Una pareja cruel.

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Capítulo 452

"No. Conociéndote, no creo que me estés alabando. Dime, ¿qué es lo que quieres decir? Si no le tendré que pedir a Saeng que me preste su revólver, y no te miento cuando te digo que la tentación es grande. Y entonces te quiero ver coqueteando con los donceles, con un agujero en medio del pecho".

¿Quién era Xia Shangguan realmente? Todos sabían que era un inteligente hombre de negocios. Más de algún talento tenía que tener para poder manejar tan bien el YS Group. Después de que asumiera el liderazgo del grupo, nunca más volvieron a perder dinero. Al contrario, las ganancias aumentaron como nunca había ocurrido en el pasado. Para el común de los mortales era una tarea difícil, así que era casi imposible engañarlo.

"¡Dispararme! ¡No seas tan duro conmigo! ¡Estoy diciendo la verdad! ¿Por qué ahora la gente duda cuando se les dice la verdad? ¿Será que todo el mundo sufre de delirio de persecución? A pesar de que el mundo esté tan mal, no pierdas lo más hermoso de esta vida, la confianza, Y para que te quede bien claro, no soy yo quien coqueteo con los donceles. Son ellos los que coquetean conmigo, ¿entendido?".

JungMin, encorvando los hombros, intentando protegerse, como si realmente creyera que él fuera a dispararle. Sabía que este hombre podía ser violento. Todavía recordaba la bofetada que le había dado a SunMin, un hombre que parecía tan impasible. También sabía que no era para nada un hombre sencillo. Para una mayor seguridad, pensó que lo mejor era mantener una cierta distancia y así evitar ser desfigurado. ¡El tenía la mano pesada cuando pegaba! ¡Diablos! Sólo había que ver la cara hinchada de Saeng para saber lo que una marca roja demoraría en desaparecer.

"Vete al infierno. No busques malditas excusas. Sé que por mucho que pronuncies lindas palabras, en tu mente me estás maldiciendo. Ni siquiera necesito que otros me lo confirmen. Lo veo en tu cara". ShangGuan clavaba su mirada en los ojos de JungMin. Parecía tan arrogante que la gente no se atrevía a mirarlo directamente a sus hermosos ojos.

"Cuidado con tus palabras", advirtió SunMin, sin darse cuenta que estaba frunciendo el ceño. No le gustaba cuando él hablaba con garabatos. Tampoco entendía por qué cada vez que hablaban, terminaban peleando.

ShangGuan movió los labios ligeramente, intentando contestar. Pero prefirió quedarse callado. Últimamente, sentía que la presencia de XiuMin los frenaba, que había algo entre ellos que impedía que se dejaran llevar por los sentimientos profundos que tenían en el corazón. A veces pensaba que en realidad no estaba mal. ¡Porque no sería lastimado si no le entregara el corazón! No quería tener la ceremonía de boda antes de descubrir lo que estaba pasando entre XiuMin y SunMin. Por eso había postergado la fecha de la boda, dando como excusa su carga de trabajo.

"La gente siempre dice que los donceles son como arañas. Pareciera que fuera cierto. Siempre te pones sensible y amenazas con matar a alguien". JungMin, quejándose, le dijo a SunMin: "Señor Frío, por favor pídale a tu esposo que no hable así". JungMin no entendía lo que estaba pasando y siguió molestando a ShangGuan. No se daba cuenta de la extraña atmósfera que se instalaba entre ellos.

"Lo que dijo concuerda bastante con lo que pienso. ¿Por qué debería impedirle que hable?". SunMin también estaba molesto estos días. No sabía por qué ShangGuan estaba tan agresivo últimamente. Conscientemente o no, siempre lo esquivaba cuando se acercaba él. A veces no contestaba cuando lo llamaba por teléfono y siempre tenía una buena excusa. Además, había cambiado la fecha de la boda y cancelado la reserva de la iglesia sin siquiera haberlo hablado con él.

¡En fin! Él podía soportar todo esto en silencio. ¡De todas maneras ya estaban casados legalmente y él era libre de hacer lo que quisiera! No necesitaba que lo protegieran 24 horas al día, 7 días a la semana. Y de todos modos, pronto tendrían la boda, era sólo cuestión de tiempo. Él no temía que él fuera a escapar. Pero no se esperaba a que cambiara sus horarios de trabajo sólo para evitarle, por eso no podía pasar a buscarlo después del trabajo. Si no hubieran tenido que venir al hospital hoy, ¡lo más probable es que él se las hubiera arreglado para esquivarlo y escapar lo más rápidamente posible!

"¡Por Dios! Qué pareja más cruel que son". JungMin finalmente entendió que de todas formas, el intimidante Sr. Frío también cedería ante su media naranja. ¡Era completamente asombroso! Entonces, ¿existía algo imposible en este mundo? ¡Y pensó que de ser así, HyungJun podría, algún día, volver a su vida de manera repentina!

"Oh, cuánta gente hay aquí. ¿Será que mi querido señor Kim se despertó?". Se oyó una voz infantil, y apareció una pequeña figura correteando hacia ellos, era KyuHyun. Estaba feliz de cómo los ojos de su padre lo miraba. No pudo evitar intentar subirse a la cama para tirarse encima de él. Por suerte, Saeng tenía ojos de águila. Inmediatamente abrazó a KyuHyun para detenerlo. De lo contrario, los puntos de sutura se hubieran podido abrir por la falta de cuidado de KyuHyun, y el pobre Hyun hubiera tenido que aguantar mientras que le volvían a coser los puntos.

"KyuHyun, ¿qué estás haciendo? ¿No sabes que papá se lastimó y aún está débil?". Saeng se puso serio. Si no detenía a KyuHyun inmediatamente, las heridas de Hyun podrían abrirse de nuevo. De ser así, nadie sabía lo que podía pasar, ni qué tipo de complicaciones podía haber. Durante las últimas veinte horas, había presenciado demasiados accidentes y no podía estar sereno, a pesar de ser un fuerte soldado. Así que fue más severo que de costumbre.

"Lo siento, papito. Es que estaba tan feliz de poder ver a papá despierto. Por eso que recién cometí un error tan terrible. No te enojes conmigo, ¿bueno?", KyuHyun se mordió el labio. Estaba bastante triste por los gritos de su appa. Pero sabía que se había equivocado. Así que aguantó y no lloró. En cambio, bajó la cabeza y siguió pidiéndole disculpas a Saeng.

Un verdadero amor. 3a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora