La Hija De Neji Hyuga |Boruto: Next Generation|

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EL EQUIPO 3 regresaba de una misión solo ellos tres, Tamaki tuvo que quedarse por tener un inconveniente con su esposa.

–¿Que creen que le haya pasado a Tamaki-sensei?– pregunto Kira.

–Seguro que le fue infiel a su esposa– comento Shiro.

–Si es así no es nuestro problema, acabemos con esto de una vez. Tengo algo que hacer...

Ambos compañeros vieron el cambio de actitud de la Hyuga, ambos negaron y fueron a reportar la misión.

(...)

Entregaron el pergamino y bajaron las escaleras abajo estaban el equipo 7 y 15.

Keiko iba a irse a su casa pero Kira la detuvo para caminar hacia el equipo, Shiro soltó un suspiro y las siguió.

–¡Hola! Escuche que tuvieron una misión peligrosa, ¿Cómo les fue?

–¿Eh? ¿Dijiste algo Kira-chan?– pregunto Sumire.

–¿Ah? ¿Que quieres ir a dónde?– Wasabi coloco su mano en su oído.

–Tuvimos.. un problema– comento Namida.

–¿Lloraste cierto?– todos vieron a Keiko.

–Etto... Si, por mí culpa ahora ellas están sin poder oír...

Ella bajo la mirada.

–Algún día podrías matar a alguien– dijo ella –Si no sabes controlar tu Jutsu entonces jamás vas a mejorar y solo matarás a todos, porque eres débil.

–¡Keiko!– exclamarón su equipo.

–¿Que? Le digo la verdad, ¿O prefieren que le diga buen trabajo por casi dejar sordo a su equipo?

–No, pero.. no debes decirlo así.

–Le digo la verdad, si ella no aprende a mejorar entonces no debería ser ninja...

Ella empujo a Boruto de su camino y empezó a irse.

–¿Que le sucede a Keiko-chan?– pregunto el rubio.

–No lo sabemos– respondió Shiro –Estuvo así desde ayer, se está volviendo un problema.

(...)

Keiko hizo los sellos pero un grito la detuvo giro su cabeza viendo a Shiro caminar hacia ella.

–¿Que quieres? Estoy ocupada...

–Tu sabes por qué estoy aquí, ¿que te sucede?– se puso frente suyo.

–Nada, ya vete, quiero entrenar– lo empujó pero volvió a ponerse frente suyo.

–No me iré hasta que me digas que te sucede.

Ella fruncio el ceño, Shiro no iba iba a moverse de allí hasta saber que sucedía con ella. Keiko ya tenía suficiente con lo que pasaba en su casa y no soportaría a su compañero.

–¿Todo ese cambio de humor es por alguien?– ella cerro sus puños –¿Mitsuki? ¿Kira? ¿Yo? O...

Shiro levantó la mirada viendo fijamente a la Hyuga.