien parecía seguir a Hyun dondequiera que fuera. ¿Cómo podrían llevarlo a la habitación de arriba sin ser vistos, una vez que se mareara por el efecto de la droga? Era imposible llevarlo escaleras arriba frente a Lucas. ¡Eso sería demasiado arriesgado! ¡Lucas sin duda descubriría su malévolo plan!

"¡Está bien! Solo tomaré un poco. En realidad, no me apetece tomar nada. Pero si no lo hago, me verían cómo un hombre pretencioso". Hyun no estaba dispuesto a beber el vino. Pero WoonBin había hablado por él justo en ese momento. Tenía que considerar los sentimientos y salvar su orgullo. Ya había molestado a su madre y se había peleado con él por ese motivo. Por lo tanto, tenía que aceptar el brindis. Es solo una pequeña copa de vino. No estaba a más de la mitad. Un poco de aire fresco era suficiente para disipar el olor del vino. No había porque temer que Saeng supiera que estaba bebiendo. Además, había visto a WoonBin servir el vino con sus propios ojos. ¡No había nada peculiar, ni nada que temer! Sólo una pequeña cantidad de vino, y él podría irse.

"¡Gracias, Hyun! ¡Realmente me estás haciendo un honor! Déjame terminar mi bebida primero". WoonBin bebió su vino mientras hablaba con Hyun. A pesar de que el vino generalmente se saboreaba poco a poco, él lo bebió de un solo trago, pues se encontraba bastante ansioso por que Hyun terminara su bebida lo antes posible. Ahora estaba emocionado y eufórico. Fijando su mirada en Hyun, lo observaba acercar el vaso a su boca.

Sentía cierto deseo hacia él. Sería suyo después de beber su vino. Pronto, tendrían un grato momento en la cama. Sus cuerpos se pertenecían el uno al otro. A pesar de su desvergüenza, WoonBin aún se sonrojaba al pensar en ese momento tan fantástico con el hombre con el que siempre había soñado.

Un verdadero amor. 3a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora